Con la aprobación de la ley de urgente consideración (LUC) en julio de 2020, el Parlamento votó la creación del Instituto Nacional de la Granja (Inagra), un viejo reclamo del sector granjero. Pasados casi dos años, no hay avances en la fundación del organismo. El martes, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Fernando Mattos, se reunió con distintas gremiales del sector granjero para hablar sobre la situación del Inagra y del Fondo Nacional de la Granja.

En diálogo con la diaria, el titular de la Dirección General de la Granja (Digegra), Nicolás Chiesa, explicó que el motivo principal por el que no se siguió adelante es la falta de recursos: “El ministro dijo que para crear el instituto que la granja se merece, se precisan recursos importantes. Una parte podría ser aportada por el mismo sector, como en todos los institutos del sector agropecuario [...] Eso es difícil de lograr en la granja, es difícil tener recursos 100% estatales y crear un instituto mínimo para poder funcionar con recursos”.

Por su parte, Erick Rolando, presidente de la Confederación Granjera del Uruguay (CGU), habló con la diaria y planteó que “han pasado más de dos años desde que se aprobó la LUC y el proyecto de creación del instituto, y esto se ha ido postergando”. Dijo que entienden el argumento de las consecuencias que generó la pandemia, pero agregó que “cabe reflexionar sobre la importancia del sector y del Inagra”, y que si la granja no es contemplada van a seguir desapareciendo productores.

Consultado por la diaria, el senador frenteamplista Sebastián Sabini dijo que el sector tiene una función estratégica: “Es un sostén de la soberanía alimentaria del país y articula producciones enfocadas en la exportación y otras en el mercado interno”. Afirmó que “el instituto de la granja, junto con la participación de los diferentes actores de la cadena, podría articular estas líneas estratégicas en el corto y largo plazo con los diferentes fondos del Estado que se vuelcan al sector y las políticas de fomento que se desarrollan”.

Por eso, consideró que es fundamental su conformación y que esta debe ser “con la participación de los diferentes actores sociales que hoy siguen esperando”. Recordó que se están incumpliendo dos leyes aprobadas por el Parlamento que establecen su creación, y que fue una votación de carácter unánime, todos los partidos estuvieron de acuerdo.

Manifestó que, más allá de que el presupuesto del Inagra sobrepase al de la Digegra, debe contar con un presupuesto propio para su instalación, y añadió que espera que en la Rendición de Cuentas aparezca el artículo referido a la instalación del instituto y que se brinden los recursos para el sector, porque no alcanza con la actividad productiva, “tiene que haber políticas públicas activas. El instituto podría jugar un rol fundamental en su aplicación”.

Sabini contó que el Frente Amplio hizo un pedido de informe en la Cámara de Diputados a través del representante Nelson Larzabal y que él hizo referencia al tema en la sesión del Senado el pasado martes, en la media hora previa: “Estamos a la espera de una respuesta de estas intervenciones desde el punto de vista legislativo y no descartamos otras medidas a nivel parlamentario para seguir poniendo el tema arriba de la mesa”.

Chiesa comentó que no se maneja una posible fecha para la creación del instituto y que su presupuestación es algo que se va a seguir trabajando junto con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), pero la prioridad la tiene el Fondo Nacional de la Granja, “si hay recursos es para eso”. Los problemas del fondo se deben a que está fijado en pesos, pero los gastos que atiende se incrementan producto de la inflación y las variaciones del dólar.

Rolando señaló que en la reunión con el MEF no se habló de cuánto se destinaría para fortalecer el fondo, que tiene un déficit de 200 millones de pesos por año. “El fondo subsidia cosas como la póliza del Banco de Seguros del Estado para daños climáticos, proyectos de exportación, de industrialización y manejo regional de plagas, más recursos que se destinan para la UAM [Unidad Agroalimentaria Metropolitana]”, agregó.

Pese a la mala situación, Chiesa señaló que hoy se están cumpliendo con todos los compromisos porque había un remanente de la administración anterior, pero este año eso se acabó. Consultado sobre cuál sería el monto con el que se planea reforzar al fondo, Chiesa respondió que eso aún no se sabe y que también se está trabajando con el MEF.

En tanto, el presidente de la CGU apuntó que hay cosas que “no les cierran” y que “generan dudas”: “¿Cuál sería el monto para fortalecer el fondo?, ¿cuánto se aleja del presupuesto que iba a haber para el Instituto? En su momento, en la Junta de la Granja se manejó que iba a haber un presupuesto de 800 millones de pesos por año [para el Inagra]; en este momento el fondo tiene 330 millones por año. Tendría que haber por lo menos 200 millones sólo para seguir haciendo lo que se está haciendo [...] Es como dar un cheque en blanco a algo que no sabemos si va a solucionar el problema o cómo se van a usar esos recursos”.