“Si todos pensáramos un poco más en la gente y menos en nuestro futuro político, existirían más acuerdos que le harían bien al país”, tuiteó Edgardo Novick el 23 de diciembre, luego de una conferencia de prensa junto al titular de la Intendencia de Montevideo (IM), Daniel Martínez, para dar a conocer el acuerdo al que llegaron sobre el Fondo Capital. La sorpresa que generó que el candidato que atacó a Martínez con más furia durante la campaña electoral saliera a respaldarlo, cuando naufragó el soporte financiero del plan de obras de todo el período, fue mayúscula. Hubo incluso ediles del Frente Amplio (FA) que cuestionaron el acuerdo, básicamente porque Novick quedó como el articulador y porque dio este paso pensando, y mucho, en su futuro político. Más cuando parece haber sido el puntapié inicial del surgimiento de una nueva colectividad política.

Con una mirada más general del panorama político latinoamericano, el politólogo Fernando Rosenblatt, uruguayo que reside en Chile, dijo que “las candidaturas independientes, despegadas de cualquier tipo de organización, no son lo mejor para la democracia”. “Las organizaciones políticas establecidas ayudan a canalizar un montón de cosas y generan estabilidad y predictibilidad en el electorado. Es decir, yo sé para dónde va a arrancar el FA, o el Partido Colorado, pero no sé para dónde va a ir un Novick”, agregó. Dijo que esto y el hecho de que Novick sea “una persona outsider” y además “con perfil empresarial” “son cosas que se agregan a los riesgos que tiene, para la calidad de la democracia, el surgimiento de candidatos independientes”. “Esto es un poco contrario al sentido común establecido ahora, que celebra las candidaturas independientes. Pero si hay algo que puede explicar por qué tenemos una democracia tan buena en Uruguay es que tenemos buenos partidos políticos, no sólo estables, sino con vida”, añadió. Para el politólogo, si bien los partidos “no son lo mismo que hace 100 años y la forma en que se organizan cambió”, esto no quiere decir que “la organización deje de ser importante”. “Uno de los riegos de no tener una organización a la que rendirle cuentas” es que uno “puede arrancar para cualquier lado” y “no se sabe si es izquierda o derecha ni qué quiere y qué no quiere”, afirmó. Consultado sobre cómo se explica el hacer política con un discurso antipolítico, Rosenblatt dijo que se trata de “uno de los rasgos discursivos de un liderazgo populista”.

Las críticas a Novick desde este enfoque fueron sostenidas por integrantes del FA. La senadora Lucía Topolansky (Movimiento de Participación Popular, MPP), una de las contrincantes de Novick en la campaña electoral por la IM, lo calificó como un “peligro para la democracia”. En ese entonces, Novick le respondió que cuando él “estaba cargando cajones en la feria” ella “estaba cargando fusiles en plena democracia”. A Novick también se le criticó que no haya presentado un equipo de gobierno ni asesores, que no haya realizado actos de masas y que hasta se haya atrevido a hacer campaña con la consigna “Un cambio de frente”, utilizando el nombre de la fuerza política que gobierna la capital desde hace 25 años.

Sin embargo, hay quienes relativizan el perfil de outsider de Novick. El diputado del FA Daniel Caggiani (MPP) afirmó que no solamente el Partido de la Concertación (PdlC) surgió de los dos partidos tradicionales, sino que además Novick tampoco es “un recién llegado” a la política, ya que “tiene una historia, un perfil tradicional y hasta un compromiso”, porque fue asesor de Jorge Batlle y de Luis Alberto Lacalle. No obstante, le preocupa “la forma de financiamiento de los candidatos que puedan surgir y la ideología que terminan representando”. “Más allá de que se presentan como algo nuevo, es una ideología parecida a la de la década del 90, pero renovada comunicacionalmente”, agregó. “Esto tiene que ser un llamado de atención para que el sistema político uruguayo trabaje en mecanismos que transparenten la forma de financiamiento de los partidos, para que se pueda competir en igualdad y en cantidad de oportunidades”, afirmó después. Para el diputado, éste es uno de los temas “más importantes” que hay que incluir en la próxima reforma electoral.

Caggiani dijo además que habría que preguntarse “quiénes convencieron” al edil Gastón Arias de cambiar su voto y “cómo se explica que en menos de 24 horas Novick haya cambiado el discurso de que se iban a dilapidar los recursos” de la IM con el Fondo Capital y “termine haciendo un acuerdo con el intendente para aprobar un minifondo capital”, lo que lo deja en el escenario departamental “como un articulador”.

Desde el Partido Nacional y el PC criticaron a Novick porque no cumplió el objetivo asignado al candidato independiente del PdlC, que era captar votos de frenteamplistas descontentos, y terminó “pescando adentro de la pecera”. El politólogo Rafael Piñeiro dijo que el fenómeno de “gente que viene de afuera de la política, que logró reconocimiento afuera y entra a la política logrando ser electo en cargos importantes -que no es el caso de Novick, porque no fue electo para ningún cargo- no es nuevo para América Latina ni para otros contextos en los que los sistemas de partidos son poco institucionalizados”. Por el contrario, es “un fenómeno extraño para un sistema de partidos como el uruguayo, que tiene partidos que ya están en el escenario político, partidos que logran consolidar la mayoría de las adhesiones”. “Está por verse si Novick, sin que medie la ayuda de ninguno de estos partidos del sistema, es capaz de representar una amenaza electoral para los partidos que ya están instalados. Ubicarse antes que el PC, por ejemplo. Novick lo hizo, pero en una elección departamental y ayudado por los dos partidos tradicionales, que omitieron presentarse como tales. No necesariamente lo hubiera logrado solo”, opinó. Agregó que lo que pueda pasar “estará hablando de las fortalezas o de las debilidades del sector al que está cuestionando Novick en términos de representación, que son los partidos de centroderecha en Uruguay”. “Si Novick ataca a esas estructuras partidarias y a sus bases electorales, podrá tener éxito comiéndoles esas estructuras a los blancos y a los colorados, y quedarse con su electorado”, concluyó.