Yamandú Orsi es el primer presidente de la República, proveniente del Frente Amplio (FA), que es del interior del país, y ese aspecto no pasó desapercibido durante la campaña. Valorado por el expresidente José Mujica por tener una impronta que implica “mirar el interior”, también fue visto de buena manera por dirigentes que, sin ser de sus filas, le dan importancia a su perfil alejado del centralismo montevideano. Por ejemplo, el intendente blanco de Durazno, Carmelo Vidalín, expresó hace dos semanas, al asumir la presidencia del Congreso de Intendentes, que tenía “un afecto muy especial” por el presidente electo, quien posee un especial “conocimiento de la realidad” del interior.

Los primeros movimientos de Orsi, en consonancia con la impronta destacada por dirigentes de todo el espectro, efectivamente tuvieron un enfoque descentralizado. Por ejemplo, el hombre que estará al frente de la prosecretaría de Presidencia proviene del interior del país, aunque hace mucho tiempo desarrolla su carrera profesional en la capital. Se trata del exfiscal de Corte Jorge Díaz, quien nació en Fraile Muerto, Cerro Largo. Según el Semanario Voces, el abogado fue a la escuela y al liceo en su pueblo natal para concluir el bachillerato en Melo. En 1986, sin embargo, llegó a Montevideo para iniciar su camino en el derecho y se quedó viviendo en la capital.

En el caso del gabinete ministerial, de los 14 responsables que se designaron seis nacieron o vivieron gran parte de su vida en el interior. Asimismo, cuatro subsecretarías están integradas por personas que no son de Montevideo.

La presencia de Canelones

En seis de los diez jerarcas ministeriales con vínculos con el interior del país, el factor común es Canelones, ya sea como origen o como lugar de residencia. Uno de los casos -aunque tal vez sea el que tenga menor vínculo con el departamento- es el del designado ministro de Trabajo y Seguridad Social, Juan Castillo, que nació en La Paz, Canelones.

Con vinculación directa a lo que fue la gestión en la intendencia canaria del presidente electo, aparecen la ministra designada de Transporte y Obras Públicas, Lucía Etcheverry, el subsecretario designado de Ganadería, Agricultura y Pesca, Matías Carámbula, y el subsecretario designado de Ambiente, Leonardo Herou. Este último fue el responsable durante la última gestión de Orsi de la Dirección General de Gestión Ambiental y, además, se desarrolló como el coordinador del Centro Coordinador de Emergencias Departamental de Canelones.

Además de ser dirigente del Movimiento de Participación Popular (MPP), al igual que Orsi, Etcheverry también compartió la primera gestión departamental con el presidente electo, al ocupar el cargo de directora de Obras. Luego, en el período 2020-2025, se desempeñó como diputada por el mismo departamento, aunque su origen es salteño. Carámbula, en tanto, ocupó el cargo de director general de la Agencia de Desarrollo Rural, también en el primer período de Orsi. Antes, en la legislatura de 2005, había sido representante suplente por el departamento.

Otro de los elegidos que proviene de Canelones, e incluso fue competidor de Orsi en la elección departamental de 2015, es el senador José Carlos Mahía. En su caso, es oriundo de Las Piedras y pasó gran parte de su carrera política como representante de Canelones en la Cámara de Diputados, lugar donde ingresó en 1996 y se mantuvo hasta 2020, cuando ingresó al Senado como suplente del exvicepresidente Danilo Astori.

También del departamento de Canelones, pero en este caso de la ciudad de Tala, viene la subsecretaria designada de Industria, Energía y Minería, Eugenia Villar. Según dieron a conocer varios medios, su abuelo, Carlos Díaz, fundó el primer comité del FA en Tala. Además, su madre, Rosana Díaz, fue subdirectora del centro de salud de Tala durante varios años.

