El feriado por el Día de los Trabajadores Municipales, el 24 de abril, las medidas de paro debido a la muerte de un trabajador en la Usina 3 de la Intendencia de Montevideo (IM) el viernes 25 y el feriado del 1º de mayo llevaron a una situación de “alerta ante posible riesgo sanitario” al departamento de Montevideo, según un informe del Ministerio de Salud Pública (MSP) elaborado a pedido de la comuna debido a la falta de servicios de recolección de residuos. Las autoridades de la IM aseguran que la actividad ahora es normal y que se recibe el apoyo “de los municipios, de otras áreas de la intendencia y de terceros”, según explicó a la diaria el director de Limpieza, Juan Canessa, lo que “ha resultado en una mejora del estado general, aunque existen retrasos en varias zonas”, en particular en algunas de La Blanqueada, Unión, Malvín y Carrasco. La comuna espera un nuevo reporte del MSP y hoy hará una evaluación, y se prevé que en los próximos días la situación vuelva a la normalidad.

De todas formas, la basura en las calles generó reacciones en la oposición, en el Frente Amplio (FA) y en el gobierno nacional. El presidente José Mujica aseguró el sábado que “va a haber un plazo”. “La basura va a tener que salir o salir, tenemos que inventar algo. La juntaremos nosotros, pero tiene que salir”, afirmó. Declarar la esencialidad no es una opción porque no hay medidas sindicales en marcha. En 2010, tras un conflicto entre la IM y la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (ADEOM) y ante una situación de emergencia, el gobierno dispuso que las Fuerzas Armadas colaboraran en la recolección.

La oposición, en particular el diputado nacionalista Javier García, planteó declarar la esencialidad y “tomar una decisión de fondo: privatizar la gestión de residuos”.

En el FA preocupa la situación. El dirigente de la Vertiente Artiguista Eduardo Brenta, ex ministro de Trabajo, consideró que si el sindicato de municipales “optó por el camino de la denuncia penal” en relación a la muerte de un trabajador, “ahora tienen que pensar en los montevideanos, que no tienen la culpa del accidente”. Para Brenta el camino no es la privatización de los servicios de recolección, aunque consideró que “está bien que se mantenga el área privada [en los barrios de Ciudad Vieja y Centro] y no descarto que se pueda ampliar”. Aseguró que “medidas de fondo hay que tomar”, pero que no es el camino “privatizar los servicios que no funcionan”, sino que a su entender hay que “tener un relacionamiento adecuado con los trabajadores y continuar el proceso de mejora de gestión, y si uno tuviera la legitimidad que eso te otorga pedirle la colaboración a la población: hoy la gente está muy enojada”. Brenta señaló que han hecho llegar “algunas preocupaciones que hemos visto sobre la gestión” a varios jerarcas de la IM y a los ámbitos de la fuerza política. “Hay que mejorar rápidamente aspectos de gestión para no encontrarnos ante un hecho consumado y ante el reclamo legítimo por aspectos básicos de la gestión”, afirmó.

El presidente de la Mesa Departamental del FA, el diputado por Asamblea Uruguay Carlos Varela, consideró por su parte que la situación “tiende a normalizarse”, y respecto a la posibilidad de extender la zona privada, fue categórico al señalar que el FA “no lo ha considerado”. Dijo que la calidad de los servicios de la zona privatizada “no es un elemento que estimule a extenderla”, y opinó que como medida a futuro se debe “reforzar los servicios municipales”. Consideró que de cara a un nuevo gobierno, el FA debería analizar la descentralización de la gestión de los residuos en los municipios, “que han demostrado ser muy eficientes en la gestión”. También consideró que “no hay que ser ingenuo” en relación a la “explícita definición de varios dirigentes de ADEOM en señalar que el FA está en la vereda de enfrente de sus decisiones políticas”. Para Varela, hay que estar “muy alerta ante actitudes sindicales que sean políticas partidarias.