“Éste es uno de los días más dolorosos de mi vida política. Hoy doy por cerrada la etapa de mi pertenencia a VU. En las últimas semanas se me ha acusado de ser desleal, traidor, oportunista o cobarde. Han existido adjetivos para todo gusto y todo ello ha ocurrido bajo la pasividad o beneplácito, por decir lo menos, del Dr. Bordaberry”. Así comienza la carta a la que accedió la diaria y que Amado titula “Que me desmientan”, frase que Bordaberry utilizó en 2006 en el programa Zona urbana para decir que tenía conversaciones grabadas de Rafael Michelini y del entonces secretario de Presidencia Gonzalo Fernández, en las que decían que su padre, Juan María Bordaberry, no era responsable de los asesinatos de Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz. Luego utilizó la frase para titular su libro sobre el proceso judicial contra su padre, condenado por “atentado a la Constitución”.

El diputado sostiene que durante la Mesa Nacional Ampliada de VU, que se reunió el 8 de noviembre y que respaldó la actuación de Bordaberry, éste lo instó a dejar el sector a raíz de sus cuestionamientos al inmediato respaldo a la fórmula blanca, la noche del 26 de octubre. “Mis declaraciones hicieron referencia al penoso papel de participar como actores de reparto en un acto del Partido Nacional. Días después, fundamentado en una realidad parcializada, antojadiza y falsa, se montó un show inquisidor en Flores, liderado por un Bordaberry con una actitud que no quisiera calificar, pero con el claro fin de amedrentarme para que abandonara VU”, escribió.

En diálogo con la diaria, Amado añadió que Bordaberry dejó a su agrupación “expresamente afuera” de las cuatro listas de VU de cara a las elecciones del nuevo Comité Ejecutivo Nacional (CEN). “Hay una expulsión de facto. Hace tiempo que me quiere expulsar pero no quiere pagar el costo político de que lo tilden de autoritario por ello. Lo de Flores fue clarísimo”, declaró.

En la carta, que Amado presentará a su sector en las próximas horas, también hace referencia a los cuestionamientos que recibió por la reunión que mantuvo con Tabaré Vázquez. “Otros dirigentes de VU hacen lo mismo y no son atacados con tal organización y vehemencia”, señala, en alusión al diputado Guillermo Facello, referente de la agrupación Amigos de Óscar Magurno. “¿Será que se ataca a quien no integra ningún círculo de poder económico y político, y se contempla a quienes sí lo integran? ¿En eso se ha convertido VU?”, apunta.

“VU se fundó como una nueva forma de hacer política, el nuevo PC. […] Es notorio que aquel sector que albergaba y fomentaba en sus inicios la libertad de expresión del pensamiento y la tolerancia hacia el que piensa distinto ya no existe, es historia. Si ser leal significa tener amordazada las ideas y decirle al líder todo que sí, obviamente no pertenezco ni perteneceré nunca a esa categoría”, continúa.

No me callo nada

Desde su rol de diputado, Amado se ha desmarcado de posturas del sector que fueron erosionando su relación con Bordaberry. En 2010, durante una sesión especial de la Asamblea General en conmemoración del Día Internacional de la Democracia, afirmó, en referencia a los comunicados 4 y 7, de febrero de 1973 de las Fuerzas Conjuntas, que “el Parlamento no hizo nada y siguió de vacaciones”. En 2012 argumentó a favor de la despenalización del aborto y salió de sala expresando “un profundo dolor” por no poder votar afirmativamente, luego de que la bancada declarara “asunto político” la votación en contra. Luego apoyó -aunque con reparos al proyecto oficialista- la necesidad de regular el consumo de marihuana.

“En el año 2008 declare públicamente al semanario Voces del Frente (actualmente Voces) en primer lugar y luego en sucesivos medios de prensa y a todos mis compañeros del sector que estaba a favor de la despenalización del aborto; que estaba a favor de la legalización de la marihuana y que era un férreo opositor al concepto de familias ideológicas y a todo lo que se podía relacionarse con ‘lo rosado’ (aún ni se vislumbraba el Partido de la Concertación)”, enumera. En setiembre de 2013, también mediante una carta, Amado anunció que se bajaba de la candidatura a la Intendencia de Montevideo luego de que la Convención del PC aprobara un acuerdo entre blancos y colorados para las departamentales. “Me retiré de sala a efectos de cumplir con la disciplina sectorial en el caso de la despenalización del aborto […]; respeté la disciplina sectorial cuando se me negó votar la legalización de la marihuana. Cumplí también cuando se decidió que era posición del sector conformar el Partido de la Concertación en una Asamblea de dudosa representación en Casa de Galicia. He aceptado y acatado las reglas de juego siempre. Pero nunca renuncié ni renunciaré a decir lo que pienso”, escribe.

Amado se define ahora “independiente” dentro del PC. “Buscaré en mi PC otro camino en donde la lealtad se asemeje a mi concepción de la misma y en el que al decir del verso criollo ‘no tenga que cabrestearle al patrón’ [...] No voy a permitir que se me quiera utilizar como chivo expiatorio, en un intento por escapar de las responsabilidades que le corresponden a quien tiene el liderazgo del sector y del Partido. Es por todo esto […] que he resuelto abandonar VU y emprender una nueva etapa de mi vida política en el PC. Me juego a la libertad, a la verdad, a la grandeza de espíritu y a la esperanza. Prefiero no seguir enredado en falsedades o autoritarismos”, concluye el diputado reelecto.