Los guardavidas de Rocha deberían comenzar mañana el servicio en las playas, pero no lo harán, por estar en conflicto con la Intendencia de Rocha. Desde 2007 son contratados por siete meses y medio, lo que incluye el entrenamiento de 25 jornales que comienza en noviembre, 102 días consecutivos de servicio en playa y cinco jornadas técnicas; los días libres y las horas extras generadas en esos 102 días son los que permiten extender el contrato a los siete meses y medio. En julio la Asociación de Guardavidas de Rocha (AGR) se reunió con el intendente Aníbal Pereyra y le presentó una propuesta para que los contratos fueran anuales, para no quedar cuatro meses y medio sin seguridad social; la idea era sustituir el contrato de 44 horas semanales por uno de 30 horas, para generar más horas extras que fueran distribuidas en el resto del año, y tener un entrenamiento mayor. Horacio Speroni, presidente de la AGR, explicó a la diaria que el cambio no significa un mayor gasto para la intendencia.

La comuna no aceptó ésa ni otras propuestas que no cubrían el año entero. La negociación se estancó y el viernes 4 tuvieron una primera reunión en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, en la que el ministerio le propuso a la intendencia extender el contrato a ocho meses y medio, incluyendo diez jornadas de servicio y contabilizando la media hora de descanso, que no tienen. La comuna quedó en responder en la siguiente reunión tripartita, que estaba fijada para hoy pero que se postergó hasta el lunes.