El Partido Socialista (PS), uno de los sectores con más peso electoral del Frente Amplio (FA), deberá dirimir qué estrategia toma de cara a las elecciones nacionales de octubre, y los dirigentes deben tomar una decisión difícil. A nivel político, el sector aspira a consolidar un bloque propio, para evitar intensificar la polarización interna en el FA entre el Movimiento de Participación Popular (MPP) y el Frente Liber Seregni (FLS). Y a nivel “técnico electoral” el sector corre el riesgo de perder representación en el Senado si no realiza un acuerdo para un sublema común con otros sectores de la coalición de izquierda.
En ese marco, quien encabezará la lista a diputados en Montevideo, Gonzalo Civila, dejó en claro que no es partidario de reeditar la alianza que el sector practicó en 2009, cuando formó un sublema común con el FLS, según dijo el martes a la diaria: “No sería bueno para el partido volver a comparecer en una alianza con el FLS”, sostuvo el dirigente, que entiende que “no está bueno que el partido se diluya o se desperfile en una alianza de esas características”.
El diputado suplente Nicolás Núñez dijo “diferir un tanto” con las afirmaciones de Civila: “Descartaría una alianza con el Espacio 609 o el FLS político, pero a nivel de sublema técnico le puede costar caro al PS ir sin ninguna alianza”, opinó, y, en ese marco, dijo que “no descarta aliarse con el FLS para poder sumar restos”. Según dijo, “también hubo una alianza política y técnica a la que nadie nos invitó [en referencia a la alianza del Espacio 609, el Partido Comunista, la Corriente de Acción y Pensamiento-Libertad y las probables incorporación de otros sectores del “grupo de los ocho”, como Compromiso Frenteamplista y el Frente Unido] y hoy por hoy el PS está más cerca del FLS que del Espacio 609 y sus aliados, que me parece que nos dejaron afuera de la conversación. Se han juntado para contrarrestar el peso que ha ganado el PS en la interna”.
En tanto, el diputado por Cerro Largo y secretario general del PS, Yerú Pardiñas, admitió que “es difícil que podamos participar en el acuerdo entre el MPP, el Partido Comunista y la Corriente de Acción y Pensamiento-Libertad. No hemos sido invitados y además esto ya viene siendo elaborado con un proceso previo en el que no hemos participado. Además, esto generaría un gran desbalance si seguimos acumulando sectores en ese acuerdo, por lo que no vemos mucha posibilidad”. Sea cual sea el camino, Pardiñas se mostró cauto respecto de las posibles alianzas, debido a que es necesario tener en cuenta las eventuales alianzas que puedan desarrollar las dirigencias departamentales, que no siempre son similares a la dirección nacional.
En tanto, la diputada María Elena Laurnaga sostuvo que “Civila salió a decir eso por su cuenta, que no era lo más adecuado”, debido a que el tema se resolverá en la interna. Según especificó, también consideró que es difícil que el sector se sume al proceso iniciado por el “grupo de los ocho”: “No nos invitaron; yo creo que es poco probable”, opinó. Según dijo, con estos grupos tienen “diferencias políticas y de estilo, aunque también las tenemos con el FLS. Es un dilema, y no es fácil”.
Ayer, durante la sesión de su Comité Ejecutivo Nacional, el PS analizó una encuesta de Cifra sobre la interna frenteamplista que marca que entre los votantes de la coalición, 28% votaría al MPP, 15% al PS, 8% al FLS, 3% a Compromiso Frenteamplista y otro 3% al Partido Comunista. Según dijo Laurnaga, la encuesta también consolidó el favoritismo como candidato a la vicepresidencia de Sendic y del actual senador Daniel Martínez como postulante a la Intendencia de Montevideo. La encuesta también dice que el FA tiene una preferencia de 50% en Montevideo y de 39% en el interior. A nivel nacional, la intención de voto para el FA es de 44%, mientras que el Partido Nacional alcanza 30%, el Partido Colorado, 18% y el Partido Independiente, 2%.