El informe de cuentas nacionales del Banco Central del Uruguay confirmó lo que el Ministerio de Economía y Finanzas se venía venir: el Producto Interno Bruto (PIB) del país decayó 0,2% en el primer trimestre del año, si se lo compara con el mismo período de 2018. Además, la medición de forma desestacionalizada marca que no hubo variaciones respecto del trimestre anterior.

En los cuatro trimestres de 2018 la economía había crecido respecto de sus respectivos números de 2017, aunque la variación había ido disminuyendo. De 2,2% en el primer trimestre de 2018, se alcanzó un crecimiento de 2,5% en el segundo trimestre, que se moderó en 2,1% en el tercer trimestre y en 0,6% entre octubre y diciembre. En términos desestacionalizados se observa mejor el desaceleramiento: en el primer trimestre el crecimiento fue de 1,1%, en el segundo de 0,2%, en el tercero de 0% y en el último de 0,1%.

En comparación con el primer trimestre de 2018, las actividades que más cayeron en esta oportunidad fueron “comercio”, “reparaciones”, “restaurantes y hoteles” e “industrias manufactureras”. Esto fue parcialmente contrarrestado por otras que crecieron como “transporte”, “almacenamiento y comunicaciones” y “suministro de electricidad, gas y agua”. En la detracción de la actividad respecto del primer trimestre del año anterior también influyeron las exportaciones, que presentaron una caída en volumen físico de 6% respecto del primer trimestre de 2018. En tanto, las importaciones disminuyeron 7,9%.

Este martes, el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, dijo en una entrevista a Radio Uruguay que la cifra “confirma las dificultades de crecimiento que ha tenido el Uruguay en los últimos meses” y también en el segundo semestre del año pasado. “La economía uruguaya hace meses que no crece y requiere medidas que ataquen las causales fundamentales de esa falta de crecimiento, y en la medida de lo posible recuperemos lo antes que se pueda niveles de actividad superiores”, dijo el jerarca. Eso, sostuvo, permitiría mejorar las cifras de empleo actuales y encarar el déficit fiscal, “otra de las mayores preocupaciones macroeconómicas del país en este momento”.

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Para Astori, “la variable clave es la inversión y por eso estamos poniendo todo el acento en su reactivación en todos sus componentes”: pública, privada, del exterior y nacional. Según dijo, a partir de los “grandes esfuerzos” y las medidas tomadas por el gobierno a partir del segundo semestre del año pasado, “hay esperanzas” de que en el semestre final de este año se puedan ver “algunos indicios y elementos de juicio más firmes acerca de la recuperación de ese crecimiento”.

El ministro recordó que la caída de inversión “viene gestándose desde hace tiempo”, y actualmente ronda el 16% o 17% del PIB, cuando llegó a alcanzar 23% en los “mejores años”. “Estamos trabajando desde hace dos años en la instauración de estímulos realmente contundentes para mejorar las condiciones de rentabilidad de la inversión. Eso tiene un período de maduración y a veces hace que transcurra un tiempo entre el momento en que se da la inversión y en el que esta da sus frutos”, aseguró. Luego dio algunos datos a su juicio alentadores: por ejemplo, dijo que la comisión de aplicación de la ley de inversiones recibió 13% más de proyectos durante el primer cuatrimestre respecto del período enero-abril de 2018, pero con un monto de dinero 351% más alto.

La economía y la campaña

El diputado frenteamplista Alfredo Asti reconoció que se sabía que el dato no iba a ser bueno e “indica las dificultades de crecimiento del país”. “La situación internacional y regional influye, afectó exportaciones y el turismo, y además hubo una caída del consumo. Quizás el valor del dólar bajó la compra de productos importados, que bajaron más que las exportaciones”, interpretó. Al igual que Astori, el legislador llamó a insistir en incentivar un aumento de las inversiones, y vaticinó que las obras públicas proyectadas tanto por el gobierno como por la Intendencia de Montevideo y los proyectos de participación pública-privada contribuirán a reactivar la economía.

En contraposición, el precandidato colorado Ernesto Talvi escribió en Twitter que estos resultados son “consecuencia inevitable de la falta de rentabilidad y competitividad de la producción y el turismo nacional”. “Se va a seguir perdiendo empleos. Está claro que el gobierno no tiene idea de qué hacer para reactivar la economía”, expresó.

En tanto, el senador y candidato del Partido Independiente, Pablo Mieres, consideró que la situación es “confirmatoria de lo que viene ocurriendo hace meses y ahora de una manera más categórica”. “Lo que no se entiende es la ausencia absoluta de respuesta de un gobierno que no toma medidas. Está haciendo la plancha para que termine su período y vamos a ver qué país deja, porque si estás mal y no tomás medidas, la situación va a empeorar. Y además tenemos que bancar a Astori desde el Olimpo hablando como si estuviera todo bárbaro y criticando a los que opinan diferente”, dijo.