Este lunes el hospital Maciel hizo la presentación oficial del protocolo de atención a personas en situación de calle que han sido víctimas de violencia. La guía establece un procedimiento que garantiza la “prestación de servicios de atención médica necesarios”, además de coordinar diferentes organizaciones y organismos, entre ellos, el Ministerio del Interior y el Ministerio de Desarrollo Social, con el fin de que las personas en situación de calle puedan recibir atención integral. Hace una semana que el centro implementó el protocolo y ya detectó un caso, según informaron las autoridades.

El documento establece “la obligación” de que el médico tome las “precauciones necesarias” y mediante un interrogatorio posatención recopile información personal del paciente, incluidos los motivos de las lesiones. Si se determina que se trata de un caso de violencia, el profesional debe informar a quienes estén haciendo el servicio 222 para que “tomen conocimiento” de la situación y, en caso de ser necesario, se envíe un oficial de policía al centro de salud para retener la denuncia por escrito. Si eso no es posible, el funcionario policial de guardia en ese momento también puede tomar registro de la denuncia. A su vez, si el paciente decide retirarse del hospital sin el alta médica también se debe dar aviso a la Policía. La modalidad también aplica para personas “indocumentadas o extranjeras”.

La modalidad se aplicó porque el hospital Maciel atiende a personas en situación de calle que han sufrido lesiones derivadas de “diversas circunstancias” y estas personas pueden “sentir miedo o reticencia” a hablar de la situación por temor a represalias. Por eso, más allá de la atención médica, se busca “brindarles la oportunidad de acceder a servicios sociales”.

Tiempos de espera y atención

En la instancia también se presentaron algunos números sobre la atención de urgencias en la puerta de emergencias. Según los datos, las consultas durante el invierno aumentaron respecto del período prepandemia, ya que mientras que en junio de 2019 hubo 2.891 consultas, en 2023 durante el mismo mes se registraron 3.037.

En cuanto a los ingresos, en junio de 2023 se registraron 2.515 pacientes que llegaron por sus propios medios, 461 ambulancias y 91 móviles policiales. A su vez, el 70% de los pacientes “ingresan por emergencia”.

En tanto, si bien el control de los tiempos de espera de las ambulancias en la puerta de emergencia aún no está cerrado, Andrea Vaucher, jefa de emergencia del hospital, dijo a la diaria que “seguramente se redujeron” respecto de años anteriores. A su vez, agregó que en la emergencia se atiende 15% más de personas en situación de calle. Acotó que este año el hospital cuenta con las partidas del Plan Invierno que se reparten dentro de toda la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), y que en esa línea cuenta con dos enfermeros y dos médicos que están en la policlínica de 14.00 a 20.00, de lunes a sábado, y que permiten agilizar la atención.

Si bien se mejoró en algunos puntos, en la emergencia también se detectaron algunos problemas, por ejemplo, 90% de las camas de urgencia permanecen ocupadas más de diez horas al día, y “si bien disminuyeron en número” los pacientes en espera de ser atendidos, al dividir la emergencia se redujeron los espacios y eso “retrasa el proceso”.