AÑO 2011

21 de febrero.

La ONG Vida Silvestre dio a conocer un estudio acerca de la acción de plaguicidas sobre la actividad apícola en la zona de influencia del Parque Nacional Esteros de Farrapos e Islas del Río Uruguay, en las proximidades de Nuevo Berlín. Entre abril de 2009 y agosto de 2010 la ONG evaluó la presencia y concentración de plaguicidas en suelo, peces y producción apícola en la cuenca de influencia de dicho parque nacional, incorporado en 2008 al Sistema Nacional de Áreas Protegidas por su biodiversidad y su riqueza de ecosistemas. “Los insecticidas utilizados en los sistemas agrícolas estudiados tienen un elevado impacto sobre la apicultura, generando, entre otras cosas, una clara disminución de la producción de miel”, mientras que “se constataron altas concentraciones de plaguicidas de abejas colectadas durante mortandades masivas”. Por otra parte, Vida Silvestre señaló que a pesar de las fuertes restricciones que existen en Uruguay respecto del uso de endosulfán, “se encontraron altas concentraciones en suelo, cera y abejas y peces colectados durante mortandades masivas”, y recomendó reevaluar la autorización de su uso, “dada su alta toxicidad, persistencia y potencial de bioacumulación y biomagnificación, que ha justificado su prohibición en la mayor parte del mundo”.

2 de marzo.

El diario El Acontecer de Durazno informa que los resultados de los análisis a los que fueron sometidas las muestras de agua que se había extraído del arroyo Los Tapes a mitad de febrero, dieron positivo para la presencia de glifosato. Productores y vecinos de la zona habían contado que tras caer 106 milímetros de agua en la zona, al día siguiente apareció el arroyo cubierto de peces muertos, de diversas especies y tamaños. Intervino el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), que se hizo cargo de los estudios. El químico llegó al cauce arrastrado por la lluvia, según se concluyó en la oportunidad.

4 y 5 de junio.

En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, ediles de las comisiones respectivas de los departamentos de Río Negro, Paysandú, Durazno, Rivera, Colonia, Soriano, Artigas, Flores, Salto y Maldonado sesionaron en Fray Bentos y al final de las jornadas dieron a conocer una declaración con varios puntos: “En referencia a la forestación y cultivos de soja, se solicitan más controles sobre el impacto ambiental que producen los propios cultivos y los agroquímicos empleados para los mismos”, al tiempo que “se solicita a los productores la aplicación de las dosis aconsejadas por la norma vigente de agroquímicos a ser usadas con responsabilidad”.

AÑO 2012

26 de abril.

El País informa que la maestra Silvia Nobelasco, de la escuela Nº 30 de Rolón, Río Negro, ubicada entre Sarandí de Navarro y Grecco, fue rociada el 17 de ese mes por el conductor de un mosquito que se acercó aun más al alambrado que los separaba cuando la funcionaria le recriminó que estaba violando la normativa en la materia. Nobelasco denunció el caso en varios ámbitos, incluso por la vía judicial, mediante la cual la firma Agronegocios del Plata fue condenada a indemnizarla.

14 de junio.

El hecho ocurrió en la Escuela Nº 37 de Santa Isabel, ubicada en la ruta 3, unos diez kilómetros al sur de Young. La maestra interina Marcela Ríos sufrió una crisis asmática y síntomas de intoxicación al entrar en contacto con un agroquímico. Notas de prensa consignan que estaba trabajando y empezó a sentir náuseas y ardor en la garganta. Miraba el piso y veía cómo caían cientos de moscas, arañas y hormigas. Cuando fue hacia la parte de atrás de la escuela, el mosquito fumigador emprendía la retirada. La inspectora de Primaria Celeste Cruz informó a El País que Jorge Firpo, referente del MGAP en Young, “nos explicó que el agroquímico utilizado es el glifosato para la soja”.

28 de noviembre.

la diaria publicó fotos tomadas el día anterior que mostraban más de 50 envases de agroquímicos que “fueron desechados en pequeñas canteras existentes a 1.500 metros de la escuela de la localidad de Menafra y a 1.300 de un arroyo al que van a parar las aguas de estas canteras cuando se desbordan”. La denuncia fue divulgada por el Grupo de Vecinos de Guichón en Defensa de la Tierra y los Bienes Naturales, que funciona en la ciudad de Guichón, ubicada a 40 kilómetros del lugar donde se registraron los hechos.

30 de noviembre.

El edil de Soriano Luis Ciganda denunció a una empresa agropecuaria por utilizar glifosato a escasos 20 metros de la escuela de Paraje San Martín. Esa empresa “ya tuvo problemas similares en Palmitas hace unos años”, recordó el dirigente.

3 de diciembre.

La Asociación Magisterial Rochense denunció fumigaciones aéreas con productos agrotóxicos en las inmediaciones de la escuela rural Nº 91 de Esteros de Pelotas, ubicada a 18 kilómetros de Villa Cebollatí, violando la distancia mínima de 500 metros exigida para este método.

5 de diciembre.

Habitantes de Merinos, localidad ubicada entre Paysandú y Río Negro, alertaron al Grupo de Vecinos de Guichón en Defensa de la Tierra y los Bienes Naturales sobre la aparición de latas de clorpirifós, un insecticida del tipo organofosforado que se aplica en cultivos de soja, trigo, cebada, avena, maíz, frutales, papa y remolacha. Merino es un pueblo de Paysandú ubicado en el límite con el departamento de Río Negro. Los envases aparecieron tirados en un vertedero informal hecho al costado del camino, a un kilómetro del pueblo.