La Asociación para Personas con Enfermedades Cerebro-Vasculares (APECV) inició en diciembre de 2017 una petición en la plataforma Change.org para que los tratamientos para las enfermedades cerebrovasculares sean gratuitos. Hasta ayer, la petición había sido firmada por 17.699 personas; está orientada a respaldar el reclamo que los integrantes de APECV hacen en otros ámbitos, como el Parlamento (la petición está dirigida a la Cámara de Senadores) y el Ministerio de Salud Pública (MSP).

“Somos un grupo de pacientes que padecemos o padecimos una enfermedad cerebrovascular, que nos unimos con la finalidad de lograr que todos tengamos el derecho a un tratamiento endovascular cuando está indicado”, plantea la petición. Detallan que esos tratamientos son para atender los problemas derivados de aneurismas cerebrales, malformaciones arteriovenosas y accidentes cerebrovasculares. “En algunos pocos casos hay tiempo para conseguir dinero y en la mayoría de los casos no, porque son enfermedades que se tratan de urgencia o de emergencia para salvarnos la vida”, agregan. La asociación plantea que en Uruguay mueren siete personas por día por estas enfermedades, y que varios de esos fallecimientos se podrían haber evitado si las personas hubieran podido acceder a estos tratamientos. Acusan al Estado de “dejar solos” a quienes se murieron por no tener plata para pagar estos tratamientos. La carta es acompañada por 12 testimonios de personas que requirieron, y otras que requieren todavía, estas prestaciones. Según dijo, los tratamientos, en el sector privado, tienen un costo que puede oscilar entre 1.000 y 10.000 dólares.

Uno de esos testimonios es el caso de Gabriela Suárez, presidenta de APECV, quien relató que hace diez años tuvo un “aneurisma carótido oftálmico gigante” –una dilatación anormal originada en el segmento oftálmico de la arteria carótida–. En su momento, pudo acceder al tratamiento correspondiente, le colocaron 18 coils –espirales pequeños y blandos de metal, que se colocan dentro de un aneurisma– y hoy lleva una vida normal y no toma medicación. “Esta es una prueba de que se necesita tener el tratamiento endovascular para todos, por la cantidad de casos que hay”, expresó Suárez el 13 de marzo ante los legisladores de la Comisión de Salud del Senado, a donde concurrió acompañada por el resto de las personas que dieron sus testimonios en la petición. Según Suárez, las mutualistas no cubren estos tratamientos y dijo no tener claro qué ocurre en el sector público. “En los últimos seis meses del año pasado, por ejemplo, hubo 49 casos en ASSE de pacientes que necesitaban tratamiento endovascular y sólo uno lo recibió”, dijo a los senadores. Para que sea igual para todos es que piden que los tratamientos se incluyan en el Plan Integral de Atención en Salud. En el grupo hay familiares de personas que fallecieron por no haber accedido a tiempo a la cirugía que correspondía, mientras que hay otros que sí la recibieron, ya que estaban en condiciones de costearla. Presentaron, también, el caso de un niño que tendrá que ser operado en setiembre y no cuenta con el dinero necesario para ello.

En diálogo con la diaria, Suárez comentó que la asociación junta fondos y hace festivales para ayudar a cubrir fondos de algunos tratamientos, y que trabaja junto con Juan Ceretta, abogado del Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República, para presentar recursos de amparo que garanticen el acceso a las prestaciones, cuando se puede esperar esos plazos.

El lunes 28 de mayo fueron recibidos por el subsecretario del MSP, Jorge Quian. Según Suárez, Quian les recomendó formalizar la asociación civil –tramitar la personería jurídica– y les pidió que armaran un proyecto con lo que solicitan y que se lo presenten.