Minutos después de que comenzara la audiencia pública convocada por el Ministerio de Ambiente (MA) en la que se abordó el proyecto que presentó la compañía PGS Exploration, que se encarga de hacer campañas de prospección sísmica offshore y vende los datos a las petroleras para que puedan tener información sobre si existen o no hidrocarburos en la plataforma marina, Redes-Amigos de la Tierra emitió un comunicado en el que informó que no iba a participar en la instancia. “El Ministerio de Ambiente actual no brinda ninguna garantía de credibilidad al proceso. Más bien, todo lo contrario”, se pronunció la organización en la misiva.
Indicó que no está dispuesta a “participar en un proceso de consulta establecido por la Ley 16.466 de Evaluación de Impacto Ambiental, para que el MA, tal como ha quedado demostrado con la aprobación del proyecto Neptuno-Arazatí, les dé la espalda a los aportes de organizaciones sociales y se dedique a asegurar los intereses de las empresas en lugar del bienestar de su pueblo, territorios y sistemas ecológicos”.
La organización remarcó que el rechazo a la iniciativa de la nueva planta potabilizadora fue “abrumador de parte de las organizaciones sociales, la academia, el sector científico y la población en general”. “En la audiencia pública sobre el proyecto, realizada el 3 de octubre de 2024 en la localidad de Rafael Perazza, fue evidente el amplio acuerdo existente entre las más de 1.000 personas que participaron sobre los impactos negativos que tendrá el emprendimiento”, manifestó.
Redes-Amigos de la Tierra planteó que no tienen “ningún motivo para pensar que este MA ahora protegerá una participación ciudadana real ante los proyectos de exploración y explotación petroleras”, y añadió que “sobran las razones para prever lo contrario”.
Enseguida puso sobre la mesa “la necesidad de debatir democráticamente en nuestro país sobre estos proyectos de prospección y exploración de hidrocarburos en el mar, en un contexto mundial en el que es urgente caminar por una transición energética justa que nos permita evitar los peores efectos del cambio climático global”. “No tiene sentido seguir con audiencias proyecto a proyecto, que además de antidemocráticas no atienden la necesaria mirada de un contexto de crisis socioecológica global que compromete la sustentabilidad de la vida. Urge abandonar los hidrocarburos y, al mismo tiempo, cuidar la salud de los pueblos y los ecosistemas, incluyendo los marítimos”, finalizó el comunicado.