Por estos días, varios jerarcas de empresas públicas están analizando si dejan sus cargos antes del 27 de octubre y algunos ya tomaron la decisión de hacerlo. ¿El motivo? La Constitución de la República en su artículo 201 establece que “los miembros de los Directorios o Directores Generales de los Entes Autónomos y de los Servicios Descentralizados, para poder ser candidatos a Legisladores, deberán cesar en sus cargos por lo menos doce meses antes de la fecha de la elección”. Por lo tanto, el 27 de octubre faltará un año exacto para las elecciones nacionales de 2024, y es la fecha límite para renunciar.

Según pudo saber la diaria por fuentes blancas, uno de los jerarcas que ya decidió renunciar a su cargo es el exdiputado nacionalista Richard Charamelo, actual director de Ancap. Charamelo militaba en Alianza Nacional y ahora forma parte de D Centro, la novel agrupación blanca que nuclea a varios dirigentes que apoyan la precandidatura del secretario de Presidencia, Álvaro Delgado. La intención de Charamelo es encabezar la lista del nuevo sector en su departamento, Canelones.

Otro jerarca que ya decidió dejar su cargo es el colorado Gustavo Osta, vicepresidente de la Administración de Ferrocarriles del Estado (AFE), confirmaron a la diaria fuentes coloradas, pero no necesariamente para integrar alguna lista, sino para enfocarse en el trabajo político, de cara a la campaña, dado que Osta forma parte del engranaje del sanguinettismo (el sector Batllistas). Cabe recordar que el numeral 4 del artículo 77 de la Constitución les prohíbe a los directores de los entes autónomos y de los servicios descentralizados, entre otros jerarcas y funcionarios, “formar parte de comisiones o clubes políticos, de suscribir manifiestos de partido, autorizar el uso de su nombre y, en general, ejecutar cualquier otro acto público o privado de carácter político, salvo el voto”. Así las cosas, si algún jerarca no quiere integrar una lista pero igual piensa dedicarse a la campaña, también debe renunciar.

Otro dirigente que está en una situación similar es Julio Luis Sanguinetti, hijo del expresidente Julio María Sanguinetti. Actualmente, es vicepresidente de UTE, y fuentes coloradas señalaron a la diaria que dejará su cargo en breve, “pero no para aspirar a un cargo legislativo”, sino porque siente que “ya cumplió una tarea” en el ente autónomo y estima que el Partido Colorado (PC) necesita de todos de cara a la campaña. Pero la decisión de dejar el cargo en octubre no sólo se da en filas del oficialismo. Por ejemplo, según supo la diaria, el exdiputado del Frente Amplio Jorge Pozzi, actual director del Correo en representación de la oposición, también dejará su puesto para dedicarse a la campaña.

En duda

Como faltan casi dos meses para el 27 de octubre, hay quienes todavía no tomaron la decisión de irse o de quedarse. El exdiputado blanco Pablo Abdala, presidente del Instituto del Niño y Adolescente de Uruguay, está evaluando su situación y aún no lo ha definido. Fuentes de su entorno subrayaron que la decisión no depende sólo del jerarca, “que está muy enfocado en la gestión”, sino también de definiciones políticas de su sector. Abdala es otro de los dirigentes que se fueron de Alianza Nacional; ahora forma parte de D Centro.

En la lista de los que están en duda también aparece el colorado Max Sapolinski, segundo vicepresidente del Banco República, que aún lo está “evaluando”, dijeron fuentes coloradas, y, según las circunstancias, “más sobre la fecha” límite resolverá.

Pero la gran incógnita dentro del PC sigue siendo qué harán los nombres que más suenan como posibles precandidatos presidenciales. Técnicamente, no tienen que renunciar en octubre, porque pueden ser candidatos a presidente pero no a legisladores -entonces, sólo deberían renunciar cuando empiecen a hacer campaña, según lo establece el artículo 77 de la carta magna antes citado-, sin embargo, esto no suele ser lo común. De hecho, excepto algunas excepciones, como la de los frenteamplistas Tabaré Vázquez y Daniel Martínez, a lo largo de la historia de Uruguay, la mayoría de los candidatos a presidente también se postularon para legisladores -senadores, en concreto-.

En el PC, que es el partido del oficialismo que corre de atrás en lo que a candidatos se refiere -porque los nacionalistas Laura Raffo y Álvaro Delgado ya están encabezando actos a toda pompa-, dos de los nombres que más suenan tendrán que definirse a la luz del artículo 201 de la Constitución. Varios dirigentes colorados, sobre todo de la Lista 15, quieren impulsar al presidente de Antel, Gabriel Gurméndez, para que sea precandidato, y le piden que deje el cargo, pero, consultado por la diaria, el jerarca declinó hablar sobre el asunto.

Otro dirigente colorado al que le insisten para que sea precandidato es Robert Silva, presidente del Consejo Directivo Central, sobre todo desde el sector Ciudadanos. No obstante, según dijeron a la diaria fuentes de su entorno, sigue sin haber “una definición” por parte del jerarca.