Los carriles preferenciales que ya están operativos y señalizados en forma completa se encuentran en los siguientes tramos: Rivera entre Bolivia y Gallinal, Caramurú entre Gallinal y San Marino, Rivera entre Bulevar Artigas y 18 de Julio, Guayabo entre Jackson y Constituyente, José Enrique Rodó desde Carlos Roxlo hasta Bulevar Artigas.

“Todos esos tramos están funcionando, tienen vigilancia de tránsito diaria y personal encargado de instruir a los conductores sobre su uso”, dijo a la diaria Justo Onandi, director interino de la División de Tránsito y Transporte de la IMM.

El Plan de Movilidad Urbana (ver recuadro) también incluye la implementación de una serie de carriles de uso exclusivo para transporte capitalino, el primero de los cuales se instalará sobre la avenida Garzón (seis kilómetros entre camino Colman y San Quintín cuyo costo es de 21 millones de dólares) y comenzará a construirse la semana próxima, apenas finalice la licencia en la construcción.

A diferencia de los carriles exclusivos, los preferenciales se ubican sobre la senda derecha de la calzada, están señalizados en el pavimento con pintura termoplástica (mediante una franja blanca que separa las sendas), con cartelería vertical de tipo pescante (una columna con un cartel que avanza sobre la calzada con la leyenda “Sólo bus” y tiene el dibujo de un ómnibus) y la indicación de que está prohibido detenerse y estacionar de 7 a 22 horas. No tienen separación física de la calzada y allí tiene preferencia el transporte colectivo pero los vehículos particulares pueden circular por ellos unos metros para girar a la derecha o para ingresar a un inmueble.

Esta semana estará operativo el carril preferencial de la avenida 8 de Octubre en el tramo de Presidente Berro a Batlle y Ordóñez, donde hubo que reubicar paradas de taxímetros, determinar zonas de carga y descarga en las calles transversales y trabajar sobre canteros que imposibilitaban la señalización en el pavimento.

En los próximos días se habilitará un tramo de Avenida Italia desde Tres Cruces hasta Gallinal; también los carriles preferenciales de las calles Mercedes, Fernández Crespo, Eduardo Víctor Haedo, Colonia, Agraciada desde Paso Molino hasta el Palacio Legislativo, Millán desde San Martín hasta Instrucciones, y Batlle y Ordóñez desde Coronel Raíz hasta Rivera.

Los carriles exclusivos en los que sólo puede circular transporte colectivo estarán ubicados en el centro de la calzada e incluirán paradas. En ellos los vehículos no podrán ingresar para realizar ningún tipo de maniobras. Los carriles exclusivos requieren infraestructura vial: calzada nueva, separación física, iluminación, refugios en el centro de la calzada, rampas para personas discapacitadas, obras de saneamiento y enjardinado. La empresa Stiler fue la ganadora de la licitación; las obras comenzarán el 11 de enero y se extenderán durante 18 meses.

Onandi mencionó que esta medida permitirá “ordenar el tránsito y dar mayor seguridad y agilidad al transporte colectivo de pasajeros porque separa el tránsito del vehículo particular por un lado, y el transporte colectivo por otro”.

Además, consideró que la implementación de los carriles mejorará las frecuencias y dará previsibilidad al transporte porque se podrá mantener velocidad constante y los conductores no se toparán con vehículos estacionados en las paradas, entre otras cosas. “En cuanto a los tiempos, en una de las frecuencias establecidas mejoró un minuto en un tramo de 16 cuadras. No es tan fácil ganar un minuto en el transporte colectivo”, dijo.

Más movido

El objetivo general del Plan de Movilidad Urbana es la reestructuración y modernización del transporte urbano de Montevideo. El 30 de diciembre de 2008 Uruguay firmó un convenio (Contrato de Préstamo Nº 2040/OC-UR) con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para establecer una línea de crédito por US$ 100.000.000 destinada a financiar el plan. El programa incluye entre los componentes a desarrollar: construcción y adecuación de carriles exclusivos y preferenciales; conservación y ampliación de la red vial, incluyendo obras de alumbrado público; readecuación de áreas verdes y calzadas; obras en terminales de trasbordo e intercambiadores y reacondicionamiento urbano en sus zonas de influencia; ampliación y sincronización de la red de semáforos; señalización horizontal con pintura termoplástica; señalización vertical con cartelería; incorporación del sistema de información y billetaje electrónico en el transporte colectivo; campañas de sensibilización y difusión; consultas y encuestas a la población de Montevideo. Podrán circular por estos carriles preferenciales las unidades del transporte colectivo de pasajeros, taxis con pasajeros y vehículos en emergencia (Policía, Bomberos, ambulancias, vigilancia de tránsito). En casos de fuerza mayor el transporte colectivo podrá abandonar la circulación por el carril que le corresponde, pero deberá retomarlo inmediatamente que le sea posible. (Fuente IMM)

Medida veloz

Según Onandi, hace 30 días que se instalaron los carteles que impiden estacionar y detenerse en las zonas de carriles preferenciales que están operativos, por lo tanto hay lugares de la ciudad en los que la grúa pasa a diario. “Creemos que es un plazo suficiente para que la gente aprenda que allí no se puede estacionar”, dijo.

Sin embargo, no están multando a quienes circulan por donde no deben: “Los inspectores están informando, sabemos que es algo novedoso para la ciudad. Se está sancionando sobre la previsión de estacionamiento porque ese cartel lo conocen todos”.

Aunque comparte el espíritu de la medida, una comisión de vecinos y comerciantes de Avenida Italia se movilizó para buscar soluciones alternativas. Como primera medida repartieron volantes para divulgar que a partir del 10 de enero no se podrá estacionar ni realizar tareas de carga y descarga sobre Avenida Italia, estimando que la nueva reglamentación afectará negativamente a 20 mil personas en forma directa o indirecta.

Gustavo Espínola, representante de esa comisión, dijo a la diaria que la celeridad con que la IMM implementó la medida no les permitió elaborar un plan de contingencia para dar soluciones a clientes y vecinos.

“Es importante dejar claro que nuestra postura no es en contra del Plan de Movilidad que busca que el transporte circule en forma más ágil. No nos oponemos a la conveniencia de la mayoría, sólo nos parece improcedente la forma en que llevaron adelante la gestión”, aclaró.

Para los vecinos y comerciantes de esa zona, el gran perjuicio surge de no haber encontrado una solución en conjunto con la IMM que contemplara los intereses de quienes durante muchos años desarrollaron su vida y su actividad comercial en la zona.

La comisión pidió a la IMM una prórroga de 60 días para reconvertir actividades, pero el director de la División Tránsito y Transporte, Gerardo Urse, negó esa posibilidad.

Al respecto Onandi dijo que estudiarán las alternativas planteadas por los vecinos y comerciantes, pero insistió en que Avenida Italia a veces se satura de autos que dificultan la circulación y que la prioridad es del transporte colectivo. Agregó que se realizaron varias encuestas de hogares para indagar sobre los distintos medios de transporte, la conformidad con éstos, las mayores necesidades de los usuarios, la ubicación de la parada más cercana, entre otras cosas. “El dato más relevante fue que cerca del 70% de la población de Montevideo utiliza el ómnibus como medio de transporte y eso alienta a generar este tipo de políticas”, concluyó.