Reedición de una discusión
Una fuente interna de UTE dijo a la diaria que desde el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) se está pensando en un ajuste de 8% en las tarifas eléctricas en enero. Consultado al respecto, el presidente de la estatal dijo que se estaban manejando “muchos números”, pero que no quería adelantar datos con precisión, porque las conversaciones “aún están en curso”.
Según el presidente de la Asociación de Funcionarios de UTE, Gabriel Soto, “no debería aumentar ni un peso”, porque “las centrales térmicas ni se prendieron, y el avance de la eólica también ayudó”. Soto sostuvo que, si se llegara a aumentar, se trataría del “incremento más injustificado de los últimos años”.
Hace un año, el Ejecutivo y UTE entraron en el mismo cruce cuando la estatal proponía un ajuste de 3,9% y el MEF finalmente decidió aumentar las tarifas 6,9%.
Para Casaravilla, es el cierre de un año “muy bueno”, tanto desde el punto de vista de la gestión como del abastecimiento de la demanda. Si bien aún falta terminar la auditoría, el borrador preliminar del balance de la estatal indica un resultado positivo de 230 millones de dólares para este ejercicio, lo que indicaría una rentabilidad positiva de 5,5%.
“Creo que supimos cumplir”, afirmó el presidente de UTE, quien destacó la construcción de 1.100 kilómetros de electrificación rural, que incluyeron en la red a 709 familias y 12 escuelas, el recambio de más de 6.000 postes, la construcción de 441 kilómetros de línea de alta tensión, 200 de media tensión y 250 de baja tensión, además de algunas inversiones más pequeñas, como la instalación de 58 megavatios de fotovoltaica y 150 sistemas más de microgeneración que aportaron 4,6 megavatios al sistema. Durante este año también se concretó un hecho histórico: el primer acuerdo que permitirá exportar energía eléctrica a Brasil por medio de un marco comercial formal con Electrobras. La eólica fue la fuente más destacada: este año, 17% de la energía generada provino del viento, mientras que en 2014 sólo se había alcanzado 6%.
En el correr del año que ya está por terminar UTE invirtió unos 270 millones de dólares, y la perspectiva es seguir por el mismo camino. De acuerdo con el Presupuesto Quinquenal aprobado hace unos días por el Parlamento, el ente invertirá 1.400 millones de dólares de manera directa y unos 500 millones por medio de asociaciones con privados; del total, se destinarán 1.300 a parques eólicos.
Deseos de fin de año
La prioridad más importantes para 2016 es terminar la obra de ciclo combinado en Punta del Tigre, que lleva más de un año de atraso por incumplimientos de la constructora Hyundai en las condiciones de trabajo.
Por otro lado, se incorporarán más de 300 megavatios de eólica por medio de los parques Pampa, Arias y Valentines, en proceso de construcción entre Florida y Treinta y Tres. Se construirán 1.000 kilómetros adicionales de electrificación rural y se incorporarán acciones que permitan “compatibilizar la generación variable de la optimización de las redes”. Está previsto que en 2017 UTE instale medidores “inteligentes” para fijar una tarifa variable por horas, de manera de hacer más eficiente la demanda y concentrarla durante las horas de mayor generación. La idea está madurando, pero, aun así, Casaravilla adelantó que la licitación para los medidores se lanzará antes de febrero.
Siguiendo la línea de ANCAP, Casaravilla anunció que UTE procurará reperfilar su deuda en 2016: “salir de la dependencia de los dólares y pasarnos al peso”, y mejorar la eficiencia en la gestión por medio de la implementación de un modelo de desempeño por competencias.