El programa de la Feria de Promoción de la Lectura y el Libro en San José tiene 36 páginas. La hoja es A4 y no es porque tenga mucho espacio en blanco, ni porque haya una actividad por hoja. Ocurre que durante esta semana los maragatos tendrán actividades artísticas de todo tipo y en simultáneo en distintos lugares. Si se acercan a la zona de la plaza 33 Orientales, en la capital departamental, podrán concurrir a talleres de ilustración, escritura, reciclado de papel, maquillaje artístico, guion y narración de cómics, hasta las clásicas e infaltables presentaciones de libros, stands de las editoriales y embajadas, clown, recitales, títeres, mucha narración oral, poesía, stand up, transmisiones en vivo de programas de radio, entre muchas cosas más.

Plantear propuestas que van más allá de la compra y venta de libros es una consigna que se trasluce ya desde el eslogan de la feria de 2012: “En un libro todo el Universo”. La maestra Celeste Verges, asesora en educación de la Intendencia de San José y organizadora del evento, contó a la diaria que desde su inicio hace siete años la feria tuvo una gran variedad de actividades: se partió de un concepto de texto muy amplio “en el que lo que se puede leer no es sólo la letra, sino también el dibujo, el gesto, la música. Y existe la simultaneidad de actividades porque lo que buscamos son seres pensantes que tomen el programa como un texto más para descifrar y para leer y luego sean capaces de elegir”.

Esta versatilidad se refleja también en la inclusión de toda la comunidad, incorporando a la feria a instituciones deportivas que participan en el espacio lúdico desarrollado en la plaza 33 Orientales o, por ejemplo, la presentación del libro "El propio fútbol uruguayo" (del periodista Andrés Reyes) por medio de una atajada de penales que realizará el arquero de la selección maragata (quien meta el gol se lleva el libro de regalo).

El escritor y docente maragato Pedro Peña comentó que la feria “pone la lectura en primer plano. Suele ser una actividad relacionada más con el esfuerzo que con el disfrute. Yo lo siento como una apuesta a la complejidad en detrimento de tanta burda simpleza cotidiana. Lo segundo es que acerca a los lectores a una serie de autores a los que, si no existiese la feria, les sería muy difícil llegar a presentar sus libros en San José. Entonces los niños ven a sus escritores infantiles favoritos y se dan cuenta de que son personas de carne y hueso, lindas y feas como cualquiera, y hasta capaz que eso les genera ganas de escribir. ¿Cómo contabilizar esa ganancia?”.

“Participar en una feria de este tipo -que se realiza a pocas cuadras de donde vivís, de donde tus alumnos y amigos viven- está bárbaro. He participado como escritor en la Feria de Montevideo y en la Feria Internacional del Libro en Lima, y en ese aspecto no tienen nada que ver. Acá hablás con los gurises y con tu entorno todo, y las presentaciones se vuelven instancias de discusión, de debate, aprovechás para juntarte con otros que no ves desde hace tiempo, vienen escritores cuyas obras has tenido la precaución de hacerles conocer a tus alumnos y entonces se dan encuentros notables”, cuenta Peña, que brindará un taller de escritura y presentará su policial "Tampoco es el fin del mundo", que acaba de editar por el sello Estuario.

Liturgias

La feria tiene muchísimas actividades relacionadas con las artes escénicas y no sólo espectáculos, como el espacio Del Texto a la Puesta en Escena, coordinado por los encargados de la gestión del Espacio Cultural Ignacio Espino, Intermedio Producciones. Según contó el gestor cultural Leonardo Urrutia, el espacio “consiste en la presentación de espectáculos de artes escénicas, ponencias, presentaciones de libros, charlas institucionales como las de ATI [Asociación de Teatros del Interior], INAE [Instituto Nacional de Artes Escénicas] y SUA [Sociedad Uruguaya de Actores]. Contamos con la presencia de escuelas de formación como EMAD [Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático], IAM [Instituto de Actuación de Montevideo] y el Teatro en el Aula de la IM, y tendremos una exposición permanente del CdF [Centro de Fotografía de la IM] y el Archivo de la Imagen del Diario El País denominada "Figuras que buscan aplausos" que realiza un recorrido por los protagonistas de las artes escénicas nacionales e internacionales”.

Estampas

La feria de este año tiene como particularidad el brindar especial atención a los ilustradores, que en Uruguay no tienen una presencia contundente en la feria del libro realizada en la capital. Se están haciendo talleres a cargo de ilustradores de Argentina, Brasil y Uruguay en escuelas públicas y privadas, además de los talleres que brindan en la carpa del arte de la feria.

Además, se realiza un Encuentro de ilustradores donde habrá un taller, un panel donde se debate el valor de la ilustración en la obra literaria. El miércoles tuvo lugar el debate “Ayer y hoy en la ilustración latinoamericana”.

