El proyecto de ley de Rendición de Cuentas suele acarrear mucho debate, idas y vueltas, tires y aflojes, y más cuando hay un gobierno de coalición. El año pasado no fue la excepción y este, cuando todavía falta más de un mes y medio para que el proyecto de ley entre oficialmente al Parlamento –el límite es el 30 de junio–, parece que también seguirá la tradición. El domingo, en entrevista con el diario El País, Marcela Bensión, encargada de la dirección de política económica del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), dijo que no hay espacio para incrementar el gasto en la próxima Rendición de Cuentas. Su declaración cayó como un balde de agua fría y apagó el fuego de expectativas de los partidos socios de la coalición.

Por ejemplo, el diputado colorado Felipe Schipani (Ciudadanos) dijo a la diaria que no sabe si lo expresado por Bensión “es la opinión del Poder Ejecutivo o de una jerarca del MEF”, por lo tanto, “habrá que ver qué pasa”. Agregó que en su sector aspiran a que en la próxima Rendición de Cuentas se atienda el pedido presupuestal de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) “para poder llevar adelante la transformación de la educación”, aunque todavía no estiman una cifra, ya que el organismo está elaborando la solicitud de presupuesto. 

En la Rendición de Cuentas de 2021 Ciudadanos también pidió más presupuesto para la ANEP, pero Schipani acotó que en aquel momento fue una cifra “más humilde” porque “todavía no estaba en proceso la transformación educativa, pero ahora, concretamente, se pedirá con esos fines”. ”Obviamente, creo que lo que plantea [Bensión] es que no va a haber un aumento sideral del gasto, pero tiene que haber algún tipo de aumento para atender determinadas áreas. Educación es una, para mí es la primordial”, indicó.

El diputado señaló que el Ministerio de Ambiente, a cargo de Adrián Peña (de Ciudadanos), también necesita recursos “para poder viabilizar el funcionamiento” de la cartera, “tiene falencias importantes”, sobre todo en relación al control de la segunda planta de UPM, que en 2023 empezaría a funcionar. “De modo que yo veo complejo que se plantee una rendición de cuentas cero”, finalizó.

Intercambio previo con el equipo económico para ver “qué margen de maniobra” hay

A su vez, el diputado colorado Conrado Rodríguez (del sector Batllistas) dijo a la diaria que “obviamente el MEF es el que tiene los números, el que ve cómo viene respondiendo la economía y cuáles son las proyecciones de crecimiento”. Resaltó que respeta “muchísimo” a Bensión, que es una “enorme profesional” y “tendrá sus motivos para hacer esa afirmación”.

De todos modos, para Rodríguez sería bueno que antes de que se presente la Rendición de Cuentas los legisladores de la coalición pudieran tener un intercambio con el equipo económico (MEF y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto), para ver “qué margen de maniobra” hay dentro del proyecto. “Creo que algún margen puede existir, sobre todo para alguna política focalizada. Obviamente, tenemos que seguir intentando que el gasto sea lo más efectivo posible, que se gaste de buena manera y llegue a quienes tiene que llegar”, indicó.

En su caso, Rodríguez adelantó que insistirá con la derogación del aporte adicional del Fondo de Solidaridad, porque piensa que es en la Rendición de Cuentas que debería aprobarse una norma de ese estilo. El Fondo de Solidaridad se creó en 1994 (Ley 16.524), para financiar el sistema para estudiantes de la Universidad de la República (Udelar) y del nivel terciario de UTU. Más adelante, en 2001, en la ley de presupuesto nacional del gobierno de Jorge Batlle, se creó un adicional a ese aporte (artículo 542) que sigue vigente. El adicional implica que quienes se recibieron en una carrera de la Udelar de cinco o más años de duración a partir del quinto año del egreso deben abonar –actualmente– $ 8.607 pesos anuales, además de la cuota estándar.

Rodríguez sostuvo que si bien quitar el adicional implicaría que se dejaran de financiar “algunas cosas de la Udelar”, es una decisión “que también tiene que tomar el Poder Ejecutivo, atendiendo la situación de los profesionales universitarios”. Además, subrayó que el aporte adicional se había creado “en una situación extraordinaria del país, de crisis económica, y era para darle recursos a la Udelar”. “Pero, desde 2001 hasta ahora, el presupuesto de la Udelar prácticamente se ha cuadruplicado. Por lo tanto, ya no tiene sentido que siga existiendo un adicional del Fondo de Solidaridad”, finalizó.

Cuestión de interpretación

En tanto, el diputado de Cabildo Abierto Álvaro Perrone dijo a la diaria que toma como “oficial” lo dicho por Bensión en la entrevista. Además, adelantó que este miércoles, que el equipo del MEF irá a la Comisión de Hacienda de la Cámara de Representantes, verá si se da alguna instancia para “empezar a planificar reuniones” sobre la rendición. De cualquier manera, señaló que el anuncio de Bensión les cae “como a todo el mundo”, ya que una Rendición de Cuentas con gasto cero “no era lo esperado”, por eso ahora irán a la “discusión interna, para ver qué se puede lograr”.

“Nosotros teníamos expectativas por el último mensaje [del Poder Ejecutivo], del aumento que se les dio a los pasivos y a los [funcionarios] públicos: habíamos interpretado que, de alguna forma, se había dejado un poco de lado mirar tanto el déficit fiscal, y apuntar más a las necesidades del país. Nosotros pensamos que eso ya no se iba a tener en cuenta en esta Rendición de Cuentas, pero ahora vemos que el déficit fiscal pasó a ser prioridad otra vez”, sostuvo.

Prohibido fantasear

Por último, el diputado blanco Sebastián Andújar, que se suele encargar de articular las idas y vueltas de la Rendición de Cuentas, señaló a la diaria que los nacionalistas aún no se han reunido con el propósito de analizar el proyecto. De todos modos, recordó que el lineamiento del gobierno hasta ahora fue “el de la austeridad”, y “aquello que pueda significar un esfuerzo en cuanto a un pequeño aumento del gasto, hasta ahora ha sido muy enfocado en las personas que más precisan y donde hay mayor vulnerabilidad”.

“En estas condiciones económicas, y con la coyuntura mundial que hay, solicitar aumento del gasto hablándole a la tribuna no sería una postura inteligente. Porque para aumentar el gasto hay que saber de dónde conseguir los recursos. Entonces, todos podemos fantasear con un montón de cosas que queremos realizar, pero el problema siempre es de dónde sale el dinero para poderlo llevar adelante”, subrayó Andújar. Por eso insistió con que por ahora no se puede especular y que “lo más inteligente en este momento sería no fantasear con un aumento del gasto sin conocer de dónde sacar los recursos”.