Desde el resto del país

Con un fuerte vínculo con Rocha aparecen la ministra designada de Defensa, Sandra Lazo, y la viceministra designada de Turismo, Ana Claudia Caram. Esta última fue subdirectora de Turismo de la Intendencia de Rocha (2005 y 2010) y, posteriormente, directora de la misma área en el período 2010-2020. Lazo, por su parte, nació en Montevideo y vivió en Canelones, aunque la crisis de 2002 hizo que llegara a Rocha para establecerse en el Chuy.

Allí realizó su carrera en los medios de comunicación, como comunicadora e informativista en FM Coronilla y FM Oceánica, ambas de esa ciudad, según informa el sitio del MPP. Ya en 2005, y luego de la victoria departamental del FA, asumió como directora de Comunicación de la intendencia. En la legislatura de 2015, ante el pasaje de Andrés Berterreche al Ministerio de Defensa Nacional, asumió la titularidad de la banca en el Senado, puesto que repitió, esta vez como titular, en este período.

Alfredo Fratti, ministro designado de Ganadería, Agricultura y Pesca, proviene de Cerro Largo. Hijo de una familia rural, su vínculo con el campo es una constante en su carrera. Más allá de haberse mantenido como diputado por el departamento desde 2005, ocupó otros cargos de relevancia para el sector agropecuario del país, como la vicepresidencia de la Federación Rural y la presidencia de la Sociedad Agropecuaria de Cerro Largo.

El ministro designado de Turismo, Pablo Menoni, nació en Salto. Sin embargo, se define como “montevideano por adopción”, según una entrevista realizada por la Intendencia de Montevideo, en la que se desempeña como director de Transporte.

La educación y el interior

Trascendiendo su designación para Educación y Cultura, desde una visión más amplia, Mahía dijo a la diaria que entiende que el empleo es la principal dificultad que enfrenta el interior del país. En segundo lugar, se refirió a problemas con el “acceso a derechos básicos, particularmente a la salud”. Esto, a su entender, se ve aún más arraigado hacia el norte del Río Negro.

“La expansión territorial, tanto de los bienes culturales como de la educación, es algo que Uruguay tiene que sostener como política de Estado a mediano y largo plazo”, subrayó durante su reflexión. “La presencia del Estado en general, comparativamente con otros países de América Latina, es muy buena, pero queda todavía mucho por hacer”, agregó también en referencia a la educación.

“Hay que mejorar la accesibilidad para la gente del interior tanto a bienes culturales como a la educación”, subrayó. “El Plan Ceibal es una institución muy poderosa que hay que jerarquizar para que efectivamente podamos sacarle aún más potencial. Creo que la articulación del Plan Ceibal con la ANEP en su conjunto, y con el sistema universitario, es un camino a desarrollar muy importante”, concluyó.

El sector agropecuario y el interior

Carámbula, más allá de su cargo de subsecretario de Ganadería, analizó en diálogo con la diaria la situación del interior de Uruguay mirando la realidad de su departamento, que es muchas veces conocido como “el Uruguay chiquito”. En ese caso, y en términos generales, hizo referencia a la necesidad de encarar algunas dificultades básicas como la vivienda. También llamó a prestar atención a las dificultades que se empiezan a suscitar a nivel de movilidad y, por último, se detuvo en el cuidado del ambiente y más concretamente del agua.

Por otra parte, adelantó a la diaria que su trabajo desde la cartera estará enfocado hacia la “producción familiar, la producción granjera, el sector vitivinícola y el sector de las aves”. “En muchas partes del interior, y también en Canelones, el trabajo agropecuario y la cadena agropecuaria son la principal fuente de trabajo y de generación económica en los territorios”, recordó, dándole valor al sector.

De igual manera, manifestó que en “algunos lugares” hay que “profundizar” ese trabajo, “agregando valor a la cadena agraria”, única forma de crear “un poco más de trabajo y de mejor calidad de vida dentro del sector agropecuario”. “Indudablemente en algunas zonas del interior no alcanza, entonces hay que pensar algunos enclaves industriales”, reconoció. “Hay que ampliar las perspectivas del trabajo vinculado a las cadenas agroalimentarias pensando siempre en la generación de productos y procesos con más valor”, agregó.