Más brasileños, menos argentinos y un incremento de turistas uruguayos es lo que prevén autoridades y operadores turísticos para esta temporada. Referentes de los sectores inmobiliario, hotelero y gastronómico aseguran que se están controlando los precios con el objetivo de ser competitivos en la región. Por ahora, el nivel de reservas en hoteles supera 85% en Maldonado y Rocha, mientras que Montevideo y Colonia cobran relevancia como destinos veraniegos.

En 2013 arribaron a Uruguay 2,8 millones de turistas. Liliam Kechichián, ministra de Turismo y Deporte, dijo a la diaria que de acuerdo a lo proyectado para diciembre, 2014 cerrará con 1,5% menos de visitantes que el año anterior; la caída más significativa se dio en el gasto, 10% menor que en 2013, porque la estadía fue más breve.

Kechichián confía que en esta temporada “vamos a tener cerca de 20% más de turistas brasileños que en 2013 y 2014, y todo parece indicar que esa tendencia se va a mantener en el verano”. Evaluó que si bien algunas opiniones decían que la temporada sería peor que la pasada, “en estas últimas horas podemos animarnos a decir que va a ser un poquito mejor”.

Argentina y después

Más de 60% de los turistas en Uruguay son argentinos (en 2013 llegaron 1,6 millones). La ministra lamentó que el aumento de brasileños “nunca va a ser suficiente para cubrir los 100.000 argentinos menos que vinieron el año pasado”, pero acotó que ese descenso se dio respecto de 2011, cuando ingresaron 1,7 millones de argentinos, y que hay una suba sustancial si se lo compara con 2010, cuando llegaron 1,2 millones.

Aseguró que eso es fruto de la campaña promocional desplegada por el Ministerio de Turismo y Deporte (MTD) en la región -Paraguay, Chile, Brasil y Argentina- así como en los canales internacionales de televisión por cable. Detalló además la continuidad de la devolución tributaria (en compras con tarjetas de débito o crédito emitidas en el exterior en servicios gastronómicos, organización de fiestas, arrendamientos de vehículos, de inmuebles y hoteles, y el tax free en pasos de frontera) y la incorporación del beneficio de la Ley de Inclusión Financiera para las tarjetas de débito internacionales.

La ministra señaló que respecto de Argentina y Brasil, Uruguay tiene mayor competitividad que el año pasado; porque el dólar pasó de 20 a 24 pesos, porque la inflación en los países vecinos es muy alta y porque “hemos convocado en forma permanente al sector privado a tener mesura con los precios”, destacó. Descartó que la devaluación del real será un factor determinante en el arribo de brasileños. Respecto del turismo interno, evaluó que “ha venido creciendo fuertemente”, y detalló que “el año pasado involucró a cerca de 700.000 uruguayos, que gastaron alrededor de 800 millones de dólares”; señaló en ello un gran cambio cultural, en el que, ayudadas por las mejoras económicas, la recreación ocupa un lugar más importante para las familias.

Promete pero no compromete

En diálogo con la diaria Juan Martínez, presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes del Uruguay y vicepresidente de la Cámara Uruguaya de Turismo (CUT), calificó como “buen indicador” la alta reserva hotelera que hay para la próxima semana, que supera el 85% en Maldonado y Rocha. Precisó que los hoteles de cuatro y cinco estrellas estarán a capacidad colmada a fin de año y que una situación similar se prevé hasta el 15 de enero.

Martínez comentó que este fin de semana Colonia tuvo 76% de ocupación hotelera. Señaló que más de 60% de esos visitantes eran brasileños, que llegan a Uruguay entre el 25 de diciembre y el 6 de enero. Tanto Martínez como Kechichián valoraron el posicionamiento de Montevideo como destino turístico todo el año; la ministra dijo que la capital ha logrado captar tucumanos, mendocinos, correntinos y misioneros.

Martínez y Remo Monzeglio, presidente de la Cámara de la Industria Hotelera Turística del Uruguay, observaron la incertidumbre del sector. Martínez dijo que es imposible saber qué ocurrirá luego del 15 de enero, y que en buena medida eso dependerá de cómo se comporte el tiempo. Monzeglio indicó que “ha cambiado la forma de reservar la hotelería”; actualmente, la mayor parte se realiza por internet y “hasta cinco minutos antes de entrar al hotel”, mientras que antes, en octubre ya se sabía cómo sería la temporada.

Pedro Gava, integrante de la mesa directiva de la Cámara Inmobiliaria del Uruguay, no fue tan optimista. Opinó que “va a ser una temporada más bien de consumo interno y poco arribo de extranjeros”, pese al pico que de brasileños entre los últimos días de diciembre y los primeros de enero. A su entender, los argentinos llegan para residir en sus propiedades. Calificó la temporada como “corta” porque no se extenderá más allá del 20 de febrero. “Estamos plenamente jugados al consumo interno, que es el único público que responde”, opinó. A diferencia de Kechichián, consideró que Uruguay tiene pocas posibilidades de competir en la región, porque Argentina, Brasil, Perú y Colombia han devaluado su moneda mucho más.

Costos

Kechichián evaluó como “responsable” la conducta de los empresarios privados, aunque expresó que sigue habiendo excepciones, como “algún restaurante en Rocha donde realmente asustan los precios, o los costos de algún traslado en taxi desde el aeropuerto a Punta del Este”. Afirmó que “son episodios que, cuando aparecen, nos hacen mucho daño”. Añadió que en el sector inmobiliario, de acuerdo a informaciones recibidas, “ha habido una sensibilidad” y los “precios son parecidos a los del año pasado, especialmente en fincas de valor medio”.

Gava opinó que los alquileres ofrecidos por las inmobiliarias bajaron alrededor de 10% porque los costos son en dólares y, como se apunta al público uruguayo, ha tenido que adecuarse a la devaluación de la moneda.

Monzeglio dijo que exceptuando la semana del 31 de diciembre al 6 de enero, los precios estarán entre 10% y 15% por debajo al de otros años, y marcó la incidencia de exhibir la oferta por internet, donde el turista tiene las diferentes ofertas a la vista.

“Apostamos a la cordura”, dijo Martínez, que señaló que los sectores hotelero y gastronómico han respondido bien. No obstante, mencionó que eso no ha ocurrido en algunos casos puntuales, como bares o lugares de comida al paso en La Paloma y Piriápolis.