El profesor adjunto de la Universidad de Columbia Raúl Katz presentó ayer en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República su libro El ecosistema y la economía digital en América Latina, un análisis de la demanda de tecnología -que ha pasado de la conectividad a la digitalización- y los desafíos que surgen a raíz de esta transformación en cuanto a las estructuras de mercado.
El concepto de ecosistema digital define un nuevo contexto industrial -económico y social- resultante de la adopción masiva de tecnologías digitales de información y comunicación. En diálogo con la diaria, Katz explicó que la economía digital refiere al análisis de todas las actividades que se relacionan con la transmisión de información, contenidos o aplicaciones, desde la generación hasta el consumo final. La cadena de valor comprende a los generadores de contenidos y de aplicaciones y servicios, los “agregadores” -que serían las redes sociales, como Facebook, y Google, a modo de ejemplo-, los fabricantes de equipamiento y la instalación de las telecomunicaciones.
El crecimiento de la digitalización latinoamericana ha contribuido con 4,3% del Producto Interno Bruto (PIB) acumulado entre 2005 y 2013, y a la creación de 900.000 empleos en el mismo período. Además de la importancia directa del ecosistema, Katz señaló “el efecto derrame” que éste produce sobre el resto de la economía. “Todos los sectores productivos están utilizando la tecnología para aumentar su productividad, ser más eficientes y expandir los negocios”, afirmó, lo que hace “fundamental” que el enfoque de las políticas públicas sea hacia este ecosistema digital.
En cuanto a la tasa de digitalización, Katz sostuvo que “Uruguay es uno de los países más avanzados de América Latina; cada vez se asemeja más a un país desarrollado y menos al resto de los países” de la región.
Prioridades nacionales
La subdirectora de Planificación de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Lucía Pittaluga, consideró que en la estrategia de desarrollo que está trazando el país a 2030 lo que más preocupa es el “envejecimiento de la población”, que sólo podría ser resuelto con un aumento de productividad que compense la eventual caída de la tasa de actividad. Esto no implica cambiar la estructura productiva del país, pero sí “introducirles tecnología a los procesos, como se ha hecho con la carne”, afirmó.
Por su parte, Katz consideró que “lo que falta” es “la utilización provechosa de la tecnología en la gestión de las empresas: cambios organizacionales, procesos de negocios y capacitación”, dijo, por nombrar algunos ejemplos.
A su turno, Tolosa priorizó la instalación de la fibra óptica, hoy en día presente en 550.000 hogares. Una vez terminada la presentación, el presidente de Antel dijo a la diaria que “se cumplirá con lo acordado” y “el lunes” se retomará la instalación de la fibra óptica, que se detuvo parcialmente en febrero con el envío a seguro de paro de unos 975 trabajadores. Respecto de las inversiones, sostuvo que se ejecutarán diez millones de dólares en el ejercicio de 2016 -que empieza en noviembre para Antel-, mientras que en 2015 el monto invertido fue de 60 millones.