La Corte Electoral resolvió ayer negativamente el pedido presentado por el Partido Independiente (PI) para habilitar la posibilidad de votar partidos políticos diferentes de forma simultánea en las próximas elecciones departamentales y municipales del 10 de mayo, lo que popularmente se conoce como “voto cruzado”. La moción contó con las posiciones contrarias de los cuatro ministros del Frente Amplio (FA) y las dos representantes del Partido Nacional (PN), por lo que obtuvo la oposición de seis de los nueve miembros de la Corte. Respaldaron la iniciativa los ministros del Partido Colorado y el presidente de la Corte Electoral, José Arocena (que no responde a ningún partido).
El voto cruzado era un tema que dividía las internas partidarias tanto en el FA como en el PN. En el oficialismo la iniciativa contaba con el respaldo explícito del Movimiento de Participación Popular y, si bien otros sectores también apoyan el voto cruzado, no se estaba de acuerdo en hacer un cambio de este tipo a tres meses de la instancia electoral. El Frente Liber Seregni, Compromiso Frenteamplista y el Partido Socialista entendían que el tema debía aprobarse por ley, mientras que el Partido Comunista y el Partido por la Victoria del Pueblo se oponían a la iniciativa. La posición, contraria a la propuesta del PI, fue resuelta el viernes en la Mesa Política del FA. Uno de los vicepresidentes del FA, Juan Castillo, explicó que nada había cambiado desde la elección anterior como para introducir esta modificación por la vía de la reglamentación administrativa de las elecciones que realiza la Corte Electoral.
En el PN el tema enfrentaba a los dos principales sectores. Todos Hacia Adelante, el sector encabezado por Luis Lacalle Pou, estaba de acuerdo con la iniciativa, pero no así Alianza Nacional y su líder, Jorge Larrañaga, quien la semana pasada se preguntó: “Si [el voto cruzado] se impulsa en nombre de la libertad del ciudadano, ¿por qué entonces no se permite el voto cruzado para diputados y senadores?”. El senador también dijo que “los alcaldes deberían tener una sintonía mínima con los intendentes de su partido. Lo otro perjudicaría el funcionamiento del gobierno”. El lunes 26 de enero, el directorio nacionalista resolvió transmitir a sus ministras en la Corte Electoral que la postura partidaria era que no se habilitara el voto cruzado, en vista de que hay distintas posturas y que restan pocos meses para la elección, explicó entonces el presidente del directorio, el senador Luis Alberto Heber.
Durante la sesión de la Corte Electoral de ayer se esgrimieron varias consideraciones de corte legal. Se expuso que el voto cruzado no está previsto en la Constitución de la República (que afirma que “el sufragio se ejercerá en la forma que determine la Ley”) y que eso tampoco fue legislado durante las sucesivas leyes de descentralización que reglamentaron las elecciones municipales y las potestades de los municipios. En ese aspecto, se consideró que el tema debía ser modificado por vía legislativa y que, por tratarse de una ley electoral, requiere de dos tercios de los votos de las cámaras para su aprobación, explicó la ministra del PN Sandra Etcheverry. El organismo ya había tomado esta resolución en 2010, ante una consulta similar. “La Corte Electoral no puede cambiar a menos de cuatro meses [la forma de] las elecciones”, dijo uno de los ministros.
La Corte Electoral también tomó ayer otra decisión similar a la que ya había adoptado en 2010, en la previa de las elecciones departamentales y municipales de aquel entonces, en relación a la forma de votación. El organismo tuvo que resolver cómo se procesará el voto en caso de que se inserte en el sobre de votación una hoja correspondiente a un municipio distinto al que pertenece el ciudadano: si se anulaba todo el voto o sólo el voto a los organismos municipales. Finalmente, y tras una reconsideración, la Corte se inclinó por esta última opción. Se prevé que el hecho pueda ser frecuente fundamentalmente en Montevideo, donde muchos ciudadanos no viven en la circunscripción en la que están inscriptos y el departamento está dividido en ocho municipios que geográficamente limitan entre sí.
Hoy los ministros deberán resolver otra cuestión: si es válido que los candidatos a alcaldes por un partido político hayan participado en la interna de otro partido, lo que puede afectar en el armado de las listas, fundamentalmente, al Partido de la Concertación.