Cuatro dirigentes de la Unión de Trabajadores Azucareros de Artigas (UTAA) que habían comenzado una huelga de hambre el jueves 19, en el marco de una serie de reivindicaciones por un proyecto de reforma agraria, resolvieron ayer en asamblea levantar la medida. Tuvieron una reunión con autoridades del Instituto Nacional de Colonización (INC), del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y de Alcoholes del Uruguay (Alur), tras la que avizoran un “proceso de negociación” que comenzará la semana que viene y, según contó el secretario general de UTAA, Sergio Pintado, se sienten encaminados.
El centro del planteo de la Comisión de Tierras de UTAA es poder acceder a 200 hectáreas ubicadas en el kilómetro 613 de la ruta 3, donde poner en marcha un proyecto productivo que, consideran, podría ser “piloto de una reforma agraria”. El predio, actualmente en manos del INC, fue ocupado por la comisión el sábado 14 de noviembre y desocupado el lunes siguiente; dejaron el predio pero armaron su campamento del otro lado del cerco, sobre la carretera. “Sabíamos bien que no nos iban a decir ‘tomen la tierra’. Pero estamos bien rumbeados”, explicó Pintado a la diaria después del encuentro de ayer, y agregó que, de todas formas, mantendrán el campamento.
Entre los puntos positivos que dejó el encuentro, Pintado mencionó que el INC, al igual que la UTAA, “quiere apostar por la diversificación”. La Comisión de Tierras de UTAA evalúa que en vistas de que Alur no prevé expandir su producción de caña de azúcar, y por los cierres de empresas como Greenfrozen y Calvinor, la diversificación de la producción es la salida para superar la zafralidad que implica el trabajo cañero. En esto también está de acuerdo el INC, que, según manifestó su presidenta, Jacqueline Gómez, ha apoyado proyectos que prevén la diversificación de la producción, y considera que se debe consolidar ese proceso en las tierras ya adjudicadas. De 2.000 hectáreas adjudicadas directamente en acuerdo con UTAA en Bella Unión, “hay 1.000 que tienen la posibilidad de ser diversificadas pero no están en producción”, explicó.
Para el predio de la ruta 3 UTAA propone un proyecto “muy ambicioso”. Podrían vivir allí cerca de 25 familias y se implementarían actividades de horticultura, ganadería, actividad granjera y lechería (y tan sólo diez hectáreas se destinarían a la plantación de caña); el proyecto también prevé el apoyo económico por un año a los trabajadores y la exoneración por cinco años del pago de la renta de la tierra (la cuota que pagan los colonos al INC). Estiman que el presupuesto necesario sería de 227.596 dólares. “Les dijimos que UTAA es el único sindicato que ha tenido adjudicaciones directas”, dijo Gómez respecto de esta propuesta, y añadió que en temas como el apoyo económico el INC no tiene competencia.
En la reunión UTAA planteó conformar una mesa de diálogo para discutir la propuesta. Según Pintado, se reunirá el lunes 30, y se espera que lo integren no sólo la UTAA y el INC, sino también el MGAP, Alur, la Universidad de la República, la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y el Ministerio de Desarrollo Social. Gómez les transmitió que el INC participará.
El último punto de la plataforma de la Comisión de Tierras es la renegociación de las deudas de todos los trabajadores que accedieron a tierras en Bella Unión. “Tenemos trabajadores endeudados, porque entran sin un peso”, dijo Pintado. Gómez respondió que no están de acuerdo con la renegociación. Informó que actualmente hay un integrante de la colonia Raúl Sendic al que, después de varias negociaciones, se resolvió exigirle la devolución de la tierra. “Negociamos la deuda y si cumplían con la propuesta tenían una quita; algunos entraron y otros no, pero por opción de ellos. En casos en que la gente ha incumplido, por respeto a los que cumplieron, porque tenemos una demanda altísima de tierra, tenemos que tener cuidado”, explicó.