El candidato presidencial del Frente Amplio (FA), Tabaré Vázquez, volvió a aparecer públicamente el viernes al retomar el ciclo de conferencias Uruguay x +, organizado por esa fuerza política para presentar propuestas que concretaría en un eventual tercer gobierno consecutivo. Esta vez fue el turno de la cultura, y Vázquez se refirió a la necesidad de la aprobación de una ley que impulse al sector en Uruguay, para la que previamente es necesario un “plan nacional de cultura”, según dijo. Pero el anuncio del candidato que generó más repercusión fue en relación a la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA), que actualmente tiene media sanción de Diputados y se prevé que sea considerada por el Senado en diciembre. Según aseguró Vázquez, se trata de una ley “impostergable”, que será aprobada por la bancada oficialista este año pero que debería ser reglamentada en el próximo gobierno. En este sentido, indicó que la LSCA “forjará un cambio sustancial no sólo para los artistas y creadores de nuestro país sino para los ciudadanos y ciudadanas que tienen derecho a un servicio de calidad”, y al mismo tiempo permitirá “proteger y promover, dando igualdad de oportunidades, a nuestra querida y rica producción nacional”. “Es un compromiso que asumimos y desarrollaremos con prioridad en la próxima administración”, prometió el candidato del FA.
El anuncio trajo repercusiones tanto a nivel de la oposición como de la gremial que nuclea a los medios de comunicación privados. El diputado nacionalista Álvaro Delgado (lista 404) dijo a El Espectador que le “preocupan” los dichos de Vázquez, y aseguró que se trata de una “antesala” de lo que será un tercer gobierno del FA con mayorías parlamentarias.
Al cruce
La Asociación Nacional de Broadcasters del Uruguay (Andebu) salió a criticar duramente a Vázquez y el proyecto de LSCA mediante su presidente, Pedro Abuchalja, quien en declaraciones al diario El País consideró que únicamente en “regímenes autoritarios en la historia del hombre, como los fascistas, los musolinistas y los estalinistas, o en Cuba, que no hay libertad de nada, o en Venezuela, donde está condicionado todo y cierran los medios, hay leyes de este tipo”. “Me llama la atención que Vázquez diga que se va a votar esta ley, cuando antes de las elecciones él no estaba de acuerdo. Me llama la atención que apoye esta ley que ataca los contenidos de los medios locales, sin hacer nada con las señales extranjeras y con internet. Supongo que Vázquez tendrá sus compromisos”, insinuó.
Además, señaló que el país no necesita regular los medios de comunicación pero sí “los crímenes que pasan en la calle todos los días”, y a su vez lamentó que “es lo que tienen las mayorías parlamentarias”, que “permiten a los gobiernos votar cosas inconstitucionales”. Abuchalja hizo énfasis en que se trata de una ley que “ataca los contenidos” y “amordaza” a los periodistas y los medios, al tiempo que adelantó que mañana habrá una reunión de la directiva de Andebu de la que saldrá una declaración en contra de la LSCA. Además, aseguró que meses atrás la gremial decidió suspender una campaña “que indicaba las inconveniencias de la ley” porque desde el entorno de Vázquez le aseguraron que la iniciativa no iba a concretarse.
Sin embargo -junto con actores de la academia, el gobierno y la sociedad civil-, Andebu, por medio de su entonces presidente Rafael Inchausti, participó en 2010 en el consejo técnico consultivo que elaboró un informe de consenso en el que luego se basó la LSCA. En aquel momento, Andebu sólo expresó algunos puntos de desacuerdo, ninguno de ellos vinculados a la regulación de contenidos. Inchausti se opuso a que se fijara un plazo para el usufructo de ondas radioeléctricas y a la propuesta de cobrar un impuesto a las radios y canales para financiar un fondo de fomento a la producción audiovisual, así como a propuestas que tendían hacia una mayor limitación de la concentración de medios.