Para quienes quieran ver además de escuchar, se cuenta con la exposición "Ilustra Brasil", instalada hasta hace muy poco en China, que muestra el trabajo de 25 ilustradores brasileños.

Sacerdote

Una de las principales atracciones de la feria fue la llegada del español Fernando Savater, encargado de la inauguración con una conferencia en el teatro Macció de la capital maragata denominada “Educar en defensa propia”. El filósofo y escritor logró sentar personas en cada una de las 700 butacas del teatro y se tuvo que poner una pantalla en la puerta para las personas que no pudieron ingresar.

Al día siguiente se le hizo una entrevista en radio desde la carpa de comunicaciones sobre temas que no fueron tratados en la conferencia. De acuerdo a Verges, Savater reflexionó sobre “la necesidad de volver a la época en donde los grandes pensadores aportaban sus ideas o supuestos para reformular o asegurar nuestros propios pensamientos y a partir de ahí construir proyectos de gestión ciudadana”.

Acerca de la llegada del español, el escritor Pedro Peña afirmó: “El discurso de Savater es el de un divulgador, no el de un filósofo de sistema. Para aquellos que estamos en la enseñanza y que la padecemos y la disfrutamos a la vez, sus palabras no son nuevas. Sí creo que su charla sensibilizó a varios incautos sobre la importancia de una educación de calidad y de lo caro que sale no promover ese tipo de educación y seguirla piloteando sin rumbo y sin invertir en el capital humano. Habló y al hacerlo dijo cosas que los docentes sabemos, pero lo dijo para un público más amplio, y como lo dijo él… Es decir, como lo dijo Savater, el filósofo español, capaz que alguien le da corte”.

Feligresía

Cada edición de la Feria de San José está precedida por un trabajo con la comunidad. Así, cada vez que llega un escritor a la feria su obra es distribuida con anticipación en las escuelas, liceos, instituciones deportivas, clubes de lectores, dependiendo cuál sea el público destinatario. La idea es que llegado el momento de la visita el escritor no sea un desconocido que viene a hablar, sino que se enfrente a un público conocedor de su obra y que esto facilite el intercambio.

La feria es financiada en un 80% por el gobierno departamental y el 20% por entidades públicas y privadas. Verges la considera el broche de oro de un trabajo de promoción de la lectura que se realiza durante todo el año; es quizás el evento que tiene más difusión, pero durante los meses restantes este equipo continúa trabajando. Entre otras cosas, se organizan actividades en bibliotecas y se dispone el mantenimiento de otras circulantes que van al medio rural, a cárceles y hospitales.

A esto se suma una campaña de alfabetización de mujeres rurales que tuvo como fruto la acreditación de ciclo de educación primaria de alrededor de 300 mujeres de entre 20 y 70 años del medio rural maragato que luego ingresan a otros niveles educativos como el bachillerato o la UTU.

Ecumenismo

Lo que también se repite en las diferentes ediciones de la Feria de San José es la presencia de extranjeros. Este año se hicieron presentes los escritores Ana Catalina Burbano, Lucía Chiriboga Vega y Nicolás Cuvi (Ecuador), las narradoras orales Hanna Cuenca (Venezuela) y Canela Sarasvati (Venezuela), las ilustradoras Ana Luisa Stok y Paula Frankel (Argentina), Cecilia Esteves (Brasil), y el cierre tuvo como protagonista a la actriz argentina Norma Aleandro.
Además se homenajeó al escritor paraguayo Augusto Roa Bastos, a cargo del presidente de la Fundación homónima,Antonio Carmona, que contó con la presencia de Mirta Roa, hija del escritor. Verges comentó que la idea este año era traer al dibujante argentino Quino, pero no fue posible.

Aleluya

“Yo, que no soy oficialista de la intendencia, por así decirlo, opino que la feria ha llegado para quedarse, sin lugar a dudas. Se ha constituido en el evento (cultural o no cultural) más importante del año en el departamento, y eso es mérito de las personas que la organizan. Lo mejor de todo esto es que nos hemos acostumbrado, como ciudad, a esperarla, a preguntar por ella tres o cuatro meses antes, a adivinar cuál será el ‘invitado estrella’ de ese año”, opina Peña.

Para Urrutia “siempre hay aspectos a mejorar, como continuar con una política de extensión y descentralización de forma que no sólo las instituciones que se encuentran cercanas al centro puedan abrir sus puertas adhiriéndose a la feria”.

Peña remata: “Todos los años se hace el mismo reclamo: no a la superposición de actividades. Pero hoy creo que ésa es ya una marca distintiva de la feria. Hay tanta cosa que alguna te vas a perder. Otro aspecto que me animo a sugerir es que se haga un seguimiento del impacto de la feria y del cumplimiento de sus objetivos. La pregunta sería así: la feria de promoción de la lectura, ¿hace que las personas lean más? Es probable que sí. Ojalá que sí”.