La Mesa de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) se reunió este lunes en Young, departamento de Río Negro, para analizar la situación en la empresa Claldy (Compañía Láctea Agropecuaria Lecheros de Young), con la que viene negociando desde diciembre, cuando la firma envió a 30 trabajadores a seguro de paro. Con posterioridad a esa instancia, se hizo una asamblea de Trabajadores Unidos de Claldy (Tucla), la organización sindical de base de la empresa.

El dirigente de la FTIL Pedro Toledo dijo a la diaria que el viernes hubo una tripartita en la que la empresa planteó que necesitaba despedir a 40 trabajadores porque no le alcanzó el ahorro generado en diciembre y enero tras negociar con el sindicato. El acuerdo permitió a la empresa envíos rotativos a seguro de paro, la no convocatoria a trabajar, la quita de horas nocturnas y el no pago de licencias, según Toledo.

El sindicalista agregó que se les preguntó a los representantes de Claldy “qué ahorro va teniendo la empresa y en qué lo volcaba, qué invirtió para mejorar la gestión o para pagar deudas, pero no hubo respuestas”.

“Pero se despacha diciendo que para ahorrar más lo que necesita es 40 despidos. A los trabajadores de la empresa se lo planteó el martes pasado y agregó que iba a ser una medida inmediata, pero el viernes en la tripartita señalaron que va a ser en abril como una avanzada en este proceso”, sostuvo Toledo.

Continuar negociando

Lo que se puso a consideración en la asamblea fue “ver qué camino seguir, si el de la negociación o ir directo a un conflicto”, el camino “de la discusión y la negociación es lo que llevamos. A la asamblea le planteamos que rechazamos los 40 despidos, y los despidos que sean y necesitábamos que avalaran, que se continuarán agotando las intstancias de negociación para quitar de la mesa los despidos”.

Para Toledo, la empresa no va a solucionar “los problemas que tiene” despidiendo trabajadores. “Es una empresa totalmente endeudada por mala gestión, una empresa que hizo malas inversiones, que invirtió tarde, que tiene maquinaria vieja, obsoleta, que no tiene reparación ni mantenimiento. Los problemas de ellos son muy graves como para decir que se arregla con 40 despidos”, enfatizó.

Una de las “malas inversiones” que le señalan a Claldy es haberse asociado en Alimentos Fray Bentos con un grupo argentino para montar una planta de producción de leche en polvo. Esta planta, que opera desde 2017, terminó quitándole remisión de leche a la propia Claldy y a otras empresas uruguayas, perjudicando al sector lácteo nacional.

La remisión de leche también se ha visto disminuida por la sequía que afecta al país. El Poder Ejecutivo envió al Parlamento un proyecto de ley para crear un Fondo de Reconversión de las Industrias Lácteas, que fue aprobado a fines de diciembre por ambas cámaras. La asistencia, consistente en 13 millones de dólares, está destinada a proyectos de empresas con dificultades que impliquen un rediseño industrial acompañado por un plan de negocios, que deberá ser aprobado por una comisión técnica.

Este martes habrá una bipartita entre representantes de Claldy y Tucla, y el miércoles una tripartita integrando al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y a la FTIL, para continuar las negociaciones.