La Cámara de Senadores aprobó anoche el proyecto de ley que capitaliza a ANCAP por 622 millones de dólares, únicamente con los votos del Frente Amplio (FA). La iniciativa, enviada por el Poder Ejecutivo, generó una intensa (y polémica) actividad en el Parlamento durante toda la jornada, desde la mañana a la noche.
Todo arrancó temprano, a las 9.30, cuando la cámara debía interrumpir su receso para dar ingreso al proyecto. Sin embargo, surgió un imprevisto: la ausencia de algunos senadores del propio oficialismo. Tanto el Partido Nacional (PN), como el Partido Colorado (PC) y el Partido Independiente (PI) optaron por la misma estrategia ante un proyecto al que se oponen porque, sostienen, no existen garantías de cambios en la empresa. Ninguno de los tres partidos llevó a sus legisladores a sala, lo que obligaba al FA a presentar a todos sus senadores para lograr la mayoría absoluta y levantar el receso. Sin embargo, la ausencia de los senadores Rafael Michelini (Frente Liber Seregni), Marcos Carámbula (Espacio 1001) y Rubén Martínez Huelmo (Espacio 609) le impidió al oficialismo dar ingreso al proyecto.
Comodín
La jornada de hoy en la Cámara de Diputados será muy parecida a lo que ocurrió ayer en el Senado. El proyecto ingresará en una sesión extraordinaria de mañana, será discutido en comisión de tarde y se votará en otra nueva sesión de noche. Pero a diferencia de lo ocurrido en el Senado, el FA no contará con los diputados suficientes para levantar el receso, porque los partidos de la oposición también buscarán que no haya quórum y porque el diputado Enzo Malán se encuentra de viaje en el exterior y no puede llegar a tiempo a la sesión. A pesar de que el diputado colorado Germán Cardoso sostuvo que su partido no dará quórum, quien posibilitará que el tema ingrese a sala será su compañero de bancada Guillermo Facello, aseguraron desde el FA. Facello no responde a ninguno de los líderes colorados, sino al ex candidato a la Intendencia por el Partido de la Concertación Edgardo Novick. Para la votación del proyecto el FA sí podrá contar con sus 50 votos, porque podrá ingresar el suplente de Malán.
La ausencia más mediática fue la de Michelini, quien se encontraba en Playa Verde. Sin embargo, el tema fue un malentendido, sostuvo el senador, que dijo haber avisado que no podía concurrir en la mañana por motivos personales, pero la bancada al parecer no acusó recibo. La sesión de ingreso se aplazó para las 15.00. Poco antes de llegar al Parlamento, Michelini, quien antes había dicho que era necesario cambiar el directorio y varios gerentes de ANCAP, se reunió con el presidente Tabaré Vázquez; según afirmó, el mandatario le aseguró que “va a haber cambios” en el ente y le dio “garantías” de que esos cambios se cumplirán.
La tarde
La segunda fue la vencida para el oficialismo, y a las 15.00 logró el quórum para ingresar el proyecto y enviarlo a la Comisión de Hacienda de la cámara. Los senadores de la oposición ingresaron y comenzaron a argumentar en contra del apuro y la “desprolijidad” con la que se pretendía aprobar la iniciativa. El senador Jorge Larrañaga fue quien expuso la mirada opositora de forma más pintoresca: “Esto se resume en una operación contable, que se hace para que el balance de 2015 arroje mejores resultados, entre sidras, turrones y pan dulces”. También cuestionó que se convoque una sesión a las 20.00, lo que calificó de “antológico” y “de Ripley”. La respuesta fue del senador y coordinador de bancada del FA, Ernesto Agazzi: “Esto es una cosa bien hecha, que se hace respetando la normativa, la Constitución, las leyes y el reglamento de la cámara. Muchos senadores dicen que es necesaria una capitalización pero se oponen a esta capitalización [en particular]”. Argumentó que se trata de una norma que es “buena para el país, para nuestros servicios públicos y el funcionamiento de ANCAP”.
Momentos tensos
En una entrevista publicada ayer por Uypress, el ex ministro de Economía y Finanzas Fernando Lorenzo dijo sentir asombro e “indignación” ante “la clara ofensiva desatada para distribuir responsabilidades a otros compañeros, sobre temas que cualquiera comprende que son resortes de gestión exclusivamente de las autoridades de cada empresa del Estado, tanto a nivel del directorio como de las diferentes gerencias”. Se refería a integrantes de la lista 711, liderada por el vicepresidente Raúl Sendic, que han responsabilizado públicamente a Lorenzo por el desequilibrio en ANCAP. “El Ministerio de Economía y Finanzas [MEF] puede controlar y alertar sobre el monto de las inversiones, no sobre su calidad, sobre el plan de negocios en las que están basadas, ésa no es tarea ni son potestades del MEF”, reafirma el ex ministro, que recuerda que “en diversas oportunidades se discutió el tema, incluso en momentos que todos recordarán fueron muy tensos en el Consejo de Ministros”.
