Semana a semana, la oferta electoral de la oposición en Montevideo genera desconcierto. A la escasa convocatoria de los candidatos reunidos en el Partido de la Concertación, se agrega la desilusión de quienes reunieron las firmas, reservaron dirigentes y alcanzaron los primeros acuerdos de cara al programa común que debieron presentar ante la Corte Electoral. El diputado y ex candidato Jorge Gandini, que se bajó de la competencia luego de que Luis Lacalle Pou hiciera valer sus votos en la interna del Partido Nacional (PN) para decantarse por la candidatura de Álvaro Garcé, comentó ayer a la diaria sus impresiones sobre la campaña electoral en Montevideo hacia el 10 de mayo: “La campaña, en general, la estoy viendo insípida; toda la campaña. No ha tomado volumen ni contenido. Está rara, fría. Todo el mundo habla de lo mismo, todos dicen lo mismo, todos están haciendo recorte y pegue de internet. La campaña de contenidos ha sido en general muy pobre porque no hay debate. El Frente no les contesta a los candidatos de la Concertación en materia de propuestas, y no hay debate formal ni público”.

Gandini, que había lanzado el movimiento Montevideo Se Puede, buscando instalarse con tiempo para ganar espacio en un departamento que hace un cuarto de siglo retiene el Frente Amplio, habló también de la ausencia de actos conjuntos del Partido de la Concertación. “El acto tiene que ser una manifestación de resultados. Si hay consustanciación o vivencia del Partido de la Concertación me parece bien, pero tampoco hay mucho de eso. Cada candidato está sumando su aporte y su esfuerzo convergente, en un sobreentendido de coincidencias que creo que existen, sin profundizar mucho”, opinó el diputado nacionalista. Más allá del lema, blancos y colorados presentan a sus candidatos bajo los rótulos de Partido Nacional o Partido Colorado, sin identificarlos directamente con la Concertación. A diferencia de los otros dos, Novick concentra sus esfuerzos en mostrarse no sólo desideologizado, sino también despartidizado.

Para Gandini, “la Concertación no maduró lo suficiente para ser partido”, por “distintas razones que tienen que ver con su tiempo de nacimiento y su desarrollo traumático”. Con estas palabras, el ex candidato a la intendencia se refirió a su frustrada candidatura, que en un principio había logrado guiños no sólo de los blancos de Jorge Larrañaga, reunidos en el sector Alianza Nacional: en un gesto que se interpretó en su momento como un signo de apoyo, varios dirigentes del herrerismo asistieron a fines de agosto de 2013 a un acto de presentación de propuestas que tuvo lugar en el hotel Radisson. Para el diputado blanco, al nuevo partido “le llegó el tiempo de las individualidades antes de construir un tiempo colectivo”.

Gandini propondrá que se haga una autocrítica cuando concluya el ciclo electoral: “Tenemos que analizar, sea cual sea el resultado, nuestro desempeño, porque lideramos una innovación en el sistema político que fue construir una alianza electoral, y hay que evaluar el resultado”. En caso de que sea negativo, Gandini considera que debería analizarse “si eso es producto de la idea o de quienes la lideraron”.