El Movimiento de Participación Popular (MPP) celebró el sábado sus 25 años con un acto en la sede central del grupo, ubicada en Mercedes y Ejido. El lugar fue decorado con globos rojos, azules y blancos que lucían un 609 estampado en negro, y con una pancarta que decía “Tabaré-Lucía”. La cuerda de tambores del Movimiento Identidades, conocido como “la columna afro del MPP”, acompañó el aniversario con música. Hablaron los senadores Lucía Topolansky y Ernesto Agazzi, los diputados Sebastián Sabini, Aníbal Pereyra y Alejandro Sánchez, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, y el ex presidente del Instituto Nacional de Colonización Andrés Berterreche. Como invitadas especiales, participaron la presidenta del Frente Amplio (FA), Mónica Xavier, y la intendenta de Montevideo, Ana Olivera. “Gracias, MPP, por darnos a Pepe”, expresó Xavier en su saludo; Olivera dijo que los frenteamplistas necesitan “estar muy juntos” para que en el aniversario 26 del MPP se esté “festejando un nuevo triunfo del FA”. Por su parte, Agazzi recordó que aprendieron “muchas cosas” en estos primeros 25 años, y dijo que el propósito en 1989 era “crear un movimiento político que sirviera como puerta de entrada” al FA “de los movimientos sociales”. “Nuestro primer emblema fueron dos ventanas abiertas”, afirmó Agazzi,; así se conformó “la síntesis política más grande de los intereses populares en la historia del Uruguay”. El senador reiteró varias veces que no hay que perder de vista que el objetivo del MPP es “trabajar por la liberación nacional y el socialismo”; luego dijo que es necesario que “los grupos chicos se junten”, pero no para “pescar adentro de la pecera” y crecer “pegándole codazos al del costado”. “Si nos juntamos muchos chicos, es para crecer todos juntos”, añadió.

Viaje al centro de la tierra

Al finalizar su discurso, Topolansky dijo: “Y la sorpresa viene llegando con el Fusca y Manuela”. Era el presidente José Mujica, que, al volante de su Volkswagen 1987, y acompañado por su perra, fue a buscar a su esposa. Mujica detuvo el auto frente al local; aunque no se bajó, fue ovacionado por los participantes del acto y abordado por los periodistas. El mandatario confirmó que viajará a Estados Unidos el 12 de mayo para reunirse con el presidente Barack Obama, a quien le pedirá “instalar laboratorios” en Uruguay, similar a lo que le pidió a Alemania. Ese mismo día, Mujica declaró por teléfono a Canal 4 que en la reu-
nión con su par estadounidense va “a marcar los errores muy gruesos” del “mundo rico”. Según Mujica, Estados Unidos debe darse cuenta de que los latinoamericanos “somos dueños de nuestra historia”, que, “ya sea buena o mala, la tenemos que escribir nosotros”. Dijo que “vivimos en un mundo muy complejo”, que “necesita tolerancia”, y eso supone “aprender a convivir con los que piensan distinto”. “La democracia no se puede exportar a palos, y no se puede imponer lo que piensa cada país”, añadió.

Por su parte, Berterreche y Sánchez argumentaron sobre la necesidad de lograr un tercer gobierno frenteamplista con mayoría parlamentaria. Sánchez criticó a los que “dicen que es un error capital tener mayorías parlamentarias”, y se preguntó si en el país “existió alguna vez un gobierno que no haya tenido mayoría parlamentaria”: “¿Acaso no tuvieron esa mayoría para votar la impunidad, los ajustes fiscales y la desindustrialización del país?”. El ministro Bonomi repasó los principales logros de los gobiernos del FA; afirmó que en el primero se bajó la pobreza, en el segundo se mejoraron los salarios, y que en el tercero “hay que apuntar a mejorar la calidad del empleo”. Pereyra expresó que las críticas de la oposición no son creíbles, porque “no fueron capaces de encauzar el país”: “Eso no se lo cree nadie, y ése es el argumento más fuerte que tenemos”.

Las hormiguitas

Topolansky, candidata del sector a la vicepresidencia, cerró el acto repasando la historia del movimiento. Afirmó que los avances fueron posibles gracias a “la construcción de la hormiguita, el suma, suma, suma, y el estar en las verdes y las maduras”. “No es con plata que se suple la militancia. Cuando caemos en la tentación de que la militancia se suple con plata, nos equivocamos. Vemos el despliegue de publicarteles que nos saludan desde los apartamentos. Es una herramienta carísima. El FA se ha caracterizado por otra cosa, que ha sido recurrir a la militancia, al puerta a puerta, a los manzaneros que trillaban las manzanas en el 71”, dijo. Para finalizar, contó cómo el 25 de agosto de 1983, cuando estaba presa en Punta de Rieles, consiguió escuchar el caceroleo masivo de ese día contra la dictadura y ver una bandera del FA, que “salía y se metía”. “Un grupo de militantes nos llevaron un mensaje”.

La semana que viene se lanzará el Espacio 609, con un acto en el teatro El Galpón.