Finalmente, ayer al mediodía el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Colorado (PC) designó por unanimidad como candidato a la Intendencia de Montevideo (IM) al abogado Ricardo Rachetti, que deberá ser habilitado el jueves por la convención departamental colorada y al otro día proclamado por la convención del Partido de la Concertación (PdlC) junto al candidato del Partido Nacional Álvaro Garcé y el independiente Edgardo Novick. Rachetti, de 50 años, casado y con tres hijas, forma parte del estudio DLCR & Asociados, integra el Consejo Directivo del Club Atlético Peñarol desde hace ocho años y recientemente estuvo a cargo de completar el pase del jugador Jonathan Rodríguez a Benfica de Portugal. Es sobrino del fallecido Óscar Víctor Rachetti, intendente capitalino que asumió en 1969 como tercer suplente, fue electo en 1971 y permaneció en su cargo luego del golpe de Estado de 1973 hasta 1983, cuando presentó su renuncia. Casualmente, Rachetti tío, que falleció en 2013, fue uno de los primeros adherentes del movimiento creado por políticos blancos y colorados llamado Concertación Ciudadana.

Ricardo Rachetti dijo a la diaria que tomó su designación “con mucha alegría” porque se le ofreció la posibilidad “en el momento en que el partido necesitaba un candidato”. “Asumí con renunciamiento personal y haré lo que el partido necesite. Quiero trabajar por el partido. Es un lindo desafío, y creo que las condiciones estaban dadas para poder aceptar esta candidatura”, manifestó, aunque aclaró que “ahora hay que esperar todas las formalidades”, en referencia a las dos convenciones que lo tienen que avalar. Rachetti expresó que si bien “nunca” fue convencional ni tuvo “un cargo político”, milita en el PC desde “los 18 años” y hace “política partidaria dentro de Peñarol”.

Finalmente aseguró que no puso condiciones para aceptar. Se refirió a Luis Alberto Ney Castillo, el ex candidato del PC que renunció por falta de apoyo, como “un hombre del partido” que “habrá tenido sus motivos”, y anunció que va a hablar con él después de ser proclamado. “Necesitamos estar todos juntos para lograr el objetivo, que es que gane la Concertación, y, dentro de la Concertación, que ganemos nosotros”, concluyó.

Por su parte, el secretario general del PC, el diputado Germán Cardoso (Vamos Uruguay), dijo después de finalizado el CEN que tomaron “la mejor de las decisiones”. “Tuvimos en el ejecutivo dos cuartos intermedios, pero felizmente la figura que nos representará, ya que se dio la oportunidad propicia, es una figura joven, de renovación, tal como el partido necesita. Asimismo, encontrar a una persona que no hubiese participado en las pasadas elecciones internas, que fuera una figura notoriamente colorada y que estuviera preparado para esta instancia y que estuviera instruido para asumir la responsabilidad para la cual lo convocaríamos no fue un trabajo sencillo”, relató Cardoso.

El lunes el CEN se reunió al mediodía y de tarde y no llegó a una resolución. Durante ese día se fueron cayendo los nombres del ex presidente de Antel Gabriel Gurméndez, del ex ministro de Transporte y Obras Públicas Lucio Cáceres y del presidente del Club Nacional de Fútbol, Eduardo Ache. Ninguno de los tres quiso aceptar la postulación. Quedaba pendiente aún una conversación con el ex senador Ronald Pais, que había aceptado pero había puesto condiciones acerca del monto para financiar la campaña. Estas condiciones no fueron aceptadas por el CEN, por lo que Pais también quedó fuera de la lista. “Más allá de los nombres que se manejaron, el criterio que nos movilizó más fue que primara la renovación. Y con Ricardo Rachetti conseguíamos ese objetivo. Rachetti es de la nueva generación de la política del partido”, aseguró Cardoso. Rachetti fue aplaudido cuando ingresó en la casa del PC, y luego de un breve discurso, agendó varias reuniones con dirigentes y ediles capitalinos.

Penetrable

Luego de la designación de Rachetti, Castillo dio a conocer una carta por medio de Facebook en la que asegura que con la nominación “se cierra una semana” que “ha sido muy difícil”. “Recibí mucha consideración, cariño, respeto y comprensión. Recibí silencio respetuoso y también muestras de desilusión muy sentidas, austeras,constructivas. Valoro mucho todo esto”, escribió después. En la nota se despacha criticando al diputado Guillermo Facello (Amigos de Óscar Magurno), quien había calificado el “entorno” de Castillo de “impenetrable”. “Escuché a un diputado ciertamente muy ‘penetrable’ decir que se había volcado a apoyar otra candidatura porque mi equipo era ‘impenetrable’. A mi equipo: agradecimiento. Máxime cuando reciben de quien, por ser ‘penetrable’, vemos un día sí y otro también conductas por lo menos sorpresivas. Así, en el balotaje corrió a reunirse, ante las cámaras de TV y los fotógrafos de todos los medios de prensa, con el presidente [electo Tabaré] Vázquez y un amigo de éste que es jefe del diputado; o hace un mes declaró estar contra la Concertación porque era tiempo de reafirmar la identidad colorada y poco tiempo después apoya, en la Concertación, al candidato independiente”, agregó. Castillo escribió que también vio “un raid mediático” de alguien que lo había apoyado, culpándolo “de todos los males” del PC, y añadió que no tiene “vocación de ser candidato” de sí mismo. “Si no soy candidato de un partido fuerte que priorice lo que nos une frente a la ventajita menor, prefiero dar un paso al costado; o ‘abandonar la carrera’, aunque para algunos no se ‘justifique’. Para mí, en esas condiciones, no se justificaba seguir”, expresó, en clara referencia a un comentario en Facebook del senador Ope Pasquet, quien escribió que levantaron el nombre de Castillo “antes aún de que el propio Ney empezara a hacer campaña”. “Ahí están todavía nuestras columneras por toda la ciudad; y guardamos nuestras listas, que ostentan su foto junto a Pedro y a mí. Los gastos respectivos corrieron por nuestra cuenta; y obviamente, no nos quejamos. Hicimos campaña por un candidato que abandonó la carrera. Paciencia, y a empezar de nuevo”, comentó Pasquet. Finalmente, Castillo expresó que “en verdad” no tiene cintura ni tampoco “la capacidad de tolerar cualquier cosa” y concluyó poniéndose a las órdenes de Rachetti “como un ciudadano más”.