Las personas elegidas por el presidente electo, Yamandú Orsi, comenzaron a llegar al hotel Radisson, en la Ciudad Vieja de Montevideo, antes del mediodía. La expectativa por conocer los rostros de quienes ocuparán el Poder Ejecutivo desde el próximo 1° de marzo era alta, a pesar de que en las horas previas ya se habían conocido varios.

Orsi subió al estrado apenas pasadas la 12.30 -la hora pactada para el anuncio- y fue claro al decir que su intención era hacerlo “simple” y que no “demore mucho”. “Voy a dar los nombres de los que han sido designados responsables de los ministerios”, dijo y comenzó a convocar a los jerarcas, que fueron subiendo al escenario.

La conformación del gabinete siguió varios criterios, según analizó en diálogo con la diaria el politólogo Daniel Buquet, principalmente aquellos que forman parte de la “ley de formación del gabinete”: balances internos, cuota de género e idoneidad.

Siguiendo esos criterios, el Movimiento de Participación Popular (MPP) encabezará cinco ministerios, Seregnistas dos (Cancillería y Educación y Cultura), Vertiente Artiguista, Partido Comunista, Partido Socialista, La Amplia, PAR uno cada uno, mientras que dos ministros son independientes (Economía e Interior). En cuanto a la paridad por géneros, considerando los 28 cargos (ministros y subsecretarios), serán 18 los hombres (64,3%) y diez las mujeres (35,7%).

En esa dirección dijo que Orsi trabajó en la línea de “darle un ministerio a cada grupo que no fuera el MPP”. “De alguna manera, no hay una proporcionalidad: la mitad fue para el MPP y luego uno para cada uno”, consideró. En tanto, para la politóloga Camila Zeballos la conformación del gabinete “tiende a ser representativa” de lo que sucedió en las elecciones de octubre.

Ambos analistas coinciden en señalar que Orsi conformó un gabinete basándose también en la “confianza personal”. “Me pareció que el gabinete tiene mucha gente de Orsi, muy cercana a él, casi como designaciones personales. Está claro que lo de [Gabriel] Oddone y [Rodrigo] Arim no son cosas que vengan de ningún reparto político y de género, allí el presidente nombró gente de confianza”, dijo Buquet, y también señaló a los jerarcas escogidos del MPP, que son muy cercanos al presidente electo.

“Hay unos puntos clave donde el presidente tiene gente suya, sea independiente o sectorial. La mano del presidente tiene incidencia”, señaló Buquet. “Me aparece además que asignó gente de su confianza en lugares estratégicos, como Economía, Interior, Defensa, Exterior. Más allá de la cuestión del sector, pesó más la confianza personal del presidente”, declaró, por su parte, Zeballos.

La idoneidad y la visión sobre cómo funcionará el Consejo de Ministros

La idoneidad fue uno de los puntos marcados por Buquet y Zeballos para el análisis de la conformación del gabinete. El politólogo sostiene que en varias áreas ministeriales Orsi colocó gente idónea, como en Economía, Cancillería y Ambiente.

“Hay idóneos evidentes, pero no es un 100%. Hay algunos nombres que llaman la atención. Tengo expectativa porque pienso que, en general, nombraron gente de muy buen nivel de solvencia en el trabajo, en la gestión, más allá de si tuvieron preparación específica para ocupar ese puesto”, declaró Buquet. En esa dirección comentó la formación en ingeniería eléctrica que tiene el futuro ministro de Turismo: “Puede ser un fenómeno como ingeniero, pero el turismo no tiene mucho que ver. El ministro no tiene que ser un experto”, explicó.

Para Zeballos, hubo una intención propia de Orsi de nombrar técnicos, ya que “son fusibles que pueden saltar fácilmente”. En otra dirección, comentó que el próximo desafío será la conformación de quienes administrarán las empresas públicas, ya que allí puede haber sí un nivel paritario más importante, pero también puede volver a redituar la búsqueda de no desordenar el Parlamento, en este caso la Cámara de Diputados.

Sobre el funcionamiento del Ejecutivo, Buquet dijo: “Pienso que va a haber que esperar, pero es posible que el Consejo de Ministros vaya a funcionar con regularidad y sea un ámbito de discusión política. Se debe tratar de discutir internamente para no llevar la discusión a nivel parlamentario o incluso a la Mesa Política del FA”, cerró.

La paridad: entre “se quedó un poco atrás” y el armado “no es políticamente incorrecto”

Las visiones sobre la participación femenina en el gabinete son dispares, según los politólogos. Buquet dijo que Orsi se “quedó un poco atrás” en la integración femenina y que el MPP “puso a las mujeres y pagó las cuotas de género”.

“Eso es resultado de un problema de género que tiene la política uruguaya, que tiene muy pocas jefas políticas. Tiene mucho más jefes varones”, dijo. “Se quedaron bastante lejos del ideal. No es que no se aproximaron”, sintetizó.

Zeballos rescató que durante la campaña Orsi dijo que no sería mitad y mitad, pero que sí se iba a buscar aproximarse a esa paridad. “Dijo seis y hubo cinco. Está por debajo, pero no creo que sea un tema muy particular, ni políticamente incorrecto, ni complejo. La vara y la expectativa se habían puesto muy arriba, en función del comentario de Carolina Cosse. Si mirás en total, hay diez. En fin, es la historia de Uruguay”, consideró.