Ayer se reunió el Sindicato Único de Automóviles con Taxímetro y Telefonistas (SUATT) con autoridades del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y del Centro de Propietarios de Automóviles con Taxímetro del Uruguay (CPATU) para analizar el reintegro de dos sindicalistas despedidas durante la segunda quincena de diciembre. No acordaron nada; el CPATU seguirá adelante con los despidos y el sindicato con las movilizaciones.

El vocero del sindicato, Ary Wiedemann, aseguró que el MTSS opinó que CPATU tiene que retomar a las dos trabajadoras y cumplir con lo acordado: en agosto de 2014, tras un incendio en la central de Radiotaxi 141, la empresa envió al seguro por desempleo a 50 trabajadoras. El sindicato reclamó y logró que el 15 de setiembre la empresa firmara un acuerdo ante la División de Negociación Colectiva del MTSS en el que se comprometía a reintegrar paulatinamente a las 17 radiooperadoras que no se habían desvinculado de la empresa. CPATU reintegró a seis y despidió al resto. El director del CPATU, Óscar Dourado, dijo a la diaria que tal acuerdo no existe, aunque en el papel están las firmas de Alicia Rivero y Alicia Ramas, ambas representantes de la empresa en ese momento. A eso se le suman sus declaraciones a Telemundo en setiembre de 2014, en que se ve al director en un video asegurando que reintegrarían a todas las funcionarias antes de fin de año. Wiedemann lo acusó de “mentiroso”.

Además, a los 11 despidos se sumaron los de las dos dirigentes por las que el gremio realizó ayer una manifestación frente al MTSS durante la aludida reunión en reclamo de su reintegro. Wiedemann explicó que desde el ministerio no “hay mucho por hacer” porque no pueden obligar a la empresa a retomarlas. Sin embargo, desde la Inspección General del Trabajo y la Seguridad Social podrían llegar a “aplicar alguna multa e inspeccionar Radiotaxi”, indicó. El sindicato convocó ayer al plenario de delegados del SUATT, quienes fijarán la fecha de una asamblea general donde resolverán las medidas a tomar y declararán al gremio en conflicto. Por otra parte, Dourado dijo que no “ve conflictos donde no los hay”, y que continuarán con los despidos porque la empresa está atravesando una reestructura funcional y no necesita a esos empleados.

Agregó que las destituciones fueron “por conveniencia” de las trabajadoras: implica para ellas “un ingreso importante” y “es más conveniente alejarse de la empresa a no adecuarse a los cambios de funcionamiento”.