“¡Por los derechos y el bienestar de nuestros perros!” fue el llamado que nucleó en la tarde de ayer, en la explanada de la Intendencia de Montevideo, a los dueños de canes que rechazan la normativa departamental que obliga a ponerles bozal a los perros de más de 25 kilos cuando circulan por el espacio público, y que establece como obligatorio el uso de la correa para pasearlos. Los manifestantes sostienen que el bozal no permite al perro “relacionarse” ni descargar energía, y que es malo para la salud de algunas razas. Hoy a las 17.20 se reunirán con las autoridades departamentales para conversar sobre el tema, según informó ayer la comuna.