En una “carta abierta” al presidente Luis Lacalle Pou, la alianza de sectores del Frente Amplio (FA) Convocatoria Seregnista celebró la “actitud” del mandatario “de compartir” con la fuerza política de oposición “sus ideas referidas a la reforma del régimen previsional”, un paso que catalogan “como una gestualidad republicana”. “Es un tema de suma relevancia para la población uruguaya y sus efectos involucrarán a las generaciones futuras”, se indicó.

Convocatoria Seregnista lo integran Fuerza Renovadora, Asamblea Uruguay, Partido Demócrata Cristiano, Plataforma y Magnolia, entre otros. En la misiva hecha pública este lunes, apoyan que los cambios previsionales son necesarios, pero “no cualquier reforma”, por lo que al igual que ya definió el FA, son cautelosos sobre fijar posición y piden más tiempo para analizar el anteproyecto del gobierno, además de reclamar un diálogo social con las organizaciones sociales.

En línea con lo dicho en estos días por el exministro de Economía Danilo Astori y otros referentes de la coalición de izquierda, se reafirma “que es necesaria una reforma que dé garantías de sustentabilidad tanto financiera como social”. Al respecto, se analiza que “un régimen que no tenga una trayectoria financieramente sustentable no es un buen régimen”, así como que un esquema previsional “que no contemple las necesidades sociales con equidad tampoco es un buen régimen”.

Para Convocatoria Seregnista se debe “analizar con rigurosidad la propuesta”, porque si bien “una reforma es necesaria”, esto no implica apoyar “cualquier reforma”. A su vez, en línea con lo dicho por el presidente del FA, Fernando Pereira, señalan que la fuerza política se expida “una vez” que tenga el apoyo de todos “los partidos que integran el gobierno”.

“Nuestro posicionamiento deberá referirse a una reforma integral que incorpore todas las dimensiones, incluyendo la consideración del sistema con todas las cajas. No pueden evaluarse las distintas variables de forma aislada, sino ver de forma conjunta los aspectos institucionales (tratamiento de los diversos institutos), financieros (edad de retiro, años de aporte, tasas de reemplazo, formas de financiamiento), sociales (pasividades mínimas, excepciones al régimen general, equidad intra e intergeneracional), etcétera”, dice la declaración de los sectores frenteamplistas.

Pese a lo dispuesto, la alianza interna del FA marca que la “gestualidad” del presidente “se vio opacada por sus declaraciones referidas a que nada se hizo en los gobiernos del FA con relación a la seguridad social”. Ante eso, se recuerdan “algunos hitos” realizados en los anteriores gobiernos, como la reforma en 2008 de la Caja Policial y la Caja Bancaria, que, subrayan, los partidos hoy en el gobierno no votaron. También una ley del mismo año que “flexibilizó condiciones de acceso a la pasividad, favoreciendo a decenas de miles de trabajadores a quienes les faltaban algunos pocos años de aportación al sistema”; una normativa que según el gobierno actual “es responsable del aumento del déficit”, aunque, “sin embargo, sí la votaron”.

A su vez, se recuerda que “en 2017 se aprobó la opción del régimen para los llamados ‘cincuentones’”, derivada de “la necesidad” por “los problemas de diseño de la reforma del año 1996, que desconocía derechos y aportes realizados por las y los trabajadores de esa franja etaria en los años previos a la reforma y, por tanto, arrojaba como resultado una pasividad ruinosa e injusta”.

Se añade que en 2019 se aprobó una reforma de la Caja Militar, “que involucraba un impuesto a las pasividades más altas”, en busca de “racionalizar el sistema y reducir su déficit”. Recuerdan que los partidos hoy en el gobierno “no votaron” la reforma ni el tributo, que “no fue aprobado porque -junto a un diputado del Frente Amplio que hoy reviste en las filas de su colectividad política [en referencia a Darío Pérez]- ni usted ni su partido lo votaron”.

En el final de la misiva, Convocatoria Seregnista establece: “Señor presidente, abordaremos con responsabilidad el desafío de procurar la mejor reforma posible del sistema de seguridad social, que garantice la sustentabilidad financiera y social con sentido de equidad y derechos porque se lo debemos a nuestro pueblo. Y seremos implacables en la defensa de sus intereses. El camino es un diálogo abierto y plural de todos los partidos y las organizaciones sociales”.