Hoy el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineed) presentará su primer informe sobre el estado de la educación en Uruguay, y la ocasión no estará exenta de polémica. El director ejecutivo de esta institución, Pedro Ravela, quien está a cargo de la presentación del informe, habría renunciado por discrepancias con este documento, aseguró ayer El Observador. Según ese matutino, Ravela fue crítico con el enfoque de los datos usado por el informe, y además quiso que éste se publicara antes de las elecciones nacionales, pero las autoridades educativas lo impidieron, lo que motivó su renuncia.

Ayer el ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, sostuvo en declaraciones recogidas por El Observador que Ravela es un “profesional muy serio, con muy buena experiencia” y supone que su renuncia “obedece a diferencias de percepción en el cumplimiento de tareas”. “No tiene ningún tipo de connotación o asociación con el informe que el instituto tiene que presentar próximamente”, aseguró. También dijo que el supuesto atraso del informe para después de las elecciones nacionales es un “comentario que no se puede sostener”. “Si hay algo que ha sido transparente y que estuvo sobre la mesa todo el tiempo es la información sobre educación. Creo que la transparencia en la presentación de los datos ha sido muy clara y no requiere que se demuestre”.