Hoy se conformará en la Cámara de Diputados de Brasil una comisión especial que estudiará un proyecto para reducir la edad de imputabilidad penal en ese país de 18 a 16 años. El texto ya pasó por el análisis de una comisión legislativa que resolvió que la iniciativa es constitucional, lo que determinó que siguiera su trámite. Ante esta situación, un grupo de organizaciones sociales en Brasil firmó una proclama contra el proyecto que se llama, emulando al movimiento uruguayo, “Não à redução”. La apoyan más de 70 organizaciones de derechos humanos, feministas, sindicales y partidarias, entre ellas la Central Única dos Trabalhadores (CUT), la juventud del Partido de los Trabajadores y organizaciones de estudiantes y de abogados.

Pero las semejanzas no terminan allí. Integrantes del comité contra la baja brasileño se comunicaron con Proderechos de Uruguay y le pidieron autorización para utilizar la estética del movimiento uruguayo; al ingresar a la página del comité en Facebook, lo primero que aparece es el colibrí que caracterizó a la comisión que logró frenar la aprobación de la baja de la edad de imputabilidad en las elecciones del año pasado.

Los argumentos que figuran en la página para oponerse a la iniciativa también son similares a los que se utilizaron en Uruguay: el proyecto violaría convenios internacionales suscritos por Brasil; es inexacto sostener que los adolescentes tienen una participación relevante en los altos índices de criminalidad -”los jóvenes de 16 a 18 años son responsables de apenas 0,9% del total de crímenes cometidos en el país”, señala el comité-; el encarcelamiento no resuelve la situación, sino al contrario; y en los países en los que se aplicó la medida, ésta no fue efectiva.

“A raíz de la propuesta que se debate en Brasil, organizaciones sociales de ese país nos contactaron para que les cediéramos los materiales de comunicación y la estética que se había utilizado en la campaña en Uruguay”, explicó a la diaria Andrés Risso, de Proderechos. A los contactos por Skype que mantuvieron hasta ahora se suma un viaje de integrantes de Proderechos a Brasil para reunirse con el comité, que se proyecta hacer “muy pronto” para ver “desde qué lugar podemos aportar e informarnos de cómo sigue la campaña”, señaló Risso.

Más allá de este intercambio puntual, Proderechos está coordinando con organizaciones de Brasil, Argentina y Chile acciones conjuntas para promover la agenda de derechos en la región. En Uruguay, la intención de algunos referentes que participaron en el movimiento No a la Baja es instalar un debate sobre el paradigma actual de seguridad y convivencia, aunque hasta el momento no se definieron acciones concretas.