Dos mujeres de gobierno serán las encargadas de asumir la tarea. Beatriz Ramírez, directora de Inmujeres, tendrá a su cargo los anuncios, mientras que la ministra de Desarrollo Social, Ana Vignoli, expondrá sobre la importancia de la fecha y la valoración de las mujeres en la sociedad uruguaya.

En este contexto, Ramírez adelantó que durante 2011 el Mides continuará evaluando el Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades y Derechos -que involucra a distintos organismos nacionales y de la sociedad civil-; incrementará los servicios de atención en materia de violencia doméstica, como la instalación de casas de breve estadía para las víctimas, y mantendrá la capacitación de los funcionarios que trabajan de cerca con personas vinculadas a la problemática.

La titular de Inmujeres dijo que se aprovechará la sensibilidad especial que se manifiesta en la sociedad y en el sistema político durante marzo en torno a la violencia de género, más teniendo en cuenta el incremento de las fallecidas por esta causa en 2010, más aun que por delitos como los de rapiña.“Hay un interés por parte del Instituto de que haya un compromiso mayor. De hecho, estamos pensando que haya una estrategia nacional de lucha contra la violencia que nos permita aunar las diferentes acciones y dispositivos en una, de manera de tener un abordaje integral”, explicó Ramírez.

Al ser consultada sobre por qué hoy no existe esa forma de trabajo, indicó que Uruguay cuenta con una línea de base que es el Consejo Consultivo Nacional de Lucha contra la Violencia, que si bien tiene un perfil interinstitucional, se pretende “dar un salto cualitativo y armar una estrategia más a largo plazo, una estructura más organizada con una modalidad que dé cuenta de todo lo que se hace, y se pueda trabajar en forma más organizada”.

Sobre el “8 de marzo” opinó que no se trata de un día de celebraciones sino de conmemoraciones, puesto que las brechas de género todavía persisten. “Podemos recorrer y recordar los avances, eso siempre es bueno, pero también sabemos que estamos todavía en un tiempo en que no alcanzamos los objetivos para cerrar esas brechas”, puntualizó.

Por su parte, la coordinadora ejecutiva de la Secretaría de la Mujer de la Intendencia de Montevideo, y presidenta de la Comisión de Equidad y Género, Elena Ponte, también hizo su valoración sobre el mes de las mujeres. Considera que hay temas más importantes que la violencia doméstica, pero que “son más difíciles de hacer visibles y graficar”, pero reconoció que están en la base del problema de la violencia y de otros asociados, como la falta de oportunidades igualitarias.

Uno de los puntos que mencionó como prioritarios refiere a los cambios culturales, a los que definió como fundamentales para cambiar estereotipos que se adquieren desde la niñez y que son reproducidos en forma permanente. “Adjudican roles fijos a las mujeres y los varones, y son roles que no responden a la realidad de la presencia de la mujer hoy en la sociedad. Sin embargo, se reproducen y hacen que se limiten los derechos de las mujeres”, argumentó Ponte.

Otro tema abordado en la gama de actividades que se planifican para marzo es la conciliación entre hombres y mujeres en los ámbitos hogar-trabajo. El fin último es que haya una distribución de las tareas en el hogar entre todos los miembros de la familia, y que haya un esfuerzo de ambas partes de la pareja “para que no sean sólo las mujeres las que concilian y arreglan sus horarios de trabajo”, ejemplificó.

Para Ponte estos cambios están en la matriz de la lucha contra la violencia doméstica ya que “muchas veces la mujer soporta la situación de violencia porque de acuerdo a los estereotipos se cree que ésa es la situación de la mujer, la de estar dominada por su pareja”. También mencionó que hay otros factores que inciden y que hacen que una mujer soporte la agresión de su pareja, entre los que destacó el factor económico.