El Frente Amplio (FA) conmemoró ayer los 43 años de su primer acto público, que se celebró el 26 de marzo de 1971 y en el que el principal orador fue el general Liber Seregni, por entonces candidato a la presidencia por la fuerza política.
Los oradores llegaron al mismo tiempo, como si se hubieran puesto de acuerdo. Tabaré Vázquez llegó acompañado de su esposa, María Auxiliadora Delgado, y Constanza Moreira arribó con su jefa de campaña, la ex diputada Margarita Percovich. Xavier se sentó en medio de los dos precandidatos y los tres dialogaron por un rato. En el entorno de la Plaza 1º de Mayo había puestos de casi todos los sectores políticos ofreciendo pegotines, banderas, chapitas y material gráfico.
La primera en subir al estrado fue Micaela, de 15 años, militante del comité Por el Cambio de la coordinadora A, que leyó una proclama de la Unidad Temática de los Derechos de las Ciudadanas en homenaje a “todas las mujeres que han forjado la historia de este país”, especialmente a las frenteamplistas. Luego, Fabiana Goyeneche leyó una proclama de la Comisión No a la Baja. “Trabajaremos juntos y sumaremos fuerzas”, expresó Goyeneche, y más adelante agregó que la comisión “junto al movimiento estudiantil y junto a la central de trabajadores”, dice “ni un estudiante, ningún trabajador votando a la baja”.
Tras la entonación del himno nacional habló Xavier, que destacó la presencia de los dos precandidatos presidenciales como una muestra de “la unidad del FA”. Repitió palabras de Seregni de hace 43 años: “[El FA] es una necesidad popular y colectiva del Uruguay”. Dijo que las mujeres son el 52% de la población del país, y que si bien van a participar en esta elección “con la ley de cuotas”, lo que se aspira es “la paridad en los cargos públicos”. Recordó a la única mujer que habló en el acto de 1971, la senadora Alba Roballo, y agregó, señalando a Vázquez: “Hoy vamos a ser cuatro mujeres y tú,Tabaré”. Xavier también reivindicó “el derecho al voto de todos los compatriotas en el exterior” y luego invitó a los frenteamplistas a concurrir a votar en junio. “Hay que ir a votar por el candidato de nuestra preferencia y nuestro programa único”, añadió. Para Xavier, en octubre habrá una confrontación de dos formas de concebir la política, y se preguntó “a quién se le ocurre plantear que la mayoría parlamentaria afecta a la democracia”. Las mayorías “surgen por la voluntad popular y son perfectamente legítimas. Quienes critican esto se saltean el sistema democrático republicano de nuestro país”, expresó. Xavier afirmó que el FA debe asegurar esa mayoría en octubre para continuar aprobando leyes que mejoren las condiciones de vida y aseguren derechos. Finalmente, se refirió al plebiscito por la baja de la edad de imputabilidad y dijo que el FA se va “a oponer a esta iniciativa de la derecha” que es “una aberración utilizada con fines electorales”.
La senadora Moreira dijo que el FA está en una interna que es “un poquito más que un mero trámite para octubre” y que es un “buen momento para el debate interno”. Agregó que “las leyes” se ganan en el “propio debate de la izquierda”, y que como legisladora pelea “por los recursos para la educación, por la reducción de la Fuerzas Armadas y para tener una reforma tributaria que grave más a los que tienen más”. “Quiero el 6% para la educación, el Impuesto a Primaria para los productores rurales. Alcanza con haber puesto estos temas sobre la mesa [para justificar] esta odisea de generar una candidatura alternativa”, expresó. Moreira dijo que quiere que el gabinete tenga la misma cantidad de hombres que de mujeres. Luego explicó que quiere “un Estado interventor, que dirija y construya el proyecto de desarrollo posible”, y, citando a Rosa Luxemburo, dijo que “el capitalismo sigue siendo barbarie”.
“Larrañaga dijo que el modelo del FA estaba agotado y yo le respondo: agotado está el modelo de ellos, y por eso no van a volver a ganar una sola elección”, sentenció. Después expresó que no quiere acuerdos sólo entre partidos “sino acuerdos que incluyan a los sindicatos y a las organizaciones sociales” y otras “bases aliadas” del FA como “la universidad, los intelectuales, las feministas”. Finalmente, describió sus “prioridades socialistas” que son “terminar con la emergencia nacional de la vivienda” y “educación, educación, educación, pero pública”, así como “implementar el sistema nacional de cuidados”.
Cuando Vázquez iba subiendo al estrado, éste se iluminó por completo y hubo música de fondo para su saludo a la multitud. El ex presidente fue más breve que Moreira. Recordó a Seregni y a Juan José Crottogini y dijo que el FA es “la esperanza de un pueblo y de las grandes mayorías nacionales”, que la han depositado “en un proyecto político creado por los uruguayos, para los uruguayos y a la medida de los uruguayos”. Agregó que el FA es una “alternativa real de gobierno y de poder con capacidad trasformadora”. Para Vázquez, el debate político de hoy está entre “la institucionalidad del programa del FA o el programa restaurador de Uruguay, al que la mayoría de los uruguayos no quieren volver”. Dijo que “no existe un mejor vocero de los principios fundacionales del FA que todos los frenteamplistas”, y agregó que “tampoco existe un salvador, un mesías ni un genio”. “Debemos mantener la unidad como herramienta fundamental para lograr nuestros objetivos y hay que asumir los nuevos desafíos sin perder los valores y los principios fundacionales, y tampoco la utopía. Tenemos un hermoso país, pero es posible tener un país mejor aun”, expresó Vázquez, que se despidió con su clásico “hasta la victoria siempre”.