Una vez más, los colorados son el centro de atención en el mundo político por los comportamientos de algunos de sus dirigentes. Esta vez se confirmó lo que ya muchos habían hablado por lo bajo y otros habían denunciado ante la Comisión de Ética y Conducta Política del Partido Colorado (PC): que aunque se haga la vista gorda, los arreglos políticos entre dirigentes de diferentes partidos, condenados en el ámbito público pero celebrados en el privado, no son cosa nueva ni poco practicada, y más temprano que tarde, terminan saliendo a la luz. Ayer se divulgó un audio en el que se escucha una conversación telefónica entre el diputado Daniel Bianchi, de Vamos Uruguay (VU), y el actual intendente de Colonia, Carlos Moreira, en la que el colorado le asegura su apoyo para las elecciones departamentales, trata de “tarado” al senador José Amorín Batlle porque impulsó la candidatura colorada de Edgardo Rostán a la intendencia, y afirma que el líder del PC, el senador Pedro Bordaberry, está al tanto del arreglo y que “está todo bien”. Moreira y Bianchi están analizando realizar una denuncia ante la Justicia porque piensan que tienen el teléfono intervenido; según informaron a la diaria fuentes de distintos sectores del Partido Colorado, la grabación la hizo un dirigente colorado de Colonia del entorno de Bianchi.

En el audio se escucha claramente la voz de Bianchi y distorsionada la de Moreira. El primero dice: “Todo bien. Con la gente que hablo está toda encantada, vamos a llevar todos los votos para esto. Lo único que pasó es que [José] Amorín es una cosa tan tarada... lo embaló a Rostán, que es uno que era suplente mío, para que saliera de candidato”. “Yo tengo un compromiso con vos, no voy a votar nada”, agrega luego. “Mi palabra es así y vamos para adelante. Mañana voy a salir con una declaración diciendo que no voy a ser candidato y que hay que dar lugar a otro integrante del partido, y me voy a abocar a la tarea parlamentaria, para salir con algo, ¿entendés? ¿Te parece que le ponga alguna otra cosa?”, le pregunta a Moreira. “Hablé con Pedro y todo para adelante, todo bien”, agrega.

La explicación de qué intención política está detrás de la publicación del audio y por qué se difundió recién ahora varía según qué colorado hable. Vale recordar que se dio a conocer meses después de las elecciones pero días antes de que se decida en la Convención Nacional (CN), el 17 de octubre, qué hacer con los dirigentes colorados denunciados por apoyar a candidatos blancos, entre los que están Bianchi; el diputado Guillermo Facello, por haber apoyado a Edgardo Novick en Montevideo; y el ex candidato a diputado Francisco Zunnino y el ex presidente de la República Jorge Batlle, por acompañar en San José a José Luis Falero. Por un lado hay varios dirigentes que aseguran que como Amorín sale “bien parado” en la grabación, y en la CN que se celebró el 19 de setiembre éste expuso un pensamiento conciliatorio con los denunciados, la lectura que debe hacerse de la reciente difusión del audio es que el líder nacional “no se la juega” a sancionar severamente porque todos dependen de los dirigentes departamentales para no tener grandes costos durante las campañas electorales nacionales: hay que tener presente que Amorín apoyó a Zunnino y éste después a Falero. Por otro lado, hay quienes piensan que el audio salió a la luz ahora como forma de presionar a los colorados para sancionar con más que un apercibimiento a los denunciados (ver ladiaria.com.uy/articulo/2015/9/la-proxima-sale).

Consultado por la diaria, Bianchi dijo que la CN es libre de votar como quiera, y aseguró que no abandonará su banca. A su vez, explicó que “todo para adelante, todo bien”, significa que Bordaberry sabía, porque se lo comentó, “pero nunca estuvo de acuerdo”. Además, agregó que el senador le dijo que era su “responsabilidad”, y aseguró que “nunca participó en nada”; es más, Bianchi contó que le pidió permiso para utilizar en su lista el número 10904 y que le dijo “de ninguna manera”. “Lo que se dice [en el audio] es lo que hicimos públicamente juntos”, añadió.

Más allá de los vaivenes políticos, Bianchi enfocó su atención en el hecho de que se lo haya grabado sin su conocimiento: “Lo más grave, en un país democrático, es que una comunicación esté pinchada. Se invade la privacidad de las personas y está castigado por la ley”, dijo, y aseguró que ya habló con el penalista Jorge Barrera para analizar si tomar medidas legales. Moreira, quien señaló que el único cargo que tienen los colorados es el de la Dirección de Cultura, que dirige Alfredo Perazza -porque se decidió según los votos colorados que calcularon que tuvo cada uno- también aseguró que está estudiando si denunciar el hecho.

Por otro lado, el senador Amorín dijo a El Observador que ser tratado de “tarado” por Bianchi, “más que un insulto es un halago”. Agregó: “Si de lo que se me acusa es de haber defendido al PC en Colonia, eso es verdad. Siempre lo he defendido”. El senador entiende, al igual que Bianchi y Moreira, que el solo hecho de la existencia del audio “es peligroso y preocupante”. “Se trata de un atentado a la intimidad ¿quién lo hizo? ¿cómo lo hizo? ¿con qué objetivo? Sería bueno que se supiera”, agregó.

Desde las filas de VU, Felipe Schipani afirmó que es “una falsedad” que Bordaberry haya avalado dicho pacto, y también hizo hincapié en el hecho de cómo y por quién se divulgó una conversación telefónica privada: “Es preocupante pensar que las líneas telefónicas de los dirigentes políticos estén intervenidas”.

El diputado Fernando Amado dijo que espera que Bordaberry desmienta lo que dice el audio, y en Twitter escribió: “Da asco escuchar a un ‘diputado colorado’ consultar a un candidato blanco, e incluso pedirle orden sobre qué poner en una declaración, asco. Queda claro en el audio que el ‘diputado colorado’ se arrastra en una actitud genuflexa, servil y reptiliana a las órdenes de candidato del PN”.