El presidente Tabaré Vázquez, su gabinete y la bancada de legisladores del Frente Amplio (FA) cerrarán el año con una reunión conjunta el martes 29 de diciembre. Será el segundo encuentro entre las principales autoridades del Poder Ejecutivo y la representación del oficialismo en el Poder Legislativo, que oficia como mayoría parlamentaria. “Vamos a tener una reunión con la bancada de senadores y diputados del FA, el Consejo de Ministros y el presidente. Tendremos un intercambio en el que podremos hacer una evaluación del trabajo realizado hasta el momento”, dijo el sábado, tras la sesión del gabinete, el prosecretario de Presidencia, Juan Andrés Roballo. Pero, a pesar de que la reunión fue presentada de esta forma, para el coordinador de la bancada de diputados del oficialismo, Carlos Varela, se trata de un encuentro “para celebrar” y no de una “instancia política”.

Más allá de los posibles motivos del encuentro, las críticas a las relaciones que ambos poderes han venido llevando no faltaron en el filas frenteamplistas. La senadora Daniela Payssé (Asamblea Uruguay) ha reconocido en numerosas oportunidades que no ha habido una adecuada interacción entre la bancada oficialista y el Poder Ejecutivo. Su par Constanza Moreira (Casa Grande) también se ha quejado de esta relación: el lunes 24 de noviembre cuestionó la forma en la que el Ministerio de Economía y Finanzas se inmiscuyó en la discusión del Presupuesto Quinquenal: “Nunca el Senado estuvo tan presionado”, graficó la legisladora en diálogo con la diaria.

La relación entre ambos poderes también afectó en algunas oportunidades al Poder Ejecutivo. El 30 de setiembre, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, le dijo a la bancada de diputados del FA que no seguiría en su cargo si ésta decidía retirar del proyecto de ley de Presupuesto el artículo que autoriza a redirigir partidas salariales de la Administración Nacional de Educación Pública al rubro “inversiones” de este organismo, de no llegar a un acuerdo con los gremios de la educación.

Pero, a pesar de estos altercados, generados en su mayoría durante el tratamiento del proyecto de ley del Presupuesto Quinquenal, el Ejecutivo entiende que la serie de acuerdos internos que posibilitó la aprobación de esta norma sin mayores sobresaltos constituye un proceso por demás exitoso. “En su elaboración hubo mucho trabajo y el resultado fue positivo. En las prioridades nadie estuvo en desacuerdo y el esquema de trabajo fue muy bueno. Era un tema complejo que se resolvió bien”, expresaron desde el gobierno.

Durante el Consejo de Ministros, Vázquez hizo referencia a los tiempos difíciles que debió atravesar el gobierno durante estos primeros nueve meses. “Han sido meses muy intensos, a diferencia de otros períodos de gobierno”, destacaron integrantes del gabinete. Según el diario El País, Vázquez llegó a admitir que fueron los meses más complicados que tuvo que enfrentar como gobernante. Tras el gabinete, Roballo declaró que hubo una “mayor exigencia desde el primer día de gobierno. Es un dato de la realidad, que nos obligó a tomar mas energía”.

Por su parte, el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, sostuvo que no existe una “situación de alarma especial” en la región, aunque sí admitió que hay una especial atención en lo que ocurre en la zona. El jerarca dijo que, a diferencia de décadas anteriores, Uruguay está menos expuesto a los embates y las decisiones económicas de Argentina y Brasil, aunque tampoco es inmune a estas realidades.

Roballo también anunció que el Ejecutivo emitirá una publicación antes del 1º de marzo de 2016 en la que cada ministerio difundirá un resumen de lo actuado durante el primer año de gobierno, y de las proyecciones de cara al año venidero. El Consejo de Ministros continuará funcionando en enero, aunque todavía no se sabe cuándo será su próxima sesión ni con qué frecuencia se reunirá.