El anuncio del gobierno argentino de Mauricio Macri de que dejará de exigir la Declaración Jurada Anticipada de Importación generó optimismo en las autoridades uruguayas. El canciller Rodolfo Nin Novoa sostuvo el lunes que “es un primer paso importante”.

El presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Alberto Díaz, dijo a la diaria que aún resta destrabar el transbordo de barcos argentinos en puertos uruguayos. Díaz sostuvo que el lunes 21, en ocasión de una reunión de la Comisión Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná, se reunirá con las autoridades argentinas a efectos de avanzar en uno de los temas que han “perjudicado” el funcionamiento de los puertos de Montevideo y Nueva Palmira, desviando el tráfico hacia los puertos de Brasil.

En noviembre de 2013 la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables del país vecino anunció que ya no se realizarían transbordos de cargas originadas en su territorio en Uruguay. En ese entonces, la Asociación Uruguaya de Derecho Marítimo emitió un declaración pública en la que señalaba que las disposiciones tomadas por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner constituyen “una violación flagrante de los tratados internacionales vigentes” y una “amenaza” al puerto de Montevideo, así como a “los intereses generales de nuestro comercio internacional y del país”.

Además, el presidente de la ANP planteará el lunes “el tema del largo de los convoyes de las barcazas que transitan por la hidrovía”, otra medida que “pasó más desapercibida, pero que también tuvo su impacto”, según afirmó.