“Hay buen clima”, dijo Antonio Carámbula, subsecretario del MTD a la diaria, y no se refería a las condiciones meteorológicas sino a las relaciones entre operadores turísticos privados y públicos. El vínculo entre los sectores gastronómicos, de hotelería, transporte, comercio, agencias de viajes, se vuelve estratégico para el diseño de una temporada de verano que busca rentabilidad en los negocios particulares.

Con la intención de colaborar en el buen desarrollo de las políticas que se llevan a cabo en el sector, representantes del MTD se reúnen cada 15 días con los delegados de esos rubros. “Hemos detectado alguna situación que se salía de la raya y por eso apelamos al compromiso de los operadores para buscar un equilibrio adecuado en la relación precio-calidad. Esto se observó en el sector gastronómico, en el que vimos algunas cosas que despertaron preocupación en relación al precio”, comentó Carámbula, quien informó que fue transmitido el mensaje de alerta a los principales operadores turísticos en una reunión que mantuvieron con autoridades el lunes 7 en Punta del Este.

Según dijo el subsecretario, ya se registra 80% de reservas en el sector hotelero de Maldonado para la segunda quincena de ene- ro, lo que augura una temporada muy parecida a la del año pasado. Si bien comentó que, debido a la crisis internacional, se registró una baja en el ingreso al país de turistas argentinos (en 2012 entró 7% menos que en 2011) y de uruguayos residentes en el exterior, se espera una temporada similar a la de 2010. “La de 2011 fue considerada récord por el ingreso de tres millones de turistas. Seguramente lleguemos a recibir 2.900.000 visitantes este año”, sostuvo el jerarca.

En 2012 se registró un ingreso de 2.000 millones de dólares gracias a la actividad turística, destacó Carámbula, aspecto que considera relevante como aporte al desarrollo económico.

El presidente de la Liga de Fomento y Turismo de Punta del Este y asesor del Centro de Hoteles, Héctor Araújo, afirmó en diálogo con la diaria que “las malas temporadas se terminaron” y que la falta de stock en supermercados, la falta de lugar en los estacionamientos y la opinión de los proveedores de bebida son indicadores de buenos tiempos. A su vez, alentó a los argentinos a veranear en el balneario: “Hay convenios con varias tarjetas de crédito y descuentos de 18% en la comida”, apuntó.

Consultado sobre los precios en el rubro gastronómico, Araújo alegó que se registraron algunas subas “puntuales”. “No hay que generalizar. Lo que se va a tratar de hacer es supervisar la relación calidad-servicio-producto-precio. Si esto está equilibrado no existe lo caro y lo barato. Esto fue lo que se conversó en todas las cadenas de supermercados”, señaló.

En tanto, en el rubro hotelería evaluó que el cierre de Pluna afectó -aunque ahora ya está solucionado- porque se dio en el momento de realizar las reservas de las noches del 26 al 29 de diciembre por parte de turistas brasileños. No obstante, señaló que en general el nivel de reserva se mantiene y, en particular, las reservas superaron el 80% esta semana, un guarismo similar al registrado en 2012.

Por mar también llegan novedades. El director de Turismo, Benjamín Liberoff, informó a la Secretaría de Comunicación de Presidencia que el arribo de cruceros a Montevideo y Punta del Este es similar al del año pasado, aunque se espera un incremento de 5%. Según estimaciones del MTD, este año llegarían más de 230 cruceros.

Vuelan golondrinas

La DGI intensificó los operativos de control de alquileres de temporada entre las políticas de fiscalización que realiza en el verano. Según explicó el director de Rentas, Pablo Ferreri, hoy se efectuarán controles en Canelones y Piriápolis, mañana y pasado en La Paloma, Punta del Diablo y Punta del Este. Ayer le tocó a Colonia.

“Empezamos a visitar a quienes están llevando adelante la tarea de fiscalización con el objetivo de brindar apoyo y constatar que todo se desarrolle de la mejor manera”, precisó Ferreri. Son 150 inspectores abocados a las zonas turísticas del país y sus tareas se extenderán hasta marzo. “Los objetivos de estas acciones son básicamente dos: cobrar los impuestos que marca la ley y contribuir a la equidad tributaria”, puntualizó Ferreri.

Las irregularidades más frecuentes, según comentó el jerarca, tienen que ver con la falta de inscripción de algunos comercios (algunos de ellos conocidos como “golondrina”) y la no extensión de boleta por los servicios o productos que se venden. En este caso, los controles se aguzan en relación a los alquileres de temporada que se realizan de manera informal, lo cual genera competencia desleal, dijo. “Cuando se detecta una irregularidad de este orden, aplicamos la sanción, la multa que corresponde”, afirmó. En la temporada pasada se clausuraron 20 comercios por estos motivos.