“La sub 30 no es el promedio de edad de estos políticos”. Así arrancó bromeando la presentadora de la charla “Claves de un modelo progresista. La sub 30 del Frente Amplio [FA]”. Los oradores, citados como “referentes” de esta generación, eran la presidenta de la fuerza política, Mónica Xavier, la senadora Constanza Moreira y el ex ministro de Economía y Finanzas Álvaro García.

Los presentadores, que sí eran jóvenes, definieron a la sub 30 como una generación que “no ha perdido elecciones, salvo el plebiscito por la anulación de la Ley de Caducidad en 2009”, que nació a la salida de la dictadura, que “se formó políticamente en gobiernos de izquierda”, una “transición” que “logró incluir a los que fueron históricamente olvidados, que amplió derechos y sacó a 900.000 personas de la línea de pobreza”.

Comenzó hablando Moreira, que dijo que así como en los 90 el sociólogo Alfredo Errandonea hablaba de que había un “modelo y medio” en el país (“ellos llevaban adelante la ‘reforma económica’, mientras que nosotros resistíamos sin llegar construir un modelo”), ahora, luego de tantos años, la senadora considera que “nosotros hemos construido el modelo, mientras que ellos tienen medio o un cuarto de modelo”, según valoró en función de lo que son los programas de gobierno del Partido Nacional (PN) y del Partido Colorado (PC). Según valoró, en esos programas no muestran “ni la tenacidad ni el músculo de la derecha”, al punto de que “repiten lo que hicimos, asegurando que harán una mejor gestión”. “¿Por qué van a gestionar mejor ellos que nosotros lo que nosotros creamos?”, se preguntó. También dijo que prometen cosas que ya existen, como la regionalización de la Administración de los Servicios de Salud del Estado, y que van a mantener cosas que el FA ya hizo, como los Consejos de Salarios y las políticas sociales del Ministerio de Desarrollo Social, y que no se pronuncian sobre la reforma de la salud.

“Ha sido un triunfo cultural del FA sobre los partidos tradicionales: todos quieren mostrar la bandera del progresismo, más allá de que detrás haya un lobo conservador”. Según dijo, “no se atreven a decir que van a bajar el gasto público en educación”, y sus programas son un listado de “buenas intenciones pero no dicen cómo las van a pagar”.

Luego dijo que el presidente José Mujica, que “está en las antípodas del ideal mesocrático, ilustrado y doctoral del conservadurismo uruguayo, se ha transformado en candidato a Premio Nobel de la Paz” y “ha sido el mejor embajador de Uruguay en el mundo”. La tribuna irrumpió en aplausos. “Quedaron afuera de la modernidad, resistiendo la agenda de derechos, y al quedarse sin esto, sin programas y sin proyecto, y perderse el brillo de este país tan cool, según un diario británico, sólo les quedan discursos vacíos. Lo que muestran los spots de ellos es casi todo robado de lo nuestro. No tienen nada, aunque tienen mucho dinero y poder, pero las ideas están en el campo de la izquierda”.

Le siguió en la oratoria García, que concordó que, hablando de los partidos tradicionales, “el viejo modelo existe y no se puede explicitar”, ya que “lo que plantearon en los 80 y en los 90 no lo está defendiendo ninguno”. El ex jerarca dijo que el tercer gobierno del FA “debe ser la hora de la calidad”, en la que mejore “la provisión de bienes públicos que realiza el Estado uruguayo”. En ese marco, pidió mejorar los tiempos de atención en la salud y llegar a 100% de egreso en secundaria: “No puede ser que de cada tres jóvenes sólo dos lleguen al ciclo superior y uno solo lo termine”.

Finalizó Xavier, quien dijo que “hay cosas que no son políticamente correctas”. “Mostrarse como lo que verdaderamente se es no cotiza para las elecciones”, aseguró. La presidenta del FA dijo que hay quienes repiten que no hay tanta diferencia entre la propuesta del FA y la de los partidos tradicionales. “¿Daba lo mismo juzgar a los criminales de lesa humanidad o seguir cultivando la impunidad?”, se preguntó la ex senadora, que recibió el aplauso del público.

Xavier cuestionó que la oposición critique la capacidad de gestionar en el FA cuando en los últimos diez años se cuadriplicó el Producto Interno Bruto. “Esas cosas las plantean quienes no pudieron avanzar”, manifestó. Según dijo, “no todo lo que se hizo en el pasado se hizo mal siempre, pero por mucho tiempo se hicieron muchas cosas muy mal, y no exclusivamente por malas gestiones, sino también por malos principios y malas ideologías”.