Dale que sube

El dólar estadounidense cerró a un promedio de 19,714 pesos, lo que implica un aumento de 1,45% respecto a los 19,432 con los que cerró el pasado viernes. Además, en las pizarras del Banco República la punta vendedora subió 45 centésimos, ubicándose por encima de los 20 pesos. El cierre diario fue de 19,55 y 20,10 por dólar, compra y venta respectivamente.

Según detalló Lorenzo, ayer se comenzó a implementar de forma efectiva “la política por la cual el MEF asume un papel protagónico en materia de emisiones de títulos en el mercado local”, lo que permitirá “tener una política más activa en el mercado de cambios”. En consecuencia, y en sentido inverso, el Banco Central (BCU) perderá importancia como emisor, que fue su “papel fundamental durante el año pasado en esa materia”.

El jerarca detalló que hay “dos factores que están motivando y orientando” esta nueva política: el primero es “reducir el costo del déficit parafiscal y fiscal”, que “el año pasado fue decididamente abultado […], producto de las altas emisiones que realizaba el BCU”; y el segundo busca “tener un impacto más directo sobre el mercado de cambio”. “Esperamos que a partir de hoy [por ayer] tengamos mucha más capacidad de influir e impactar positivamente sobre el tipo de cambio […] y confiamos en que esta operativa conduzca en el corto plazo, pero también en el mediano plazo, a un aumento del tipo de cambio y a una mayor capacidad de las compras del sector público”. Ello se hace para evitar que las empresas exportadoras uruguayas pierdan competitividad con el exterior, algo que ha sido reiteradamente demandado al gobierno desde el sector privado.

Más vale prevenir

Lorenzo explicó que tal determinación se adoptó en aplicación de “un criterio preventivo”: las exportaciones son “el motor del crecimiento económico”. Destacó que si bien “las cifras de exportaciones son francamente alentadoras”, debe tenerse en cuenta que “para que este proceso tenga continuidad y se fortalezca en el tiempo es necesario que se utilicen las políticas públicas, y en particular la parte relativa a compras de divisas por parte del gobierno, de la mejor manera posible”. De ese modo, el Poder Ejecutivo es la institución del Estado que pasa a intervenir en el devenir cotidiano del mercado financiero local, función que suelen ejercer -no sólo en Uruguay- los bancos públicos, entre ellos los centrales de cada país. “Estamos seguros de que este mayor activismo del MEF y su vuelta como un actor preponderante en el mercado de cambio va a impactar positivamente sobre la cotización de la moneda extranjera”, añadió.

El titular de Economía manifestó que la sostenida valorización del peso no es un fenómeno exclusivo de Uruguay sino que ha sucedido en “otros países de la región”. Reconoció que “esas presiones están presentes” y aseguró que el gobierno dará una respuesta consistente: “Vamos a actuar con estos instrumentos de la manera más intensa y eficaz posible para enfrentar estas dificultades y evitar que ningún acontecimiento proveniente de estas tensiones y presiones del entorno internacional puedan afectar la competitividad del país”.

Señaló que la administración coincide “con el sector exportador respecto a que el tipo de cambio es una variable suficientemente importante como para que en ningún caso sea subestimada”. “Estamos haciendo un aporte decisivo para perfeccionar y optimizar la forma en que el Estado actúa en el mercado de cambios para enfrentar de mejor manera los desafíos de la competitividad”, defendió el ministro. “Esperamos que esto tenga impacto positivo para enfrentar los desafíos del crecimiento de las actividades”, agregó.

Advirtió, además, que “de ninguna manera” se utilizará “ningún mecanismo de control de los mercados de capitales para enfrentar estas dificultades”. “Creemos que tenemos en los elementos que estamos manejando herramientas suficientes y potentes como para actuar sobre el mercado”; se aguarda que sus repercusiones sean “rápidas” y “duraderas”. Valoró que el gobierno continúa aplicando “un régimen de cambio flexible” y apuntó a precisar la aspiración oficial. “Las compras realizadas por el gobierno, por distintas agencias gubernamentales, se adecuan a una nueva realidad, que tiene que contribuir decididamente a preservar y acrecentar la capacidad de competir de nuestras exportaciones”, transmitió Lorenzo.

Decir gre, gre

Conocidas las novedades sobre el mediodía de ayer, la diaria consultó a la secretaria ejecutiva de la Unión de Exportadores, Teresa Aishemberg, quien lamentó que las “grandes expectativas” fijadas en torno a los anuncios que haría el gobierno quedaran frustradas porque éstos “son insuficientes”. Reclamó modificaciones tributarias que “mejoren la competitividad del sector” y argumentó que “es muy difícil planificar negocios si no se ha certificado el monto y el período de compra de estos dólares”. “No sabemos cómo se va a instrumentar”, criticó también.

La directiva de la gremial determinó que “todas las medidas que se tomen son positivas” pero exigió la adopción de otras “que sean puntuales y permanentes” en beneficio del sector. “Un aumento de la devolución de impuestos indirectos, exoneración de tarifas, reducción de los aportes patronales y una mejora de las tasas del régimen de prefinanciamiento de exportaciones”, enumeró, aún lejos de las opciones manejables para la administración.