Una hora después estaba fijada la sesión de la Comisión de Hacienda para tratar el proyecto, con dos invitados: el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori, y su par de Industria, Energía y Minería, Carolina Cosse. Además, participaron los diputados que integran la Comisión de Hacienda de la cámara baja. Astori sostuvo que la “urgencia” del gobierno en aprobar el proyecto de ley respondía a la necesidad de mejorar el resultado del balance de la empresa en 2015. Según argumentó el jerarca, un mejor balance posibilitará que la empresa obtenga mejores condiciones de endeudamiento bancario, al disminuir el riesgo crediticio. El ministro también argumentó que tras la capitalización, la relación de la deuda (poco más de 2.000 millones de dólares) con el patrimonio de la empresa (cerca de 200 millones de dólares) pasará de ser de diez a uno a “una vez y media a uno”.
En tanto, Cosse sostuvo que el proyecto de ley irá acompañado de un “paquete de medidas grandes” definidas por el Poder Ejecutivo, aunque admitió que muchas de ellas no están listas y sólo están “los títulos”, dado que “son proyectos que debemos desarrollar en tiempos cortos y exigentes”.
La noche
Tal como temía Larrañaga, el proyecto comenzó a ser votado a las 20.00, con la senadora del MPP Patricia Ayala como miembro informante. Con una versión de los hechos mucho más cercana a la del ex presidente de la empresa y ahora vicepresidente Raúl Sendic que a la de Astori, la legisladora destacó las inversiones en ANCAP en los últimos diez años, por un total de 1.250 millones de dólares, con un promedio anual de 125 millones. La cifra, sostuvo, es muy superior a los 12 millones de dólares por año que invertía la empresa antes de 2005. Ayala también destacó que en el precio de los combustibles existen variables que no corresponden a ingresos de ANCAP, que sólo recibe 36% de cada litro de nafta. Ayala recalcó que el plan de inversiones de la empresa se llevó a cabo sin la asistencia del Estado, y “aportó al Estado pero no pudo acceder al mismo nivel de financiación que el gobierno central”. La senadora culminó hablando de los “fines sociales” de las empresas públicas, y expresó: “Votamos por continuar sosteniendo la bandera de la soberanía nacional”.
La respuesta de la oposición vino por parte de Álvaro Delgado, quien ofició como miembro denunciante en la Comisión Investigadora de ANCAP. El legislador criticó que el gobierno no explicara qué medidas tomará para mejorar la gestión, no removiera a las autoridades del ente y que además esté aplicando y aplicará una “capitalización encubierta”, en la medida en que no bajará los combustibles en enero, cuando el petróleo ha bajado 27%. Además, agregó que en 2015 el combustible “bajó menos de lo que debió y subió más de lo que debería haber subido”. Esta capitalización encubierta, cuantificó, supone unos 150 millones de dólares adicionales. Delgado sostuvo que la cifra alcanza 2% del Producto Interno Bruto, y que “no existe una capitalización de esta magnitud en toda la historia” del país. Por último, cuestionó que el déficit de la empresa, que en julio Cosse estimaba bajar este año a 50 millones de dólares, fue, tan sólo en el primer semestre, de 165 millones, según dijo el presidente de ANCAP, José Coya, en la Comisión Investigadora.
El debate transcurrió en un clima de tensión, en el que, a diferencia de lo habitual, el FA se negó a votar las extensiones de tiempo para las oratorias de los senadores de la oposición, como una devolución de gentileza a la decisión de éstos de no hacer quórum al momento de dar ingreso al proyecto. En la discusión no abundaron las oratorias de los legisladores del FA, mientras que la oposición presentó un abanico de argumentos y acusaciones al partido de gobierno, como “quieren fundir ANCAP”, o críticas por votar el proyecto en el Día de los Inocentes. El nacionalista Luis Alberto Heber invitó a Sendic a bajar y discutir, dado que se iba a estar hablando de su administración. Luego lo cuestionó directamente al afirmar que “el abecé comercial es no endeudarse en dólares”. Su par colorado José Amorín ironizó afirmando que la “modernización” que se hizo en la empresa “no es la que le sirve al país”, y defendió a Michelini porque “actuó con la responsabilidad de un gobernante” al ir a pedirle explicaciones a Vázquez. “Tuvo la fortuna de que el presidente de la República le dijo ‘quedate tranquilo que va a haber cambios profundos’. Pero nosotros no escuchamos ninguno”. En tanto, Larrañaga dijo que el FA se aseguró una “derrota ideológica”. El que sacó la cabeza en el oficialismo fue Leonardo de León, que en su intervención contradijo lo dicho por Astori tras la Comisión de Hacienda: “Esta capitalización no va a tener resultado en el balance de 2015”.