Con el voto afirmativo de diputados de todas las bancadas, la cámara baja aprobó este martes el proyecto de ley de adhesión al Tratado de Cooperación en Materia de Patentes (PCT), el cual llegó al legislativo en la misma jornada, con la modificación acordada el lunes en la Comisión Especial de Innovación, Ciencia y Tecnología sobre la exclusión del capítulo dos del PCT, tras propuesta de Cabildo Abierto (CA).

El diputado del Frente Amplio (FA) Gustavo Olmos, integrante de la comisión, había confirmado a la diaria que, a pesar de las diferencias suscitadas sobre el tema a la interna de su partido por la reserva del mencionado capítulo, se logró alcanzar un acuerdo de bancada para dar el voto afirmativo. Con el FA y CA conformes con la modificación, el Ejecutivo aceptó la reserva para destrabar la situación.

“Después de 30 años de espera, reclamado por todo el ecosistema innovador de la ciencia y de la tecnología, hoy iniciamos la aprobación de un Tratado de Cooperación en Materia de Patentes”, expresó el diputado informante Rodrigo Goñi. El legislador nacionalista resaltó que no formar parte de este tratado fue “una omisión que durante 30 años significó frenos y obstáculos” para los investigadores uruguayos frente a los de los 157 países que sí adhieren.

“Nuestros investigadores, cuando querían patentar sus inventos, lo hacían en otros países, y muchas veces lo hacían con recursos del propio Estado uruguayo”, subrayó Goñi. El legislador destacó que formar parte del PCT también favorece la llegada de inversiones para el campo de la innovación, ciencia y tecnología. En esa línea, señaló que tras cada investigación el resultado se va a poder patentar de forma ágil, obteniendo los réditos económicos correspondientes. “Eso implica un círculo virtuoso, porque cuando se obtengan los resultados, se va a poder invertir en otras investigaciones”, agregó.

¿Por qué la adhesión no se dio antes?

Olmos recordó durante la sesión parlamentaria que la iniciativa de adhesión al PCT había ido al Poder Legislativo por primera vez durante el mandato de Luis Lacalle Herrera, pero también durante el segundo gobierno de Julio María Sanguinetti, la presidencia de Jorge Batlle y en el segundo gobierno de Tabaré Vázquez.

En ese sentido, el diputado frenteamplista detalló que en esas instancias el motivo por el que no prosperaba era el “temor” sobre el “impacto que podía tener esto en la industria nacional”, y, en concreto, en la farmacéutica. Recordó, además, que se sumaba una menor conciencia por parte de la academia y de los propios legisladores de las “implicancias” positivas que tendría la adhesión.

Olmos subrayó que ante ese temor, “muchos países avanzaron pidiendo que alguna parte del tratado no aplicará en sus casos”. Sin embargo, agregó que con el paso del tiempo esas reservas han ido cayendo y muchos países, más allá del “capitalismo central”, forman parte del acuerdo en su totalidad, por ejemplo Brasil, Cuba, India y China.

Por último, con relación al impacto en la industria farmacéutica, resaltó la importancia en esta ocasión de un estudio realizado tiempo atrás por los economistas Juan Dubra y Néstor Gandelman, quienes a finales de 2022 presentaron un trabajo en el que proyectaron que a 20 años de la adhesión se daría una caída de las ventas internas de productos sin patente -asociados a producción nacional- de 6,6 millones de dólares.

Esta caída sería del 1,2% del total de las ventas y 1,6% de las ventas de los laboratorios nacionales. Y, a su vez, el impacto respectivo en el empleo del sector sería de -0,5%. Como contracara, el estudio indicó que el PCT generaría un aumento de las ventas de productos patentados de 7,9 millones de dólares.