La Cámara de Diputados aprobó por unanimidad el proyecto de ley enviado la semana pasada por el Poder Ejecutivo para reducir la inflación. A pesar de que todos los partidos apoyaron la iniciativa, la oposición cuestionó que las medidas presentadas por el gobierno apuntan a ajustar el Índice de Precios al Consumo (IPC) pero no a resolver los problemas de fondo que genera la inflación.

El proyecto establece la exoneración del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en el suministro de energía eléctrica al cargo fijo de la tarifa residencial simple y al cargo mensual de la tarifa de consumo básico residencial. También se exonera de este tributo a las facturas residenciales de Antel, a los consumidores finales de frutas y hortalizas y a los importadores de este tipo de alimentos. Por último, se establece un “crédito fiscal” a las mutualistas que regiría hasta junio, para evitar un aumento de la cuota mutual.

Ayer, durante la sesión de la Cámara de Diputados, el representante nacionalista Jorge Gandini propuso un artículo aditivo para exonerar del IVA a la yerba mate (que paga 10% por ese tributo), lo que condimentó el debate en la sesión. “Presentamos un artículo aditivo para fijar en 0% el IVA a la yerba, igual que las frutas y hortalizas, por ser el producto de consumo masivo que aumentó más”, expresó el legislador en Twitter.

Sin embargo, la bancada oficialista consideró inoportuna la propuesta de Gandini, en la medida en que el Poder Ejecutivo tiene iniciativa privativa para legislar en materia presupuestal. Pero además, se consideró que la propuesta fue “demagógica”. Según la calificó el diputado frenteamplista Horacio Yanes (Nuevo Espacio), se trató de un “juego demagógico, que no responde a una cuestión seria. Si nos ponemos a ver todo lo que para la gente sería necesario que le bajemos el IVA, vamos a entrar en un campeonato a ver quién propone más cosas”. La propuesta no se aprobó; votaron negativamente el oficialismo y el Partido Independiente.

Respecto del proyecto votado ayer, Yanes dijo que es conocido que no se busca “resolver” el problema de la inflación, sino que se apunta a “enlentecerla” y que “no se dispare”. En tanto, el diputado nacionalista José Carlos Cardoso cuestionó ese mismo aspecto, señalando que el gobierno se limita a intentar que el aumento de precios no llegue al 10% interanual, “modificando el índice y no la inflación”. “Hay otros elementos que vamos a ver cómo mueve el gobierno, como el endeudamiento, la política monetaria y el gasto público. Nosotros no queremos reducir los gastos en educación o salud, pero sí en los cargos de confianza, por los que gastan 43 millones de dólares anuales”.

En tanto, la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), mediante el Instituto de Estudios Sindicales Universindo Rodríguez, presentó ayer un informe sobre la “pérdida salarial” de los funcionarios públicos, en el que denuncia varias medidas del gobierno “para no incrementar los salarios de acuerdo a la inflación efectiva”. Allí se sostiene que “el salario de los trabajadores del Estado sigue siendo una variable de ajuste de las cuentas públicas”. Entre otras medidas, critican que el Índice de Precios al Consumo se ajuste “por debajo de la inflación efectiva” (con planes como UTE Premia implementados a fin de año) y que la actualización de las Bases de Prestaciones y Contribuciones se haga por valores “mucho menores” al crecimiento “del Índice Medio de Salarios, incrementando así la carga del IRPF”. Según cuantifican, la pérdida de poder adquisitivo provocada por la manipulación de la inflación pasada se estima para 2013 “en 75% de un salario mensual”.