En los últimos años los comienzos de clase han estados marcados, entre otras cosas, por denuncias sobre el estado edilicio de los centros educativos y la desmotivación que manifiestan los jóvenes para formarse como maestros.

Sólo en Montevideo, en los institutos normales, la matrícula disminuyó 20% en comparación con el mismo período de 2011. Según explicó Cristina Hernández, directora efectiva de los institutos, mientras que en 2011 a esta altura del año se habían inscripto unas 330 personas aproximadamente, hasta el viernes la cifra promedio era de 280 estudiantes. Detalló que desde el centro educativo se han abordado problemas que tienen que ver con las dificultades que los jóvenes enfrentan en la currícula escolar; para afrontar esta situación se han desarrollado actividades de complementación. Sin embargo, la maestra y docente de pedagogía sostuvo que "el problema real es el salarial", sobre todo para el maestro que trabaja en la escuela pública y en situación de contexto crítico una vez que egresa.

Ni bien ingresa al sistema educativo estatal, un docente gana por 20 horas semanales, distribuidas en cuatro horas diarias en la escuela, 10.000 pesos. Hasta ahí podría considerarse un sueldo no tan bajo para la cantidad de horas de contrato, pero "esas cuatro horas de clases nunca son cuatro horas de trabajo", pues no incluyen ni la corrección de trabajos ni la evaluación de los alumnos, así como tampoco la planificación de las clases siguientes en función del desempeño que se viene dando en el grupo. El sueldo percibido conlleva que los maestros trabajen doble turno, lo que reduce aun más el tiempo destinado a la proyección del curso y de cada uno de los pequeños en particular. "Todo eso hoy un maestro que trabaja en dos escuelas no lo puede hacer; eso explica, en parte, la baja de la calidad de la educación", comentó Hernández.

"Lo ideal es trabajar un turno o en escuelas de horario extendido con un buen sueldo". Estas últimas cuentan con actividades de extensión curricular que están a cargo de profesores de educación física o docentes con otras especialidades, por lo que el maestro dispone de tiempo para corregir y planificar, mientras otro docente permanece con ellos; "si no el maestro se convierte prácticamente en un cuidador de niños".

La docente no dudo en afirmar que quienes hoy se inscriben en magisterio "son vocacionales al máximo"; "los grupos de ahora son excelentes, desde el punto de vista del conocimiento y del compromiso de la carrera [...] pero, sin dudas, no alcanza con esos chiquilines". Otro problema que suele darse con frecuencia es que una vez recibidos, los educadores optan por trabajar en otros rubros donde la remuneración es mayor.

Óscar Gómez, actual subsecretario del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), fue más optimista al decir que no se puede generalizar la realidad de los futuros maestros a partir de lo que sucede en Montevideo. Comentó que una de las últimas resoluciones que tomó como consejero de Educación Primaria, fue habilitar más escuelas de práctica en el interior por la demanda registrada. Asimismo, recordó que en 2011 la matrícula de inscriptos en magisterio, en todo el país, fue superior a la de 2010. También el número de egresados fue levemente superior. Sostuvo que en Montevideo son muchas las posibilidades de educación terciaria que las que hay en el interior, por lo que la capital nacional no es representativa del país.

Más allá del leve asenso de 2011, señaló que es necesario desarrollar políticas porque "que los números no sean de decrecimiento no quiere decir que no hay que tomar medidas concretas". Aumentar los sueldos es una opción. Gómez señaló al respecto que en Uruguay, en el siglo pasado, "el salario de un docente era casi igual de un parlamentario".

Desde el gremio docente de Montevideo también se visualiza que disminuye el interés de los maestros egresados por ejercer en Primaria. La secretaria general de la Asociación de Maestros de Montevideo, Daysi Iglesias, dijo que sólo en educación especial, en la instancia de selección de horas, sobraron 46 cargos, mientras que en educación común hay 70 cargos disponibles que volverán a ser ofrecidos mañana. Iglesias catalogó como "sorprendente" que no se hayan completado los cargos y expresó que las autoridades "deberían atender este fenómeno".

Ayuda medida

En un corto plazo una de las soluciones al problema será la aprobación de la implementación de becas para los estudiantes de formación docente. Edith Moraes, directora del Consejo de Formación en Educación, adelantó que la iniciativa que está en proceso consiste "en mejorar el número de titulados en la docencia".

La beca estará destinada especialmente a quienes se formen para maestros para no tener que apelar a los no titulados para el dictado de clase, cosa que sí se da en Educación Secundaria.

Según datos estadísticos, hace siete años la matrícula viene descendiendo y la apuesta es volver a tener 1.000 egresados por año. En la actualidad terminan los estudios poco más de 600. Es por ello que prevén otorgar unas 400 becas desde el primer año de la carrera hasta el cuarto. Por otra parte, quienes ya están cursando cuarto año podrán aspirar a recibir otro tipo de beca, financiada con otros fondos. "Los alumnos que tengan pendientes hasta diez asignaturas podrán inscribirse para obtener la beca, el estudiante deberá hacer un plan y tendrá que recibirse este año". En el correr de la semana habrá novedades sobre ambas iniciativas.

Sobre lo que todavía no hubo noticias es acerca de la designación del reemplazo de Gómez en Primaria. Al respecto, el subsecretario del MEC opinó que el Consejo Directivo Central ha tenido otras responsabilidades que atender, por eso no está definido quién ocupará su cargo. Igualmente, opinó que "Primaria es un organismo muy sólido que puede perfectamente trabajar sin todos sus integrantes".

Refacción

En cuanto a la polémica desatada sobre la refacción de los 219 locales educativos, Gómez indicó que el inicio de clase “no será sin ningún problema porque nunca tener una escuela en obra es la mejor situación”. Sin embargo, se tomarán medidas para reducir el impacto que generen las obras que están llevando adelante a partir del convenio generado con la Corporación Nacional para el Desarrollo.

Entre otras cosas, tienen pensado contratar técnicos prevencionistas para que colaboren asesorando a los docentes en el posible desarrollo de las clases. También se maneja la propuesta de trabajar en clases dobles por un tiempo determinado, alquilar locales y aulas prefabricadas (contenedores con ventilación cruzada, aislación térmica y acústica, y electricidad).