Hace algunos días, vecinos del balneario rochense Cabo Polonio (un área protegida) informaron sobre la intención de la empresa de telefonía celular Movistar de colocar dos antenas de 1,50 metros por 30 centímetros para permitir la comunicación vía celulares en la zona del faro (un monumento histórico).

Más allá de la posibilidad o no de instalar antenas para comunicaciones en un predio que acaba de ingresar al Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP), algo que debe ser determinado por la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), de acuerdo a las denuncias que recibió la diaria, la empresa habría intentado instalar esos artefactos sin los permisos y los estudios de impacto ambiental correspondientes.

Al parecer, los técnicos que pensaban instalar las antenas habrían intentado ingresar a la zona del faro, próximo a las rocas, que está a cargo de la Armada Nacional, en acuerdo con autoridades de la Armada. ¿Quién autoriza la instalación de antenas celulares? ¿En el caso del Cabo Polonio la Armada puede pasar por alto una determinación de la Dinama? ¿Está enterada la Dinama de lo que pasa en la Armada? Son preguntas de algunos vecinos de Cabo Polonio ante este incidente.

El movimiento fue corroborado a la diaria por José Luis Genta, director interino de la Dinama, que manifestó que los guardaparques de la zona evitaron el ingreso de los técnicos porque no contaban con la autorización necesaria para dicha faena. Genta explicó que la Dinama le comunicó a la Armada Nacional y a la empresa cuál es el procedimiento en estos casos: “pedir una autorización ambiental previa a la Dinama, tal como lo establece la ley de Impacto Ambiental”, dijo.

A su entender, lo sucedido demuestra que “el sistema funcionó, los guardaparques cumplieron su misión y la empresa se enteró de que existían disposiciones que seguramente desconocía”.

Para Genta, es evidente que si la zona no hubiera estado dentro del SNAP, seguramente se hubiera colocado la antena sin previa autorización (aunque los procedimientos en la franja costera lo requieran), ya que “es más difícil hacer cumplir la normativa donde no hay guardaparques vigilando. El hecho de que ahora Cabo Polonio sea área protegida y tiene recursos humanos trabajando para cuidarlo nos permitió evitar el procedimiento”.

Consultado al respecto, el coordinador general del SNAP, Guillermo Scarlatto, aseguró que no se instaló ni se instalará ninguna antena sin los permisos correspondientes. Mucho menos sin un estudio que evalúe el posible daño ambiental.

Anselmo Borges, jefe de Relaciones Públicas de la Armada Nacional, explicó a la diaria que desde hace mucho tiempo la Armada mantiene un convenio con la empresa de telefonía móvil, anterior a la fecha de ingreso de Cabo Polonio al SNAP, pero “ahora cambiaron las exigencias y hay una normativa clara”. “No se va a hacer nada que no sea legal y que no tenga autorización”, aseguró. Además señaló que el faro ya tiene antenas de comunicación instaladas.

A su entender “no hubo ni omisión ni mala fe por parte de la Armada. Si el guardaparque no frenaba la entrada de los técnicos, seguramente le iban a pedir la autorización en el faro”. la diaria intentó comunicarse con la empresa, que prefirió no hacer declaraciones.

Una vecina de Cabo Polonio, que quiso mantener el anonimato, dijo a este medio que si bien ya existen antenas telefónicas en el faro, porque uno se puede comunicar sin problemas, lo que molestó a los vecinos fue la intención de instalar las antenas sin la autorización correspondiente en un lugar que es área protegida. “Sabemos que seguramente se van a instalar, pero no está bien que haya determinadas personas o empresas que logren sortear reglamentaciones que están vigentes. La idea es tener el menor impacto de contaminación visual posible y preservar el lugar lo más natural que se pueda. El desafío es ver si realmente estamos protegidos y comprobamos que existe una protección del área, porque sabemos que quisieron entrar y los guardaparques los frenaron, no sé si por la denuncia que hicimos o porque existe conciencia de preservar el lugar. Con esta nueva administración parece que las cosas son más serias”, concluyó.