La situación crítica de la empresa de productos lácteos Ecolat podría expandirse a otras empresas del sector. Ésa fue una de las conclusiones de una reunión realizada ayer en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social en la que participaron autoridades de tres ministerios, del PIT-CNT, de la Federación Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) y de los productores de leche.

La decisión del grupo peruano Gloria de cerrar Ecolat y despedir a 400 trabajadores podría repetirse, con menos impacto, en otras empresas. Álvaro Delgado, dirigente de la Unión Intersindical de Trabajadores de Ecolat, expresó que tanto Pili como Bonprole también se encuentran en “negociaciones por reestructuras” e incluso esta última se encamina a concretar 48 despidos.

En el gobierno no todos dan por perdidas las negociaciones con el grupo Gloria. Según dijeron algunos de los participantes, el director nacional de Trabajo, Luis Romero, no descarta que se pueda revertir la situación en diálogo con la empresa. En tanto, el subsecretario de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech, advirtió acerca de los antecedentes que esta situación podría generar, no sólo en la industria láctea, sino también en otras dominadas por capitales multinacionales.

Los actores volverán a reunirse el lunes. El martes, una asamblea de la FTIL definirá un paro de 24 horas en el sector. Según dijo el dirigente de este gremio, Carlos Cachón, los caminos ante la retirada de Ecolat son la búsqueda de un nuevo inversor o que los trabajadores gestionen la empresa. Ayer el presidente José Mujica dijo que Ecolat “venía siendo manejada con un criterio de invertir poco y está vieja”. Además, criticó que se apostara únicamente a la leche en polvo. Sin embargo, el mandatario señaló que como la industria láctea es “muy grande, no descartaría que pudieran entrar unos acá y otros allá, y se pueda arreglar esto”.