Había quedado pronto días atrás; ayer se habilitó la circulación vehicular y fue inaugurado por las autoridades. El puente sobre la laguna Garzón comunica por la costa atlántica los departamentos del Maldonado y Rocha, uniendo la costa uruguaya de punta a punta, algo que se interrumpía en la laguna, donde funcionaba un sistema de balsas. La obra fue propuesta por el empresario argentino Eduardo Costantini, quien tiene el emprendimiento turístico Las Garzas Blancas, en Garzón, en una de las zonas más vírgenes de la costa de Rocha.

Todo empezó en diciembre de 2008, cuando el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) firmó, con el apoyo de las intendencias de Maldonado y Rocha, un convenio con la empresa de Costantini habilitando la construcción del puente, que sería “solventado totalmente por la firma privada, bajo la supervisión de la Dirección Nacional de Vialidad”, decía una nota del sitio web de Presidencia de la República. Su construcción llevó más tiempo del que el empresario esperaba inicialmente, por la oposición de quienes recomendaban reservar esas áreas para la conservación y cuestionaban la construcción de una vía de tránsito rápida y paralela a la costa. El proyecto fue analizado por la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) y cambiado varias veces en función de lo que pidió el organismo; una de las estrategias fue su diseño circular -a cargo del arquitecto Rafael Viñoly- como forma de disminuir la velocidad a la que se puede circular. La Dinama autorizó su construcción en enero de 2013, con la condición de que la laguna pasara a ser parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas y que se desafectara a la ruta 10 de su carácter nacional en ese tramo, para disminuir el tránsito y la velocidad. De acuerdo a la reseña del sitio web Las Garzas Blancas, las obras comenzaron en agosto de 2014 -estuvieron a cargo de la empresa Saceem- con un plazo de finalización fijado en diciembre de 2015.

Entre otras autoridades, participaron en la inauguración el titular del MTOP, Víctor Rossi; la ministra de Turismo, Liliam Kechichián; los intendentes de Rocha y Maldonado, Aníbal Pereyra y Enrique Antía; Costantini y Viñoly. El costo de la obra fue de alrededor de 12 millones de dólares. Costantini financió 80% y el resto fue costeado por el MTOP, que hizo la conexión del puente con la ruta 10.

Rossi expresó ayer que la obra “se va a convertir en un elemento de referencia, va a ser un paseo en sí mismo”, puesto que además de su diseño novedoso y la belleza del entorno, tiene sendas peatonales. Añadió que se completará con la repavimentación de la ruta 9 y de un tramo de la ruta 15.

Kechichián anunció que el puente le permitirá a Rocha “atraer visitantes de mayor nivel económico que vienen de Maldonado”, recogió el sitio web de Presidencia.