La planta baja del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) se reorganizó ayer de tarde para conformarse como salón de actos de la asunción de las autoridades. Sin embargo, la estructura montada no esperaba los centenares de personas que finalmente concurrieron, entre los que se destacaron el ex presidente José Mujica y la maestra de tercer año de escuela del ministro, quien evocó la importancia de las “raíces” en la gestión. En el mismo lugar en que asumió hace cinco años, Tabaré Aguerre dijo “soñar con un país donde la tierra sea sinónimo de desarrollo” y que proyectos “como los del agua” fueron la razón principal que lo llevó a asumir.

“Hace cinco años el presidente Mujica sorprendía a propios y ajenos -y hasta a mí mismo- cuando me nombró ministro […] y hoy, cinco años después, siento profundo agradecimiento y reconocimiento por el respaldo y apoyo permanente de los tres ministros [frenteamplistas] que me precedieron: [Andrés] Berterreche, [Ernesto] Agazzi y [José] Mujica”.

También destacó, emocionado, a su maestra de tercer año -“la culpable de que esté hoy acá”-, a un dirigente del sector cítrico -un área que “estaba condenada a desaparecer hace cinco años y hoy tiene esperanzas”-, a su esposa y familiares. El resto del público estaba compuesto por ministros como el de Economía y Finanzas, Danilo Astori, y su subsecretario, Pablo Ferreri, y sus pares de Turismo y Deporte, Liliam Kechichián y Antonio Carámbula; legisladores como el senador Agazzi y los diputados Alfredo Asti y Óscar Andrade; la presidenta del Frente Amplio, Mónica Xavier; el ex intendente nacionalista de Río Negro Omar Lafluf; dirigentes sindicales, técnicos y funcionarios, mientras Mujica se había excusado por su demora provocada por un desperfecto en su vehículo.

“Lo que se inició no está terminado”

Volcándose al futuro y a la gestión que comienza, Aguerre dijo que más que la continuidad de “una persona, es la de un proceso”, y en ese sentido, “no inventamos la pólvora”. Continuará con su plan de un Uruguay Agrointeligente basado en cinco ejes estratégicos: inserción internacional competitiva, conservación de los recursos naturales, adaptación al cambio climático, desarrollo rural en expansión y políticas interinstitucionales.

“Uruguay es inserción internacional o no es Uruguay, pero para integrarse lo tiene que hacer en base a la competitividad”, afirmó Aguerre, quien consideró a ésta como “mucho más que el tipo de cambio: eficiencia productiva primaria, la capacidad de industrialización y la de negociación”. Pero junto a esto prima la conservación de los recursos naturales. “Hoy no nos queremos conformar con el concepto cuantitativo de las personas que alimentamos, nos importa también el aspecto cualitativo”, dijo Aguerre, quien pretende llevar a cabo una “intensificación productiva sostenible”, priorizando junto al aumento de la producción, los “balances positivos de carbono” y el “aprovechamiento integral del agua” de manera que “la ciencia, la tecnología y la innovación” permitan al país “acceder a un segundo piso”.

Otros proyectos para la nueva gestión se focalizan en la modernización de los procesos y procedimientos, que permitirá, según Aguerre, “un seguimiento más profundo de la acción y de los trámites de este ministerio”. “Todos éstos tienen que estar al servicio de una lógica de oportunidades y desarrollo” que en el caso uruguayo, para Aguerre, está “ligada al desarrollo del interior”.

El desarrollo del interior “no implica sólo electrificación y oportunidades de trabajo”, sino que es un concepto “mucho más amplio, que va desde la educación, la salud, los servicios, las comunicaciones, pero sobre todo, la posibilidad de la gente de trabajar en procesos que le permitan elegir ser productores, porque lo entienden como una actividad válida y genuina, y les complace vocacionalmente dedicarse a esa actividad”. En este sentido, Aguerre prometió una cartera que durante este período se vuelque a los micro, pequeños y medianos productores, buscando “corregir asimetrías con razones históricas”, asegurar los bienes públicos y “tratando diferente lo que es diferente”.