“Es de esperar que la mayor parte de los grupos esté acordando antes de fin de mes”, dijo ayer el titular de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), Juan Castillo, al finalizar una jornada de intensas negociaciones en los sectores de la salud pública, el transporte interdepartamental y la bebida. El jerarca evaluó las instancias como “positivas” porque “en todos los puntos se generaron avances”, e informó que en la actual ronda de Consejos de Salarios hay 12 acuerdos firmados, 16 grupos que “están avanzando en la negociación”, diez que “están discutiendo sin problemas” y otros diez que “están trancados por distintos motivos”. Para Castillo se está dentro de los plazos que el equipo del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) se fijó cuando lanzó la convocatoria de la sexta ronda.

En tratamiento

Con respecto a la situación de la negociación en el transporte interdepartamental e internacional, un conflicto en el que intervino personalmente, Castillo dijo que se reunió con una delegación del sindicato, “se acercó una propuesta concreta” y se consiguió que hoy vuelva a funcionar el ámbito tripartito de negociación colectiva en el que comenzarán a discutir “las condiciones extrasalariales” y dejarán “para el final la parte económica”. “Si logramos que eso avance, nos va a posibilitar tomar oxígeno y poder seguir avanzando en las negociaciones”, valoró.

En el caso de la salud pública, el jerarca indicó que se reunió la tripartita, en la que el Poder Ejecutivo presentó “una propuesta concreta que se acercó lo máximo posible” y “contempla gran parte” de lo exigido por la Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP).

El secretario general de la FFSP, Martín Pereira, dijo a la diaria que la propuesta consta “de un piso salarial, partidas por presentismo y se le suma una partida para diciembre de este año, que es lo nuevo que apareció en la negociación”. El piso mínimo salarial es de 20.000 pesos. Hoy se reunirá el Secretariado Nacional de la FFSP para analizar el tema y está previsto que se convoque a un Plenario Nacional para el lunes, día en que el MTSS y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) deben recibir la respuesta. Castillo explicó que “si hay acuerdo” hay que rearmar el articulado del Presupuesto, que se encuentra en discusión en el Senado, “para que haya una distinta reasignación de recursos”.

Destapá y ganá

La negociación del grupo de la bebida transcurrió, a diferencia de la mayoría de los grupos, en el MEF, y contó con la participación del titular del MTSS, Ernesto Murro, el ministro interino del MEF, Pablo Ferreri, además de las delegaciones de la Federación de Obreros y Empleados de la Bebida (FOEB), encabezada por su secretario general, Richard Read, y del Centro de Fabricantes de Bebidas sin Alcohol y Cervezas.

El secretario de conflictos de la FOEB, Fernando Ferreira, informó que se alcanzó un acuerdo en el subgrupo específico del grupo 1 “Procesamiento y conservación de alimentos, bebidas y tabaco”, pero que el jueves continuarán las negociaciones con el fin de llegar a un acuerdo en el grupo 13, en el que se fijan los laudos del transporte de bebidas. “Dejamos claro que para llegar a un acuerdo completo hay que liquidar este grupo también”, explicó. El dirigente dijo que el sindicato no tuvo que “dejar” ninguna de las reivindicaciones planteadas previamente y consiguió un ajuste retroactivo a julio de 2015 de 6,5% y otro a enero de 8,14%, así como ajustes semestrales a partir de enero de 2017 de 4,5%, y dos más de 4%, dos partidas fijas y la financiación de dos guarderías para los hijos de los trabajadores, una en Montevideo y otra en Pan de Azúcar. Ferreri opinó que la reunión fue exitosa porque se arribó a un acuerdo con las empresas de que “en 2016 y 2017 los precios no suban más que la inflación”. “De esta manera no se trasladan a precios los aumentos por encima de las pautas”, agregó en diálogo con la diaria.

Ayer, después del Consejo de Ministros, Ferreri había explicado que en el caso del sector de la bebida y otros, el Poder Ejecutivo “está buscando” que “más allá de los acuerdos a los que se llegue, no se generen problemas o haya cuestiones contraproducentes para la economía en general y los uruguayos”. “Por ejemplo, en lo que tiene que ver con el traslado a precios de acuerdos que excedan las pautas. El gobierno no impide acuerdos, lo que vela es que esos acuerdos no tengan efectos nocivos para la sociedad y para el conjunto de los uruguayos”, explicó.

Con esta afirmación, el jerarca también justificaba un decreto aprobado ayer “vinculado con el traslado a las paramétricas de contrato de obra pública con aumentos salariales acordados en Consejos de Salarios”. “Sólo se admitirá el traslado de aumentos establecidos en las pautas del Poder Ejecutivo. Aquellos que superaran lo establecido en éstas no podrá ser trasladados a los contratos de vialidad [con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas] y deberán ser soportados por las empresas que acuerden esas pautas”, expresó.

El convenio colectivo de la construcción vence en octubre del próximo año. El secretario general del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos, Daniel Diverio, dijo que 25% de los trabajadores del sector se desempeña en obras públicas, y que, hasta ahora, las empresas trasladaban los ajustes salariales “a precios”.