Las empresas de gas no están repartiendo garrafas. Los contestadores de DUCSA y Riogas explican que “por motivos de fuerza mayor” no se pueden recepcionar los pedidos, mientras que los de Acodike y Megal responden que los locales se encuentran sin productos debido a las medidas gremiales.

El conflicto surge a raíz de la conformación de un “sindicato amarillo” en Acodike, según denuncian dirigentes sindicales de la empresa. Yuri Pérez, dirigente del Sindicato Único de Trabajadores del Supergás (SUTS), explicó a la diaria que las medidas afectan el trabajo en la planta de envasado, el área de distribución y el call center, e incluyen también a trabajadores de las plantas del interior del país.

El paro comenzó el jueves; desde el miércoles integrantes del SUTS realizan un campamento frente a la planta de Acodike de camino Lecocq y bulevar Batlle y Ordóñez.

Los trabajadores denuncian “persecución sindical” de la empresa. La gota que desbordó el vaso cayó cuando la Policía detuvo a uno de los dirigentes sindicales de Acodike luego de que terminara una asamblea; Pérez detalló que se lo llevaron del vestuario de la planta, por tres horas, y que lo soltaron por no encontrar motivos para mantenerlo detenido.

El conflicto no es sólo con la patronal, sino también con la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (FUECYS), rama a la que pertenece el SUTS.

La semana previa a Turismo, FUECYS y Acodike tuvieron una reunión en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS). Pérez explicó que el SUTS no intervino en ese encuentro y que las partes “firmaron un acta en la que dice que se pueden sentar a negociar con un grupo minúsculo de trabajadores de Acodike, que no llegan a 20”. “Cuando a nosotros, que representamos a toda la rama del supergás y somos el sindicato histórico, no se nos tuvo en cuenta”, cuestionó el dirigente.

Pérez denunció que “esos trabajadores son los que formó y avala Acodike” y que son los mismos que impidieron el ingreso de la Comisión de Seguridad Laboral del gremio y de la Inspección General de Trabajo cuando hicieron un relevamiento de las condiciones de seguridad en todas las plantas de la empresa.

El trabajador que detuvo la Policía es representante del SUTS pero no pertenece a lo que Pérez denomina el “grupo minúsculo”. Según el dirigente, “la persecución está unida a la firma del acta que avala a trabajadores que no son representativos de toda la rama”.

Hoy a las 9.00 en el MTSS tendrá lugar una reunión a la que concurrirán delegados de FUECYS, de la Dirección Nacional de Trabajo y probablemente de Acodike, anunció Pérez.

“Vamos a pedir que FUECYS se rectifique por firmar esa acta, que va en contradicción con una en la cual se nos avala a nosotros, que históricamente somos los que firmamos los Consejos de Salarios y participamos en la tripartita. FUECYS tiene que dar marcha atrás, y tiene que haber una postura de la empresa diciendo que va a respetar los fueros sindicales y que a los trabajadores no los va a reprimir dentro de la empresa”, insistió el dirigente.

A la reunión en el MTSS probablemente concurra el director nacional de Trabajo, Juan Castillo, quien ayer de mañana fue al campamento del SUTS para conocer los argumentos del sindicato.

Luego de la reunión el SUTS realizará una asamblea, después de la cual se levantaría el paro.